21 diciembre,2022 4:55 am

La crisis política en Perú va para largo

Gaspard Estrada 

 

 

 

Desde hace poco menos de dos semanas, Perú vive en estado de crisis constitucional. Tras la caída de Pedro Castillo, no menos de veinticinco personas han fallecido en las calles de la capital, Lima, a raíz de la represión policial de las protestas en contra de la nueva presidenta de ese país, Dina Boluarte.

Esta última, nacida en el mismo Sur andino que manifiesta contra su gobierno, ha multiplicado las entrevistas con los medios para intentar normalizar la situación. Para ello, habló en quechua a los periodistas para acercarse a sus paisanos desfavorecidos. También lo hizo con sus antiguos correligionarios – los diputados del partido Perú Libre, que la postuló junto con Pedro Castillo el año pasado -, sus grandes enemigos en la actualidad: primero para que detengan los actos violentos que acompañan a las protestas y segundo, para que voten a favor del adelanto de las elecciones presidenciales y legislativas para el año que viene.

Sin embargo, todo indica que no ha sido escuchada. Si bien el 83% de la población quiere adelantar las elecciones, la primera votación en el Congreso no obtuvo apoyos suficientes al chocar de frente con una alianza contranatura: la izquierda radical que apoya a Castillo y la derecha más extrema y conservadora, representada por Avanza País y Renovación Popular, encabezada por el nuevo alcalde de Lima, el trumpista Rafael López Aliaga. En cambio, la bancada fujimorista de Fuerza Popular sí votó en bloque por el adelanto de las elecciones generales. A raíz de ello, la mandataria decidió prescindir de su primer ministro, el jurista Pedro Angulo, quien además de estar marcado por denuncias de acoso, tampoco ha respondido al incendio que sufre su país

Mientras tanto, la violencia sigue en las calles. Hasta el momento, la Defensoría del Pueblo ha constatado la muerte en los enfrentamientos y en las protestas de una veintena de personas, la mayoría muy jóvenes, además de cinco más por culpa de los bloqueos. La cifra de policías y militares heridos se eleva a casi trescientos.

Las fuerzas armadas han anunciado que investigarán los episodios violentos que han acarreado gran parte de las muertes. Testimonios recogidos por las asociaciones de derechos humanos aseguran que militares dispararon con armas de guerra contra quienes los enfrentaban.

La presidenta detalló cómo el miércoles recibió un aviso para que huyera de su casa. Pocas horas después juramentaba como primera mandataria, tal y como marca la Constitución peruana. Todo ello sucede mientras el expresidente Pedro Castillo cumplía su tercera noche en el penal de Barbadillo, a pocos metros del expresidente Alberto Fujimori. Ambos son los únicos inquilinos de esta cárcel limeña, que será visitada en las próximas horas por la delegación enviada por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH). Por su lado, la Secretaria de Relaciones Exteriores de México está tramitando el asilo político para la mujer y los hijos de Pedro Castillo, que en un primer momento intentaron asilarse en la Embajada en Lima.

De manera más general, la continua crisis política peruana deja en evidencia que sin una reforma política de fondo, que permita delimitar las competencias de los tres poderes, terminar con la relación espuria entre el dinero y la política, y disminuya la fragmentación partidaria en el Congreso, será muy difícil transitar hacia un régimen político estable, y que permita generar un crecimiento inclusivo. Infelizmente, todo apunta a que las cosas sigan igual. Como durante la legislatura anterior, en la que cuatro presidentes ascendieron y cayeron en menos de cinco años, es más que probable que esta inestabilidad se mantenga durante los próximos meses.

Dina Boluarte ha sido incapaz hasta ahora de construir una mayoría política sólida en el Congreso, y más allá, en la sociedad peruana. Si su principal instrumento político es la fuerza, lo más probable es que después de un tiempo, su poder disminuya y pase a ser amenazada por un proceso de destitución.

 

 

 

* Director Ejecutivo del Observatorio Político de América Latina y el Caribe, con sede en París

Twitter: @Gaspard_Estrada