23 junio,2018 5:10 am

México y Bélgica, a confirmar; Alemania se juega su futuro

Los mexicanos irán, con el ánimo por las nubes, contra Corea del Sur; Alemania enfrentará al muro sueco y Bélgica intentará deshacerse de Túnez.

Texto: DPA / Foto: EFE
Rostov del Don, Rusia, 23 de junio de 2018. La sSelección Mexicana de futbol buscará confirmar hoy sábado ante Corea del Sur su gran inicio en el Mundial de Rusia 2018 y acercarse, o incluso conseguir el billete, a los octavos de final del torneo.
El conjunto dirigido por Juan Carlos Osorio sorprendió a todos en su debut, incluida a la actual campeona, Alemania, a quien venció por 1-0 en el estadio Luzhiniki. Ahora, el “Tri”, con el ánimo por las nubes, busca dar un nuevo golpe que lo ponga prácticamente con los dos pies en octavos.
“Identificamos en Corea a un gran rival. Los admiramos, los respetamos, sabemos que son dominantes en el juego aéreo, tendremos que estar preparados para defenderlos”, manifestó Osorio.
Si México gana en Rostov del Don a Corea y Alemania empata o pierde más tarde con Suecia, los aztecas conseguirán el pase a la siguiente ronda sin necesidad de esperar a la última jornada.
El equipo “azteca” no se toma ningún tipo de relajación a pesar de haber arrancado con una victoria ante el rival más difícil del grupo en el papel. Así lo expresó el capitán Andrés Guardado.
“Fueron tres puntos valiosos (ante Alemania), pero ni nos clasificamos ni nos dan más puntos por ganarle al campeón”, expresó Guardado, que añadió que ellos mismos podrían ser su peor enemigo.
“Eso podría ocurrir si nos relajamos y si tomamos el triunfo como si tuviera un valor añadido, de nada sirve si no salimos a hacerlo mañana igual de bien que el domingo pasado”, dijo.
Osorio, “obsesivo” y “enfermo” por el fútbol, como lo describen sus jugadores, preparó con ahínco el duelo ante los alemanes, pero no descuidó a los siguientes dos rivales. “Los hemos visto en videos y desde que jugamos partidos amistosos en noviembre (de 2017) y marzo, hemos visto otros juegos”, señaló Raúl Jiménez.
El nuevo jugador del Wolverhampton Wanderers también elogió al conjunto coreano. “Son rivales rápidos, bien parados tácticamente, habrá que tener cuidado de sus contragolpes”, dijo.
La clave de duelo ante los surcoreanos será, en opinión del mediocampista del Betis, el juego por las bandas. “Nuestra fortaleza es que tenemos a gente por afuera de muchísima calidad juegue quien juegue”, manifestó.
“Apostamos por el talento individual que tenemos ahí, contra Alemania se vio muy bien, con ‘Chucky’ (Lozano) sabemos que pasa un gran momento, (Miguel) Layún también rindió bien y todavía me faltan ‘Tecatito’ (Manuel Corona) y (Javier) Aquino, tenemos jugadores para explotar eso, no solo contra Corea, sino contra cualquiera”, añadió.
Enfrente estará un equipo urgido de puntos. Tras su derrota ante Suecia, los coreanos aceptaron que México sería una prueba todavía más difícil que la que habían fallado en su debut en Rusia. Para colmo, el técnico surcoreano Shin Tae-yong aseguró que el calor les jugará en contra.
“El clima en Rostov beneficiará a México, porque ellos están más acostumbrados al calor, he visto cómo han jugado partidos amistosos en Estados Unidos donde lo hacen sin problema, pero creo que a la hora del partido empezará a correr el aire y la caída del sol mejorará el clima”, explicó Shin.
Para el coreano Lee Jae-sung, elegido MVP (mejor jugador) de la Liga coreana los últimos dos años, en cambio, el clima no es parte de la conversación. “Nosotros no discutimos esos temas en la concentración, hablamos de cómo prepararnos mentalmente para enfrentarnos a ellos, de las direcciones que nos da el técnico y de cómo implementarlas, no del clima”, manifestó.
Lee también se refirió al “otro” ambiente: el de las tribunas. “Creo que todos aquí somos profesionales y que haya más hinchas apoyando a México no nos afectará, sólo hará el partido más emocionante y ese no es un problema para nosotros”, dijo.
En Rostov del Don los mexicanos serán otra vez mayoría. Una invasión de camisetas verdes ya se encuentra en la zona para asistir al partido y un centenar de ellos recibieron al equipo este jueves.
Una vez que haya disputado su partido, a México le quedará por enfrentarse a Suecia en la última fecha del grupo el próximo miércoles 27 de junio en Ekaterimburgo. Corea hará lo propio ante Alemania en el Kazan Arena.

Sin margen de error: Alemania
sale con todo contra el muro sueco

En Sochi, la campeona del mundo se juega su permanencia en Rusia 2018. Casi sin margen de error tras perder inesperadamente en su debut, Alemania disputa hoy su segundo partido en el Mundial de futbol con la presión de ganar ante la sólida Suecia para evitar caer eliminada en primera ronda.
Apabullada de críticas por la repentina apatía de sus estrellas, la “Mannschaft” dirigida por Joachim Löw podría quedar fuera si pierde contra los escandinavos en el Estadio Olímpico de Sochi o dejar de depender de sí misma si firma un empate, tras perder 1-0 con México.
Suecia, en cambio, llega al duelo a orillas del Mar Negro tranquila tras ganar en su debut en el Grupo F ante Corea del Sur y consciente de que la presión estará del lado del rival.
“Jugamos contra la selección alemana, que en el papel es mejor que nosotros”, dijo el capitán Andreas Granqvist. “Alemania era uno de los grandes favoritos antes del torneo y si nosotros les ganamos los podemos sacar del torneo”, agregó.
“Creo que la arrogancia es nuestro problema más pequeño”, bromeó luego el seleccionador Janne Andersson.
La “Mannschaft” tiene que salir a buscar el partido desde el pitido inicial, pero necesitará paciencia ante el sólido muro defensivo sueco, que ya frenó a Italia en las eliminatorias y dejó a los “azzurri” por primera vez en 60 años fuera de un Mundial.
Histórica podría ser también la eliminación de Alemania en primera ronda, algo que no ocurre desde 1938. Suecia, además, ya sacó del Mundial una vez a una “Mannschaft” que defendía el título: en 1958, los escandinavos eliminaron en semifinales a los campeones de 1954.
Golpeada e irreconocible en el campo en sus últimos partidos, Alemania, sin embargo, sigue siendo candidata a todo por el peso de su historia. Pocas selecciones tienen un gen futbolístico tan competitivo como la actual campeona.
Además de las de su cuatro títulos, los germanos llegaron a otras cuatro finales y disputaron 13 semifinales de los 18 Mundiales en los que participaron. Hasta ahora, la “Mannschaft” no ha sido eliminada nunca en primera fase en un torneo al que llegó a defender la corona.
Löw realizará posiblemente varios cambios en su once titular, que formó con ocho de los campeones de Brasil 2014 ante México. El defensa Mats Hummels sufrió problemas en el cuello y es una baja probable. En su lugar podría jugar Niklas Süle.
Se espera también que el seleccionador sustituya a Julian Draxler por Marco Reus en el mediocampo ofensivo y que Jonas Hector vuelva a la banda izquierda tras superar la gripe que le impidió jugar en Moscú.
En la medular volverían a formar Sami Khedira y Toni Kroos, muy criticados tras el partido ante el “Tri”, pero dos de los jugadores clave para Löw.
“La confianza básica que tenemos en los jugadores que están hace tiempo con nosotros no se rompe por un partido”, dijo el técnico. “Eso sería fatal”.
“Sé que no hice un buen partido”, dijo Khedira de cara al cruce con Suecia, para el que prometió una actitud diferente tras los debates y discusiones internos de la “Mannschaft”: “Ahora toca poner en práctica todo lo hablado”, señaló.
“Eso es lo que ha hecho siempre fuerte a Alemania: la mentalidad de 11 guerreros. Tenemos que volver a tenerla. Entonces tendremos también la calidad futbolística para hacer goles bonitos”, agregó el actual volante de la Juventus, uno de los pilares de la reconversión futbolística germana de los últimos años.
Khedira reaccionó también con tranquilidad a una broma que le gastó un periodista del diario sensacionalista sueco “Expressen”, que quiso regalarle unos tickets ficticios de regreso a Alemania para hoy.
“Muchas gracias, pero no los necesitamos”, dijo el volante teutón durante los entrenamientos en Sochi. “Creo que los necesitaremos para el 16 de julio (el día después de la final)”, agregó.
Ya más en serio, el cuadro escandinavo también espera a un rival altamente motivado en el Fisht Stadium de Sochi. “El momento es bueno porque acaban de perder. Pero contra nosotros van jugar con otra mentalidad”, consideró el volante Emil Forsberg, que juega en el Leipzig alemán. “Vamos a ver a otra Alemania, estoy seguro”, agregó.
“Jugamos contra el campeón del mundo. No es tan fácil. Tenemos que estar preparados: van a salir con todo”, avisó.

Bélgica busca encarrilar el
pase a octavos a costa de Túnez

Y en Moscú, tras un ilusionante estreno mundialista, la selección belga quiere encarrilar su pase a octavos de final este sábado en la capital rusa a costa de un Túnez que no tiene margen para más derrotas.
La prometedora Bélgica comenzó con fuerza en el Mundial de Rusia goleando 3-0 a Panamá. Ahora, después de ganarse un día de descanso extra y tiempo para sus familias, ya está lista para ir por más ante Túnez.
Se da por hecho que los belgas deben estar bien descansados para su duelo del sábado ante Túnez después de disfrutar de un día libre a mitad de semana con sus familias gracias a su triunfo en el primer partido.
Las buenas noticias no terminan ahí para los ambiciosos “Diablos Rojos”, ya que Thomas Vermaelen ha vuelto a los entrenamientos tras una lesión muscular en el muslo que le apartó del estreno ante los panameños.
Bélgica puede dar un gran paso hacia los octavos de final con un triunfo en el estadio moscovita del Sparak que además le permitiría enfrentarse con más tranquilidad a Inglaterra la próxima semana en el último partido del Grupo C.
Los belgas ya alcanzaron los cuartos de final en 2014 y en la Eurocopa 2016, pero podrían superarse con este talentoso equipo liderado por el volante Eden Hazard y por el delantero Romelu Lukaku. El equipo busca emular la generación de 1986 que alcanzó las semifinales.
El entrenador Roberto Martínez decidió cancelar el entrenamiento del miércoles para mantener frescos a sus jugadores y estos lo agradecieron, algunos con sus familias y otros jugando al golf.
“Es importante que las familias pudieran venir”, dijo el defensa del Paris Saint-Germain Thomas Meunier el jueves en el campo base de la concentración cerca de Moscú.
“Un descanso mental nos hace bien. Se han planeado medidas para evitar sentirnos encerrados. Y eso se puede ver luego en el campo”, añadió.
Después de un arranque titubeante, la victoria con un doblete de Lukaku fue impresionante sobre todo en el segundo tiempo, y ahora los belgas esperan poder seguir por ese camino.
El potencial es enorme al contar también entre sus filas con Kevin De Bryune, Thibault Courtois, Dries Mertens -que abrió el marcador ante Panamá tras una gran conducción-, Marouane Fellaini y Vicent Kompany, el último en unirse al grupo este viernes tras otra lesión.
Todos ellos son ya estrellas de pleno derecho pero en Rusia sólo importa la causa común, como destacó Meunier hablando sobre el espíritu del equipo.
“Nos sentimos realmente unidos aquí. Cuando tenemos algo de tiempo libre jugamos juntos. Incluso en la Playstation hay veces que nos conectamos 15 para jugar juntos al mismo juego”, dijo.
Túnez también enfatiza lo colectivo mientras espera recuperarse del traumático traspiés inicial con la derrota sobre la hora ante Inglaterra por 2-1.
“Esperemos que eso nos sirva para tener mayores niveles de concentración en los próximos partidos”, aseguró el entrenador Nabil Maaloul sobre lo ocurrido en el debut.
Se espera que Maaloul haga variantes en su equipo, con Oussama Haddadi probablemente ocupando el lugar de Ali Maaloul en el lateral izquierdo. Además, el portero titular Mouez Hassen quedó afuera del torneo por lesión, por lo que Farouk Ben Mustapha defenderá el arco tunecino.
Otra valiente actuación y un buen resultado serán obligatorios ya que un triunfo belga acompañado de una victoria de Inglaterra sobre Panamá el domingo, eliminaría a Túnez.
“Haremos todo lo posible ante Bélgica para ganar los tres puntos”, dijo el mediocampista Ferjani Sassi, autor del tanto contra los ingleses.