22 agosto,2024 7:13 am

Mataron a un desplazado por la violencia de Zitlala y amenazaron a su familia cuando lo sepultaba, informa Teodomira Rosales

 

Chilpancingo, Guerrero, a 22 de agosto de 2024.- Uno de los desplazados por la violencia del municipio de Zitlala, Cristino Tepequillo Solís, quien estaba refugiado en Chilpancingo, fue privado de su libertad el 3 de agosto y encontrado asesinado el 5 en Zitlala, en tanto que mientras estaba siendo sepultado en Chilapa, civiles armados amenazaron de muerte a toda su familia.

La directora del Centro Regional de Derechos Humanos José María Morelos y Pavón (Centro Morelos), Teodomira Rosales Sierra informó por teléfono que Cristino, de 59 años de edad, era uno de los desplazados de Zitlala por la violencia en el 2018.

Junto con otras familias, Tepequillo Solís se vino a refugiar a Chilpancingo pero el sábado 3 de agosto desapareció, según la ficha que difundió la Fiscalía General del Estado (FGE) la última vez que se le vio fue a las 3:15 de la tarde en la base de combis de Chilapa-Chilpancingo, cerca del mercado central Baltazar R. Leyva Mancilla, en la capital del estado.

Dos días después, el lunes 5 de agosto, su cuerpo fue encontrado con impactos de arma de fuego cerca de la comunidad de Llano Grande, rumbo a la presa de Viramontes, municipio de Zitlala, según fuentes del Servicio Médico Forense, ese mismo día sus familiares fueron a reconocer y a reclamar sus restos.

Cristino Tepequillo, era originario del barrio de San Francisco, de Zitlala, a donde ya no había regresado desde el 2018 que fue desplazado por la violencia, informó la directora del Centro Morelos.

Dijo que el día que lo estaban sepultando en el panteón de Chilapa (no pudieron sepultarlo en Zitlala por temor a ser atacados) hombreas armados que se bajaron de un vehículo blanco amenazaron a 15 integrantes de su familia que estaban participando en el sepelio, entre ellos sus hijos.

“Les dijeron que se fueran, que así como acabaron con su padre van a terminar con todos ellos, así es que la familia de 15 integrantes tienen miedo”.

La directora del Centro Morelos, pidió a nombre de la familia de la víctima que se investigue el caso y que les brinden atención y seguridad sobre todo a sus hijos para que puedan salir de Zitlala, puesto que tienen miedo de salir.

La activista lamentó que mientras las desapariciones y los asesinatos sigan en aumento en la entidad, “la gobernadora Evelyn Salgado Pineda no nos quiera dar la cara”.

Indicó que casos como el Cristino Tepequillo están ocurriendo no solo en Zitlala y Chilapa, sino en todo el estado, y no hay quien atienda a los familiares de las víctimas.

Rosales Sierra declaró que los representantes de los colectivos siguen en espera de una reunión con la gobernadora que solicitaron a través de la encargada de despacho de la Secretaría General de Gobierno, Anacleta López Vega.

“No sabemos si la encargada de despacho DE LA Secretaría de Gobierno o es la gobernadora la que no nos quiere dar la audiencia, pero ya van tres semanas no tenemos respuesta”.

Informó que la encargada de despacho de la Secretaría de Gobierno les argumentó, a manera de negativa, que

“para resolver los asuntos del gobierno del estado están los secretarios y los directores de área, que la gobernadora no les va a resolver, que lo que queramos decirle se lo digamos a ella”.

Teodomira Rosales, declaró que con esa respuesta “nos parece inútil que tengamos gobernadora, puesto que según la encargada de despacho de la Secretaría de Gobierno, ella no resuelve nada, que de todas maneras lo que se le diga a la gobernadora, lo van a venir resolviendo ellos”.

Sin embargo, la activista explicó que los colectivos solicitan la audiencia con la gobernadora porque quieren compromisos con las organizaciones sociales y con colectivos.

Advirtió que ante la falta de respuesta a su petición de audiencia, sigue en pie la propuesta de los colectivos de víctimas de desaparecidos para movilizarse el 30 de agosto, Día Internacional de las Victimas de las Desapariciones Forzadas.

Texto: Zacarías Cervantes / Foto: Jesús Eduardo Guerrero / Archivo