Líderes independentistas consideraron insuficiente que el gobierno del socialista Pedro Sánchez trasladara recientemente a cárceles catalanas a los políticos y líderes independentistas encarcelados de forma provisional en Madrid desde hace varios meses.
Texto: DPA / Foto: EFE
Barcelona, España, 14 de julio de 2018. Miles de personas salieron hoy a la calle en Barcelona para reclamar la libertad de los líderes soberanistas catalanes presos en relación con la consulta independentista de octubre pasado en esta región del noreste de España, al tiempo que un grupo de activistas ocupó la antigua cárcel Modelo de la ciudad.
Bajo el lema “Ni cárcel ni exilio, os queremos en casa”, los manifestantes, unos 100 mil según la guardia urbana, exigieron además que los líderes soberanistas que huyeron al extranjero y son reclamados por la Justicia española puedan regresar al país sin ser perseguidos judicialmente, informaron medios locales.
La marcha había sido convocada por el gobierno regional y las principales entidades separatistas así como por asociaciones de familiares de los presos.
El presidente del gobierno regional, Quim Torra, quien participó junto con otros dirigentes en la marcha, exigió la puesta en libertad de los líderes encarcelados, nueve en total, a los que los independentistas consideran presos políticos. “España se ha de mirar en el espejo de la injusticia, es una indecencia política”, dijo el sucesor de Carles Puigdemont al frente de la “Generalitat” catalana.
La movilización, convocada ya tiempo atrás, se produce dos días después de que un tribunal alemán autorizara la entrega a España de Puigdemont, quien reside actualmente en el norte de Alemania, por un delito de malversación de fondos y no de rebelión, como solicitaba la Justicia española en relación con la causa que investiga el proceso separatista en la región española.
Esa decisión fue celebrada como una gran victoria por los independentistas, que consideran que los 25 líderes soberanistas procesados en relación con el referéndum del 1 de octubre, prohibido por la Justicia española por ilegal, son objeto de una persecución política.
Puigdemont, quien había sido destituido en octubre por Madrid a raíz de la escalada de su proceso independentista, llamó desde Alemania en un video publicado en las redes sociales a una participación masiva en la marcha “para reclamar la libertad” de los presos soberanistas.
La manifestación terminó frente a la antigua cárcel Modelo de Barcelona, clausurada en 2017 y donde en su época estuvieron encarcelados disidentes políticos, por ejemplo opositores a la dictadura franquista (1939-1975).
Poco antes de que empezara la marcha, activistas de los llamados Comités de Defensa de la República (CDR), grupos civiles que impulsan la independencia de Cataluña, ocuparon la prisión, emulando la histórica toma de la Bastilla, ya que hoy se conmemora el aniversario de la revolución francesa de 1789.
Los activistas, que superaron a la seguridad privada que custodia el recinto, señalaron que la cárcel es un símbolo de la “resistencia republicana” contra de la represión, como la que a su juicio sufre Cataluña a manos del gobierno central en Madrid.
En sus alocuciones, los líderes independentistas consideraron insuficiente que el gobierno del socialista Pedro Sánchez trasladara recientemente a cárceles catalanas a los políticos y líderes independentistas encarcelados de forma provisional en Madrid desde hace varios meses.
En cambio, exigieron a la Justicia que retire todos los cargos que pesan sobre los encarcelados, acusados de rebelión en relación con el referéndum.
