Chilapa, Guerrero, 7 de febrero de 2021. El obispo Salvador Rangel Mendoza informó que durante las celebraciones de Semana Santa los sacerdotes evitarán tocar a los feligreses y las multitudes por la pandemia, pero insistió en que las iglesias no se van a cerrar porque no se puede renunciar al derecho a la asamblea.
“Aunque haya leyes civiles que entorpecen la vida de la Iglesia, tenemos nuestras propias leyes”, opinó en declaraciones este domingo. Explicó que el Miércoles de Ceniza a los asistentes se les va a esparcir en la cabeza, en Viernes Santo se evitarán viacrucis tumultuosos, y pidió a la población evitar juntarse en fiestas.
Rangel Mendoza también indicó que dentro de la Diócesis tres sacerdotes contagiados están en asilamiento, además de que cinco han fallecido.
A pregunta sobre el colapso en los hospitales de regiones del estado como Tierra Caliente, Iguala y Acapulco, respondió que ya lo han experimentado en Taxco y la capital, que se están colapsando y el oxígeno no es suficiente.
Además, criticó las medidas como la malla ciclónica colocada en el mercado de Chilpancingo porque, dijo, en las calles laterales hay una importante aglomeración de gente.
Texto y foto: Luis Daniel Nava
