7 febrero,2024 4:42 am

Milei contra los medios públicos

Gaspard Estrada

Una de las primeras promesas que hizo Javier Milei tras ser elegido Presidente, a finales del año pasado, fue privatizar los medios de comunicación estatales de Argentina: Televisión Pública, Radio Nacional y la agencia de noticias Télam. Esta promesa entra en consonancia con su programa libertario de extrema derecha, que incluye la eliminación de Ministerios y la “dolarización” de la economía .
Milei justificó su promesa calificando a la radiotelevisión pública de “mecanismo de propaganda”. Según el último Informe de la Universidad de Oxford sobre noticias en línea, publicado el año pasado, 16 por ciento de los argentinos utiliza la Televisión Pública para informarse offline y un 10 por ciento lo hace para informarse online. Estas cifras sitúan a la cadena pública muy por detrás de competidores privados como TN y Telefe. Por otro lado, la radiotelevisión pública argentina también parece tener un problema de credibilidad. Este mismo informe indica que sólo el 36 por ciento de los encuestados considera que es digna de confianza. La cifra es mayor para los canales privados Telefe (56 por ciento) y TN (52).
Estos datos tienen una explicación. Televisión Pública tiene más de 70 años al aire. Fue el primer canal de televisión de Argentina, pero siempre estuvo muy asociado a los gobiernos en turno. Su primera emisión fue un acontecimiento –el 17 de octubre de 1945, que es el Día de la Lealtad Peronista (y constituye una fecha conmemorativa muy importante en Argentina). Este país ha tenido mucha inestabilidad política, sobre todo durante el siglo XX, marcado por dictaduras militares y golpes de Estado. Y cuando cambiaban las autoridades después de unas elecciones, cambiaba la dirección del canal y su ángulo editorial. Esto dificulta, en cierto modo, que fuera más previsible para la audiencia que la sintonizaba.
Sin embargo, la TV Pública tiene activos significativos. El primero está ligado a su programación que siempre ha tenido una barra cultural diversa e internacional. Gracias a ello, contenidos artísticos originales y de producciones independientes han podido ser transmitidos en ese país. En segundo lugar, los contenidos de la TV Pública tienen como objetivo representar la diversidad geográfica del país, a diferencia de los canales privados, que no la consideran como algo significativo.
Infelizmente, para Milei y sus seguidores, estas cualidades no existen. Él pretendió que el canal había cubierto negativamente a su partido durante la campaña presidencial. Insistió en la supuesta falta de pluralismo de los conductores y de manera más general, de los productores a cargo de la línea editorial de este medio. Para Milei, el canal representa un medio de propaganda y un gasto de dinero público innecesario, que debería ser eliminado en aras de disminuir el gasto público. Es en este contexto que el nuevo gobierno ha decidido intervenir durante un año todo el sistema de medios públicos. Además, el decreto aclara que el período podrá ser prorrogado por otro año, por una única vez si así lo define la Jefatura de Gabinete de Ministros de manera unilateral.
La medida, publicada este lunes en el Boletín Oficial a través del Decreto 117/2024, abarca a todo el sistema de Radio y Televisión Argentina –-que administra la TV Pública y Radio Nacional– la agencia de noticias Télam, Contenidos Públicos Sociedad del Estado –que conduce las señales de televisión Encuentro, Pakapaka, DeporTV y la plataforma Contar– y la plataforma Educ.ar. El objetivo de la intervención es realizar una auditoría integral, modificar la estructura de puestos, contrataciones y contenidos. Pero en el fondo, esta medida constituye ante todo un paso previo a la privatización total del sistema de Radio y Televisión. Si llegara a concretarse, se trataría de un golpe fulminante a los medios públicos latinoamericanos y al pluralismo editorial, más allá de los errores y desencuentros con la dirección de estos medios.

* Director Ejecutivo del Observa-torio Politico de América Latina y el Caribe (OPALC), con sede en París

Twitter: @Gaspard_Estrada