Biden insta a Netanyahu a “minimizar daños a civiles” en Beirut. Las fuerzas israelíes insisten en que su guerra es contra Hezbolá y destacan que sus ataques no son en el centro de la capital libanesa. El Estado judío mata a dos “comandantes” de Hezbolá en “bombardeos precisos” en el sur del país árabe
Ciudad de México, 10 de octubre de 2024. El Ministerio de Salud de Líbano ha informado ayer de que 2 mil 141 personas han fallecido y otras casi 10 mil 100 han resultado heridas víctimas de los continuos ataques perpetrados por el ejército de Israel contra posiciones del partido-milicia chií Hezbolá en zonas del sur y en la propia capital libanesa, Beirut.
Según datos del Centro de Operaciones de Emergencia de Salud Pública del Ministerio de Salud Pública ha actualizado el balance de víctimas desde el estallido de las hostilidades hace ya algo más de un año, al que incluye 22 muertos y 80 heridos tan solo en las últimas 24 horas.
Por otro lado, aumentan a más de 241 mil las personas huidas de Líbano a Siria por la escalada de ataques, de los cuales un 70 por ciento corresponde a ciudadanos sirios que regresan a su país, según información de ACNUR.
Por otro lado, la Dirección General de Defensa Civil de Líbano ha informado ayer de que cinco de sus trabajadores han muerto como consecuencia de un ataque llevado a cabo por el ejército de Israel contra un centro de emergencias en el sur del país.
Mientras, la ONU ha confirmado ayer que el personal de la Fuerza Interina de Naciones Unidas en Líbano (FINUL) ha registrado “daños” en “algunas” de sus posiciones instaladas en la frontera con Israel por el intercambio de ataques entre el ejército israelí y el partido-milicia chií libanés Hezbolá.
Además, al menos dos personas han muerto ayer por el impacto de un proyectil lanzado desde Líbano contra la localidad israelí de Kiryat Shmona, situada en el norte del país, poco después de que otro ataque similar por parte del partido-milicia chií Hezbolá dejara al menos cinco heridos en Haifa.
Mientras, el ejército de Israel ha anunciado este jueves la muerte de dos “comandantes” del partido-milicia chií Hezbolá en sendos “bombardeos precisos” en el sur de Líbano, en medio de la invasión desatada la semana pasada tras cerca de un año de combates con el grupo en la zona fronteriza.
“Dos terroristas de Hezbolá han sido eliminados en bombardeos precisos”, ha dicho en su cuenta en la red social X, donde ha especificado que se trata de Ahmad Mustafá al Haj Alí, “comandante del frente en Hula”, y Mohamad Alí Hamdan, “comandante de la unidad anticarro de Hezbolá en Mais al Yabal”.
Por otro lado, el ejército de Líbano ha anunciado ayer que ha arrestado a dos ciudadanos sirios sospechosos de espiar para Israel, en el marco de los bombardeos israelíes que tienen como objetivo, según dicen, al partido-milicia chií libanés Hezbolá.
“Como resultado del monitoreo y seguimiento de las redes de espionaje y agentes del enemigo israelí, una patrulla de la Dirección de Inteligencia detuvo a dos sirios por fotografiar diferentes lugares y puntos, además de documentar los efectos de los ataques aéreos enemigos y realizar un seguimiento de las operaciones de búsqueda y rescate y recuperación de cadáveres para verificar resultados”, reza un comunicado.
Mientras, el primer ministro interino de Líbano, Nayib Mikati afirmó ayer que hay esfuerzos internacionales para un alto al fuego “de una duración específica” en Líbano.
Por su parte, la coordinadora especial de Naciones Unidas para Líbano, Jeanine Hennis-Plasschaert, ha pedido ayer desde Beirut un alto al fuego entre el ejército de Israel y el partido-milicia chií libanés Hezbolá, y que se aplique de forma integral la resolución 1701 del Consejo de Seguridad de la ONU, ante el temor de “desastrosas consecuencias” de una confrontación regional total.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha instado en una llamada al primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, a “minimizar los daños a civiles” en los ataques en Líbano, especialmente en “áreas densamente pobladas” en la capital, Beirut.
Biden ha reiterado que Israel tiene “derecho” a “proteger a sus ciudadanos” del partido-milicia chií libanés Hezbolá, que ha disparado “miles de misiles y cohetes” contra territorio israelí “solo en el último año”, según ha informado la Casa Blanca.
El mandatario estadunidense ha reafirmado además “su firme compromiso con la seguridad de Israel”, mientras que ha vuelto a condenar “inequívocamente el ataque de misiles balísticos de Irán” contra territorio israelí el pasado 1 de octubre.
Por su parte, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) han recalcado una vez más que su ofensiva en Líbano no es contra las autoridades del país, sino contra el partido-milicia chií Hezbolá, a la par que ha matizado que sus ataques no son en la capital del país, Beirut, sino en el suburbio de Dahieh, ubicado en el sur de la ciudad y “capital” del grupo islamista.
Las hostilidades entre Israel y Hezbolá se desataron hace ya poco más de un año cuando la milicia islamista lanzó proyectiles contra territorio israelí en solidaridad con la causa palestina y después de que Hamas hubiera atacado a Israel, dejando casi mil 200 muertos y 240 rehenes, lo que motivó la cruenta respuesta israelí, que deja ya más de 42 mil muertos.
El ejército de Israel recrudeció a mediados de septiembre su ofensiva contra Hezbolá con “bombardeos selectivos” contra posiciones en el sur de Líbano e incluso en barrios de Beirut. Estos ataques han logrado descabezar al grupo islamista con la muerte de su líder, Hasán Nasralá, y algunos de sus posibles sucesores.
La elevada cifra de heridos se debe al estallido coordinado a comienzos de septiembre de miles de dispositivos de comunicación –’buscas’ y ‘walkie-talkies’– supuestamente vinculados a Hezbolá, que junto a sus socios salió rápidamente al paso para responsabilizar a Israel, que sin embargo nunca llegó a pronunciarse al respecto.
Texto: Europa Press / Foto: DPA
