18 marzo,2022 9:09 am

Las tropas rusas avanzan hacia la zona de Rubizhne en la región separatista de Lugansk

Los bombardeos no cesan en la zona, no solo en Severodonetsk, sino también en Popasna, Lysychansk y Kreminna. En Kiev, las alarmas antiaéreas vuelven a sonar esta madrugada. Zelenski llama a Alemania a derribar el “muro” que Rusia erige en Europa. Scholz promete más apoyo a Ucrania y vuelve a rechazar una intervención de la OTAN en el conflicto

Madrid / Berlín, 18 de marzo de 2022. El gobernador de la provincia separatista de Lugansk, Sergii Haidai, aseguró que el ejército ruso estaría tratando de “tomar” la zona de Rubizhne y Severodonets y confirmó que las autoridades preparan ya un corredor humanitario para el 20 de marzo.

En un vídeo publicado en Telegram en el canal oficial de la Milicia Popular de la República Popular de Lugansk (LPR), un soldado uniformado aseguró que la bandera separatista ondea en la ciudad, tal y como señaló la cadena estadunidense CNN.

Horas antes, el Estado Mayor General de las Fuerzas Armadas de Ucrania informó en su perfil oficial de Facebook que las tropas rusas habrían avanzado hacia Severodonetsk, a escasos trece kilómetros de Rubizhne.

Haidai también había relatado en una entrevista con un medio ucraniano, publicada en su perfil oficial de Facebook, que los bombardeos no cesaban en la zona, no solo en Severodonetsk, sino también en Popasna, Lysychansk y Kreminna.

El Estado Mayor General de las Fuerzas Armadas ucranianas también aseguró que Rusia “continúa tomando medidas para compensar la pérdida de personal a expensas de los extranjeros”, por lo que, según los informes, “los ocupantes rusos ya reclutaron a unos mil voluntarios del llamado ejército de Bashar al-Assad y Hezbolá.

Por otro lado, las alarmas antiaéreas volvieron a sonar en la madrugada del viernes en la capital de Ucrania, Kiev, según ha informado la agencia de noticias ucraniana Ukrinform. Con respecto a los bombardeos en los alrededores de la capital, una persona murió y otras tres, incluido un niño, resultaron heridas en un bombardeo ayer en el distrito de Sviatoshynskyi.

El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, afirmó ayer ante el Parlamento alemán que Rusia está construyendo un “muro” en Europa que amenaza con dividir de nuevo el continente y pidió un mayor apoyo de Berlín.

“De alguna manera, (ustedes) están de nuevo detrás del muro, no del muro de Berlín, sino en medio de Europa, donde hay libertad. Y este muro es más fuerte con cada bomba que cae en nuestro suelo en Ucrania”, se lamentó en un discurso transmitido en vivo por vídeo al recinto del Reichstag de la capital germana.

Zelenski comparó la actual situación con la Guerra Fría y una Europa dividida entre los que disfrutan de la libertad, como los alemanes, y los que sufren bajo la tiranía.

Hizo también referencia al famoso llamamiento del presidente estadunidense Ronald Reagan al líder soviético Mijail Gorbachov para “derribar” el Muro de Berlín.

“Querido canciller Scholz, destruya este muro. Dé a Alemania el papel de liderazgo que se merece”, urgió Zelenski al jefe de gobierno germano, el socialdemócrata Olaf Scholz.

Zelenski fue particularmente crítico sobre la cancelación del Nord Stream 2, un polémico gasoducto de gas natural de Rusia a Alemania, afirmando que había llegado demasiado tarde.

Alemania suspendió el proceso de aprobación del Nord Stream 2 después de que Rusia reconociera formalmente la independencia de las provincias escindidas del este de Ucrania, en un paso previo al ataque a gran escala contra el país.

“Rusia está bombardeando nuestras ciudades y destruyendo todo lo que hay en Ucrania. Son casas, hospitales, escuelas, iglesias, todo. Con misiles, con bombas aéreas, con artillería. En tres semanas murieron muchos ucranianos, miles. Los ocupantes mataron a 108 niños, en plena Europa, en el año 2022”.

Aludiendo de nuevo al turbulento siglo XX de Alemania, añadió: “Una vez más, en Europa, alguien intenta aniquilar a todo un pueblo”.

Scholz, por su parte, prometió más apoyo al tiempo que volvió a rechazar una intervención de la alianza militar OTAN en el conflicto. Durante una reunión con el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, Scholz destacó que actualmente se está respaldando a Ucrania con el envío de armas.

“Alemania está haciendo su contribución y seguirá haciéndolo”, aseguró el canciller germano. Sin embargo, también reiteró que “la OTAN no intervendrá militarmente en esta guerra”.

Por otro lado, Zelenski anunció a última hora de ayer que para Ucrania “no es el momento de revelar nuestras tácticas de negociación”, durante el discurso diario que envía a la nación desde que el 24 de febrero empezó la ofensiva rusa.

“No es el momento de revelar nuestras tácticas de negociación. Negociaciones por la paz, la soberanía, la integridad territorial de nuestro estado, nuestra libertad. Trabajando en silencio, más que en televisión, radio o Facebook. Creo que esto es lo correcto”, recalcó el mandatario.

Respecto a las tropas de Rusia, mencionó que las Fuerzas Armadas de Ucrania “las están reduciendo cada día. Pero todavía tiene números, equipos y reservas”, afirmó.

Además, agregó que tiene información de que “el ejército ruso está reclutando mercenarios de otros países, tratando de engañar a tantos jóvenes como sea posible para que hagan el servicio militar”.

En la jornada vigesimosegunda jornada de guerra, Zelenski visitó en el hospital a la “maravillosa” familia Vlasenko de Vorzel, en la región de Kiev. Los miembros de esta familia escaparon de un bombardeo ruso.

Por otro lado, la parlamentaria ucraniana Olga Stefanishina aseguró ayer que más de cien personas fueron rescatadas de entre las ruinas de un teatro en la ciudad de Mariúpol (sureste) que fue atacado el miércoles y en el que se encontraban refugiados cientos de civiles ante el bloqueo de la ciudad en el marco de la ofensiva militar rusa.

El gobierno de Ucrania estima que el 80 por ciento de las viviendas de Mariúpol fueron destruidas. Y anuncia acuerdos para abrir nueve corredores humanitarios ayer, incluido uno desde Mariúpol.

El ministro de Defensa ucraniano, Oleksi Reznikov, reclamó ayer más ayuda a la Unión Europea para hacer frente a la invasión rusa, en particular que agilice la llegada de más armas y mantenga las sanciones contra Vladimir Putin, al que calificó de “nuevo Hitler”.

En tanto, el secretario de Defensa de Estados Unidos, Lloyd Austin, volvió a mostrar ayer la oposición de Washington al establecimiento de una zona de exclusión aérea en Ucrania, aduciendo que, de estar en vigor, implicaría “estar en conflicto con Rusia”.

Por su parte, el primer ministro de Polonia, instó a los líderes de otros gobiernos de la Unión Europea a seguir su ejemplo y visitar Kiev, en un exhorto que dirigió especialmente a los principales responsables políticos de Francia, Emmanuel Macron; Reino Unido, Boris Johnson; y Alemania, Olaf Scholz.

Hay una crisis humanitaria sin precedentes por la invasión a Ucrania, advierte la ONU

La invasión de Ucrania ordenada el 24 de marzo por el presidente de Rusia, Vladimir Putin, derivó en una crisis humana de proporciones aún desconocidas pero que deja ya datos sin precedentes recientes, como el éxodo de más de tres millones de personas y la devastación de zonas urbanas con presencia de población civil.

El Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos tiene confirmadas ya unas mil 900 víctimas civiles desde que estalló el conflicto, de las cuales más de 700 son fallecidos. Sin embargo, asume que el dato real será mayor, en la medida en que tarda en verificar datos y hay áreas como Mariúpol que son un agujero negro informativo fruto del asedio ruso.

Las autoridades locales de este enclave a orillas del mar de Azov denunciaron que más de 2 mil personas fallecieron sólo en Mariúpol y el gobierno de Ucrania estima que en todo el país murieron ya más de un centenar de niños. En lo que sí coinciden todos los observadores, es en que los civiles están sufriendo en primera persona las consecuencias del conflicto.

De hecho, más de 3.1 millones de personas salieron de Ucrania en estas dos semanas, con unos dos millones de refugiados en Polonia. Rumanía ronda las 500 mil llegadas, mientras que Moldavia recibió a 350 mil personas, Hungría a 282 mil y Eslovaquia a 228 mil, según el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR), que actualiza diariamente los datos.

Texto: Europa Press / DPA