18 septiembre,2020 5:20 am

La política que Guerrero necesita

Jorge Camacho Peñaloza

 

La política es la consagración del oportunismo de los que tienen medios y recursos. La revolución abre paso al mérito verdadero, a los que tienen valor e ideal sincero.

Fidel Castro.

 

El proceso electoral que está legalmente próximo a arrancar para la sucesión en el gobierno del estado debería ser una oportunidad para avanzar en el ejercicio de una política de mayor estatura, dejar atrás los arrebatos y caprichos personales, la hipocresía y la banalidad, el rancio clientelismo y uso ventajista de los recursos públicos para hacerse proselitismo, en el actual contexto político del país el electorado ya esta un piso más arriba en la forma de valorar la política, sin embargo, parece que muchos aspirantes no se dan cuenta y tratan de hacerse notar con prácticas del viejo régimen que combatieron.

La inexperiencia en hacer política, el estilo del poder por el poder, el deseo de figurar por figurar o de obtener privilegios al estilo del viejo régimen y la imberbe ambición del delegado federal, Pablo Amílcar Sandoval Ballesteros, de ser el candidato de Morena para la gubernatura del estado, lo está llevando a generar divisionismo y conflictos al interior de Morena.

La inexperiencia en hacer política. Ni como figura influyente en el PRD donde militó y luego en Morena con el que prácticamente, como un desconocido, llegó a Guerrero en calidad de delegado con funciones de presidente estatal del partido, proveniente de chilangolandia mejor conocida como la Ciudad de México donde nació; ni en cargos importantes de la administración pública como la que encabezó Andrés Manuel López Obrador como jefe de Gobierno donde laboró, ha adquirido experiencia para hacer política, porque, también creer tener ideología de izquierda o de derecha no significa tampoco que seas o estés haciendo política, por ello el funcionario aspirante no oculta verse desbordado por la emoción de ser candidato como si sólo por ser de descendiente de dos hombres de grandes convicciones como el doctor Pablo Sandoval Cruz y el extinto y legendario Pablo Sandoval Ramírez, dieran el derecho a ser candidato porque, ciertamente, las virtudes no se adquieren por descendencia, sino por ideales que llevados a la práctica generan una praxis consecuente que definen íntegramente la cualidad política de un militante.

El poder por el poder. Hoy más que nunca es más visible y la ciudadanía percibe más mal que, en plena Cuarta Transformación en marcha, recordándonos todos los días sus principios su máximo líder, Andrés Manuel López Obrador, un funcionario federal ande haciendo uso de su cargo y de recursos campaña, al estilo del viejo y aún presente régimen neoliberal, para ser candidato a la gubernatura, es decir usando el poder federal en la búsqueda del poder, mediante entrevistas por aquí entrevistas por allá, organizando eventos oficiales del Gobierno Federal, como ya lo dije, con chile frito por aquí y cadenas de cempasúchil por allá, para promover su nombre e imagen con miras a las encuestas que seguramente se harán definir al candidato de Morena a gobernador del estado para la elección de junio del año que viene. Es decir, esa búsqueda del poder por el poder está pululando una rancia esencia de político del viejo régimen.

Hacer política desventajosa genera conflictos, cuidado, en Guerrero eso es muy delicado, los guerrerenses ya no soportarán un intento más de pretender manipularlos o imponerse sin méritos y ventajosamente, hoy el guerrerense simpatizante de Morena tiene un empoderamiento con nombre y apellido que lo alienta a protestar ante lo que considera injusto o tramposo, se llama AMLO, para que buscarle chichis a las gallinas.

Guerrero necesita política limpia, precisamente esa política de hipocresía es la que lo mantiene como uno de los estados con menos desarrollo, con más pobreza, ojalá que los que ya andan abiertamente en pleno proselitismo y los que faltan por declarar su interés, aquilaten esta necesidad para subirle el nivel a la calidad de la política en este proceso electoral que viene.

México y Guerrero ya no están en los tiempos de la política tramposa, estamos ya en los tiempos de la política madura, respetuosa de los tiempos, de las leyes, del ciudadano; no se trata de la elección de un comité estudiantil, ya no se está en los tiempos en los que los cargos de elección eran vistos como una aspiración personal, ahora Guerrero y México están insertos en procesos históricos devienen de toda una trayectoria histórica de la que para aspirar a ser se debe ser parte de esa trayectoria y eso no cualquiera.

Vuela vuela palomita y ve y dile: A todo aquel funcionario que aspire a gobernar Guerrero que, sí de verdad andan que quieren, que renuncien y no anden con cabeza hueca, no porque sean de izquierda crean que pueden hacer política chueca.