Texto: Nelida Jaimes / Foto: Cartel de búsqueda que difundió la familia el día de la desaparición de Mara.
Puebla, Puebla, 16 de septiembre 2017. Mara Fernanda Castilla Miranda fue secuestrada y asesinada el viernes 8 de septiembre por el chofer de Cabify, Ricardo Alexis “N”, quien, ahora se sabe por las investigaciones judiciales, la llevó a un motel y ahí la violó y la estranguló. Siete días después, fue hallado el cuerpo de Mara.
Originaria de Xalapa, la capital del estado de Veracruz, Mara Fernanda, tenía 19 años y estudiaba el tercer semestre de la Facultad de ciencias Políticas de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP).
A pesar de la esperanza de encontrarla con vida, el cuerpo de Mara fue hallado este viernes 15 de septiembre en un predio de la junta auxiliar de Santa María Xonacatepec, Puebla, donde el asesino la dejó después de violarla, golpearla y estrangularla.
Según la necropsia, Mara fue víctima de violación y estrangulamiento por su agresor, el conductor del Cabify, quien, días antes había acudido a declarar por su cuenta y dijo que la había dejado en su casa, por lo tanto, no sabía dónde se encontraba la joven.
Pero las cámaras del fraccionamiento donde vivía Mara mostraban otra cosa. La joven estudiante nunca llegó a su casa a pesar de haber abordado “un taxi seguro”. Al “finalizar el viaje”, el conductor Ricardo Alexis “N” estacionó su coche frente a la casa de la joven por casi media hora, se fumó un cigarrillo, luego pasó al Oxxo a comprar hot dogs y después se fue al motel, donde presuntamente asesinó a Mara.
La mañana del 8 de septiembre, cuando Mara debió llegar a su casa, su hermana vio el recibo de cobro del traslado en un taxi Cabify, pero Mara nunca llegó. Inmediatamente avisó a su familia y presentó una denuncia para que se buscara a su hermana, pero no fue sino hasta el martes 12 de septiembre, cuando se puso bajo arresto preventivo al conductor por la desaparición de la joven.
El feminicidio de Mara es el número 82 en lo que va del año en el estado de Puebla, pero aún no se activa la llamada Alerta o Protocolo Alba, que se utiliza para la búsqueda de mujeres desaparecidas.
Para organismos como Amnistía Internacional, el caso de Mara no es aislado, su asesinato, con características de feminicidio, es la suma de impunidad y de una cultura que ha minimizado la violencia de género.
En esos días de búsqueda sin tregua para los familiares de Mara, por la radio se escuchaba al rector de la Universidad Madero Cholula que decía: “Para mí, [las agresiones contra las mujeres] se deben a la descomposición de la sociedad y a las libertades que las chicas tienen. Ahora, cualquiera de ellas puede salir a altas horas de la noche”.
Al grito de “Yo soy Mara” y “Ni una menos” diversos grupos se organizaron para salir e intervenir las calles en distintos estados del país, este domingo 17 de septiembre al mediodía.
Por su parte la empresa de Cabify emitió un comunicado en Twitter por el feminicidio cometido por uno de sus conductores.
“Lamentamos profundamente el fallecimiento de Mara Fernanda. Como expresamos anteriormente, todo nuestro equipo se solidariza con su familia y los acompañamos en este momento. Para ellos nuestras condolencias. Cuentan con todo nuestro apoyo. Exigimos todo el peso de la ley para quien o quienes resulten responsables.”
El secretario general de gobierno, Diodoro Carrasco aseguró que el gobierno de Puebla buscará fincar responsabilidades también para la empresa de Cabify por el supuesto examen de admisión del feminicida Ricardo Alexis “N”.
“No va a haber impunidad, no hay impunidad. Estamos revisando también qué medidas podemos tomar en contra de la empresa. Vamos a actuar con toda la fuerza y el poder de la ley del estado de Puebla”, recalcó.
Las empresas de transporte seguro por APP, Cabify y Uber llegaron a México vendiendo seguridad de transporte para todos, sin embargo en los hechos ha resultado todo lo contrario, durante los años que han trabajado en el país. La tasa de robo, secuestro, violaciones y asesinatos no han bajado como se pensaba al no utilizar taxis de la calle.
De ser encontrado culpable, el conductor alcanzaría una pena máxima de 60 años de cárcel, a la que se sumarían 20 por violación y cinco por privación de la libertad.
El cuerpo de Mara fue entregado hoy 16 de septiembre a sus familiares y será trasladado a su natal Veracruz.
