3 diciembre,2017 2:58 pm

Meade, precandidato presidencial único del PRI; alaba gestión de Peña

 

Ciudad de México, 3 de diciembre 2017. – El cinco veces exsecretario de Estado José Antonio Meade Kuribreña se convirtió hoy, en los hechos, en precandidato presidencial único por el Partido Revolucionario Institucional (PRI) para el proceso electoral que culminará con los comicios del 1 de julio de 2018.

En una apuesta inédita para revertir su baja popularidad, el partido del presidente Enrique Peña Nieto recibió después del mediodía de este domingo de manera formal la solicitud de registro de Meade Kuribreña para ser su primer candidato sin militancia a la Presidencia en 2018.

De 48 años de edad, Meade es el único que se inscribió ante el PRI que aspira a la candidatura, pero, al no tener rivales internos, el registro le asegura, en los hechos, la candidatura.

El PRI decidió apostar por un externo y le despejó el camino para competir en los comicios del 1 de julio contra Andrés Manuel López Obrador, que ya fue candidato presidencial en dos veces: 2006 y 2012, aunque aún falta el candidato del Frente Ciudadanos por México y saber si habrá algún independiente.

“Unidos iremos a la victoria con los ciudadanos”, dijo Meade en su discurso, en el que reivindicó la agenda reformista del cuestionado Peña, pero prometió actuar con “autocrítica” y abierto al diálogo para transformar lo que haga falta.

“Necesitamos seguridad y Justicia”, agregó. “Combate frontal y definitivo a la corrupción”. Sin embargo, “no hay que demolerlo todo, no hay que cambiarlo todo”, agregó.

Miles de personas esperaban a Meade en la sede del PRI agitando banderas rojas, blancas y verdes como si fuera un militante de toda la vida, al grito de “Pepe presidente” y “Vamos a ganar”.

“Aspiro a servir desde la más alta responsabilidad, vengo con humildad a pedir su apoyo para trabajar y que logremos juntos, con entrega, conocimiento y pasión para que cada familia viva con felicidad y justicia”, dijo Meade tras presentar su registro como aspirante a la candidatura del PRI.

En su discurso, recordó a su familia y aseguró que trabajará en todos los frentes para lograr un México más desarrollado y próspero, y así hacer de la nación latinoamericana “una potencia mundial”.

Alabó la gestión de Peña como presidente de México, aunque aseguró que hay que ser crítico también y que hay retrocesos y mucho que mejorar en seguridad y justicia.

“Creemos en el hambre de servicio, no en el hambre de poder”, aseveró.

“Me inscribo como precandidato porque tengo la experiencia, resultados y conocimiento para ser un buen candidato y un buen presidente de México. Me inscribo por amor a México”, concluyó.

En la sede nacional de priista, en Insurgentes Norte de la Ciudad de México, Meade llegó sobre las 11.30 hora local (17.30 GMT) para darse un auténtico baño de masas.

En la sede había miles de militantes que se congregaron para aplaudir y desear suerte a Pepe Meade, el apodo con el que se le conoce en los círculos cercanos.

“Nuestro amigo Pepe será el nuevo presidente”, decía uno de los presentadores del acto para arengar a los ahí presentes, a quien instaba a corear lemas y porras en favor del exsecretario de Estado.

Meade, a su vez, se paseó despacio entre la gente, sonriéndose y tomándose fotos con los asistentes, procedentes de buena parte del territorio mexicano.

Ante la Comisión Nacional de Procesos Internos del PRI, presentó la documentación correspondiente, que cumplió con todos los requisitos constitucionales, legales y de la convocatoria.

Sin serlo, el acto de hoy parecía un inicio de campaña, a meses de que se celebren las elecciones del 1 de julio de 2018, donde se elegirán 3 mil 416 cargos públicos, entre ellos el de Presidente de México y el de jefe de Gobierno de la Ciudad de México.

Abogado por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y economista por el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM) con un doctorado en Economía de Yale, Meade lleva dos décadas trabajando en distintos niveles de la administración pública.

Con Felipe Calderón Hinojosa (2006-2012) fue secretario de Energía y de Hacienda. De la mano de su amigo de décadas Luis Videgaray Caso, muy cercano a Peña y actual canciller, pasó al siguiente gobierno como ministro del Exterior, de Desarrollo Social y de Hacienda, cargo al que renunció la semana pasada para postularse.

El virtual candidato llegó con su esposa Juana Cuevas a la sede del PRI en Ciudad de México para inscribirse. El camino para habilitar su candidatura había empezado a prepararse en agosto.

Con Peña Nieto entre bambalinas, el PRI reformó sus estatutos para permitir la postulación de aspirantes sin militancia, un cambio considerado desde el principio un traje a la medida de Meade.

La postulación, hecha pública la semana pasada, fue abrazada de inmediato sin cuestionamientos por todos los sectores del PRI, un partido con marcada disciplina interna que hoy volvió a aclamarlo.

Figuras de militancia en el PRI que eran mencionados como presidenciables, como el ministro del Interior, Miguel Ángel Osorio Chong, dieron el paso al costado en los últimos días y Meade pudo registrarse como único postulante.

La campaña electoral comenzará el 30 de marzo y durará 90 días. López Obrador se registrará como precandidato del Movimiento Regeneración Nacional el 12 de diciembre, mientras que el conservador Partido Acción Nacional y dos fuerzas de izquierda moderada analizan todavía si formarán una coalición.

Texto: DPA / EFE / Foto: EFE