1 diciembre,2018 12:55 pm

México inicia su giro a la izquierda con AMLO como presidente 

Se ratifica, juarista, señala que es maderista, partidario de la no reelección y, por lo mismo, “no me reelegiré”. “Hoy no sólo inicia un nuevo gobierno. Hoy comienza un cambio de régimen político”, agrega.
Ciudad de México, 1 de diciembre de 2018. México tomó hoy sábado un nuevo rumbo hacia un nacionalismo de izquierda, con la llegada al poder de Andrés Manuel López Obrador como presidente de la segunda mayor economía de América Latina, después de intentarlo durante 12 años.
En la sesión solemne de investidura en el Congreso General –Cámara de Senadores y Cámara de Diputados en el Palacio Legislativo de San Lázaro– , López Obrador, de 65 años, juró “guardar y hacer guardar la Constitución y las leyes que de ella emanen y desempeñar leal y patrióticamente el cargo de presidente de la República”.
Tras prestar juramento, en presencia de una decena de jefes de Estado extranjeros, legisladores e invitados especiales, se colocó la banda presidencial con los colores verde, blanco y rojo de la bandera de México, entregada por el presidente saliente, Enrique Peña Nieto a través del líder de la Cámara de Diputados, Porfirio Muñoz Ledo.
“Hoy no solo inicia un nuevo gobierno. Hoy comienza un cambio de régimen político”, dijo en su discurso de investidura. “A partir de ahora se llevará a cabo una transformación pacífica y ordenada, pero al mismo tiempo profunda y radical porque se acabará con la corrupción y la impunidad que impiden el renacimiento de México”.
El también ex jefe de Gobierno de la Ciudad de México (2000-2005), que tiene una carrera política y de lucha social de más de cuatro décadas, fue candidato presidencial en 2006, 2012 y 2018 y llega al poder con un fuerte respaldo popular.
López Obrador inició su discurso con un agradecimiento a Peña Nieto por no haber interferido para evitar su victoria, ya que afirma que fue víctima de fraude en sus derrotas previas, y anunció que dará un golpe de timón en materia económica.
“La política económica neoliberal ha sido un desastre, una calamidad para la vida pública del país”, afirmó, al criticar las políticas de México de los últimos 30 años. Y prometió que la lucha contra la corrupción será su principal cometido. “Me comprometo a no robar”, manifestó.
Su anuncio de que quiere hacer un borrón y cuenta en materia de corrupción y que no hará una caza de brujas, provocó que algunos legisladores contaran hasta el número 43, en recuerdo de los jóvenes desaparecidos en 2014 de la escuela de Ayotzinapa.
López Obrador dijo que en este caso creará una comisión especial para garantizar que haya Justicia.
La ceremonia oficial de investidura contó con la presencia del vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence; Ivanka Trump –hija del presidente estadunidense Donald Trump–, de una decena de jefes de Estado latinoamericanos, entre ellos el cubano Miguel Díaz-Canel, y el rey Felipe VI de España.
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, que estaba invitado, no llegó a la ceremonia de investidura y se les esperaba para más tarde en la recepción en el Palacio Nacional, según informó la televisión.
López Obrador salió de su casa entre una multitud en el sur de la ciudad de México en su sencillo automóvil Jetta blanco rumbo al Congreso, escoltado por motocicletas de la Policía, para dirigirse al Congreso.
A un costado de su ruta había gente que lo saludaba y tomaba fotos con el celular. Él respondió con la mano desde la ventanilla del auto y, sin detener la marcha, tomó algunos ramos de flores que le entregaron a su paso.
En julio López Obrador ganó las elecciones con el 53 por ciento de los votos en una única vuelta y obtuvo la mayoría en ambas Cámaras del Congreso y 18 de las 32 legislaturas regionales.
“¡Es un honor estar con Obrador!”, exclamaron legisladores de su bloque parlamentario cuando llegó al Palacio Legislativo de San Lázaro.
López Obrador, conocido como AMLO por sus iniciales, es el primer presidente de México surgido de un partido de izquierda, aunque no el primero de esa orientación ideológica, ya que hubo antes gobernantes de ese perfil en el régimen del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en el siglo XX.
El fundador del partido Movimiento Regeneración Nacional (Morena), de centro-izquierda, gobernará por un periodo de seis años sin posibilidad de reelección. Su proyecto se caracteriza por un fuerte liderazgo personal, un programa económico nacionalista y un discurso de renovación moral.
México, con sus 123 millones de habitantes y casi 3 mil 200 kilómetros de frontera con Estados Unidos, sufre una crisis de inseguridad, altos niveles de impunidad, pobreza y poco crecimiento económico, aunque con estabilidad.
La relación con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, sobre todo en temas migratorios y fronterizos, será uno de los grandes retos del nuevo presidente.
López Obrador quiere enfocarse en el mercado interno, lograr autosuficiencia en materia energética y un desarrollo más incluyente, combatir la inseguridad con un nuevo cuerpo militarizado, la Guardia Nacional, y prometió ejercer un Gobierno austero, honesto y cercano a la gente.
En las últimas semanas tuvo que pedir confianza a los mercados, luego de que la Bolsa y el peso mexicano sufrieran caídas ante la incertidumbre frente a su políticas y algunos anuncios, como la cancelación de un gran proyecto aeroportuario.
El nuevo mandatario mexicano, que mañana ya hará su primera gira al estado de Veracruz, dice que llevará a cabo la “cuarta transformación” histórica en México.
La describe como una revolución pacífica equiparable por su profundidad con hitos como la Independencia de España, la Reforma que separó el poder político del religioso y la Revolución Mexicana.
Después de la ceremonia de investidura en el Palacio Legislativo de San Lázaro, López Obrador ofrecerá una recepción en el Palacio Nacional para los invitados especiales y encabezará un acto popular en la Plaza del Zócalo.
Texto: Andrea Sosa Cabrios / DPA 
Foto: Especial