Además rechazó la violencia y trato inhumano ejercido sobre la alcaldesa del municipio de Vinto, Patricia Arce, que estuvo retenida durante una hora por manifestantes opositores, “al igual que las agresiones realizadas a otras mujeres, hombres, jóvenes y niños”. El ministro de Defensa de Bolivia, Javier Zavaleta, advirtió: “estamos a un paso de que esto se descontrole y comencemos a contar muertos por docena”.
La Paz, Bolivia, 8 de noviembre de 2019. El Sistema de Naciones Unidas en Bolivia llamó al gobierno y a la oposición a emprender un diálogo para zanjar la crisis desatada por la reelección del presidente, Evo Morales, con el objetivo de “evitar más muertes y recuperar la paz”.
La ONU expresó su “profunda consternación e indignación” por la muerte de un joven durante los enfrentamientos que se produjeron el miércoles en la ciudad de Cochabamba entre simpatizantes y detractores de Morales, que dejaron también cerca de 90 heridos. Otras dos personas murieron la semana pasada en incidentes similares en Santa Cruz.
“El Sistema de Naciones Unidas en Bolivia condena enérgicamente el fallecimiento de una tercera víctima de la intolerancia y violencia que continúan en el país (…). Nada justifica el enfrentamiento entre bolivianas y bolivianos y es absolutamente inconcebible la muerte de ciudadanos”, ha dicho la ONU en un comunicado.
La organización internacional reclamó a la policía, la Fiscalía y las autoridades judiciales “que investiguen, procesen y sancionen a la brevedad posible a las personas responsables de estos atroces crímenes”.
Asimismo, rechazó “la violencia y trato inhumano ejercido sobre la alcaldesa del municipio de Vinto”, Patricia Arce, que estuvo retenida durante una hora por manifestantes opositores, “al igual que las agresiones realizadas a otras mujeres, hombres, jóvenes y niños”.
“Naciones Unidas recuerda a las autoridades competentes que es su deber garantizar, en todo momento, el respeto, protección y garantía de los Derechos Humanos de todos los bolivianos y les exhorta a que actúen preventivamente ante cualquier acto de violencia”, ha pedido.
Por otro lado, tras la violencia en las protestas del miércoles en Cochabamba, que dejó al menos un muerto y 90 heridos, el Ministro de Defensa de Bolivia, Javier Zavaleta, advirtió que la situación es volátil.
“Estamos a un paso de que esto se descontrole y comencemos a contar muertos por docena”, aseguró, de acuerdo con el diario local El Debate.
Mientras Zavaleta culpó por la violencia a la oposición, que exige la renuncia de Evo Morales y la celebración de elecciones, el líder opositor Carlos Mesa aseguró culpó a miembros del oficialista Movimiento al Socialismo.
Las protestas en Bolivia estallaron la misma noche de las elecciones presidenciales celebradas el pasado 20 de octubre por la suspensión repentina de la transmisión de los resultados oficiales justo cuando obligaban a una segunda vuelta entre Morales y el candidato opositor Carlos Mesa.
Cuando se retomó, casi 24 horas después, concedían la victoria en primera vuelta a Morales, por lo que Mesa ha denunciado un “fraude gigantesco”. Ambos llamaron a la movilización de los suyos, lo que ha derivado en disturbios.
Al menos tres personas han muerto y más de 190 han sido detenidas en estas dos semanas.
En tanto, el gobierno boliviano rechazó ayer las demandas de la renuncia del presidente Evo Morales por parte de opositores por considerarlas inconstitucionales.
Exhortó a esperar los resultados de la auditoría de la Organización de los Estados Americanos (OEA) a las elecciones generales como la alternativa más viable para pacificar Bolivia.
En conferencias de prensa separadas, el vicepresidente Alvaro García Linera, y la ministra de Culturas, Wilma Alanoca, expusieron las razones para rechazar las demandas de renuncia de Morales, además de la violencia en los bloqueos y el afloramiento del racismo.
García Linera exhortó al candidato de Comunidad Ciudadana (CC), Carlos Mesa, y al dirigente del Comité Cívico Pro Santa Cruz, Luis Fernando Camacho, a parar la escalada de violencia y aceptar la vía democrática para resolver el conflicto.
“No promuevan más violencia y no hagan más daños a la gente, no afecten a campesinos, gremiales, vecinos, a pequeños propietarios que están siendo maltratados por estas convocatorias”, dijo.
Texto: Europa Press / Xinhua / Agencia Reforma / Foto: Europa Press
