El linebacker comanda a la defensiva del equipo de Cleveland, que deja su marca en tres victorias y cinco derrotas, por eso la importancia de ganar este duelo clave en la División Este de la Conferencia Americana a la escuadra de Cincinnati, que está en el mismo sector con marca de cuatro triunfos y cuatro descalabros
Cleveland, Ohio, EU, 1 de noviembre de 2022. Myles Garrett prometió que los Cafés le darían un buen susto a los Bengalíes en Halloween y se los cumplió.
El linebacker de Cleveland terminó con 1.5 capturas de mariscal de campo, Joe Burrow, QB de los felinos, sufrió 5 en total y toda la noche fue golpeado por la defensa de los locales.
Para los Cafés este partido era letal, tenían marca de 2-5 y de haber perdido sus posibilidades de avanzar a playoffs serían mínimas.
Los Bengalíes venían de dos triunfos consecutivos y eran favoritos en las apuestas pese a ser visitantes, pero la defensa de Cleveland los secó en los tres primeros cuartos, mientras que el juego terrestre de los locales, encabezado por Nick Chubb fue determinante, el corredor de los Browns corrió para 101 yardas y logró 2 anotaciones.
Chubb es el mejor corredor de la NFL, el único que ha superado las 800 yardas y que ha conseguido 10 touchdowns.
Mientras que el mariscal de campo de los locales, Jacoby Brissett, lanzó para 278 yardas y una anotación.
Pese a su marca de 3-5, la buena noticia para los Cafés es que en su División tienen 2-1, una ventaja clara ante los Bengalíes, que tienen marca de 0-3 ante los equipos del Norte de la Conferencia Americana.
Cincinnati extrañó horrores a su receptor estrella, Ja’Marr Chase, quien está lesionado y no verá acción por lo menos en cuatro semanas.
Además de que su juego terrestre fue inoperante, pues apenas consiguieron 36 yardas.
Con la victoria, las esperanzas de Postemporada renacen en Cleveland, mientras que los Bengals tienen en claro que necesitan reforzar su línea ofensiva para evitar que Joe Burrow viva más noches de terror.
Cuestiona Pickett a sus compañeros
Si algo le faltaba a los Acereros esta temporada era una guerra en redes sociales y ya se dio.
Luego de la paliza que les dio Filadelfia el domingo pasado, el mariscal de campo novato de la escuadra de la Ciudad del Acero alzó la voz y criticó a algunos de sus compañeros.
Después de la derrota, Pickett comentó que “hay jugadores de la ofensiva que no estudian lo suficiente”, refiriéndose al dominio del libro de jugadas, y que por eso están teniendo tan malos resultados.
El quarterback no parece la persona más indicada para hacer este tipo de señalamientos luego de que suma ocho intercepciones por apenas dos pases de anotación, pero el sufrir 6 capturas ante la defensa de las Águilas lo hizo explotar.
El tacle defensivo de las Águilas, Javon Hargrove, subió un tuit en el que capturaba a Pickett, y tres jugadores de los Acereros le dieron like: Diontae Johnson, Chukwuma Okorafor y Marcus Allen.
Johnson es, en teoría, el mejor receptor de los Steelers, mientras que Okorafor es liniero ofensivo, y Allen es defensivo, juega de apoyador.
Si Pickett tiene problemas con su principal receptor, uno de los jugadores que deben velar para que no lo capturen y uno de los defensivos, el futuro de los Acereros pinta más negro que su uniforme.
Bill Cowher, ex coach de Pittsburgh, declaró la semana anterior que están llevando mal la carrera de Pickett y que pueden echarla a perder.
Los Acereros viven su peor momento en 15 años y parece que aún no tocan fondo.
Texto: Jesús Ballesteros / Agencia Reforma
