Regresará a Chilapa para evaluar la situación y dice que espera que en esta semana se reabran, ahora sí, la mayoría de las escuelas
Texto: Zacarías Cervantes
Foto: Archivo el Sur
Chilpancingo, Guerrero.- El regreso a clases en la región educativa de la Montaña baja no fue como el gobierno estatal lo esperaba, reconoció este domingo el gobernador Héctor Astudillo Flores, quien dijo que regresará a Chilapa para evaluar la situación y que espera que en esta semana se reabran, ahora sí, la mayoría de las escuelas.
El gobernador fue consultado después de que dio el banderazo a un programa de bacheo de calles en la capital, en donde al solicitarle su opinión con respecto a las conclusiones del foro sobre turismo del Frente Ciudadano por México, donde se afirmó que la violencia ha rebasado a las instituciones y que se deben revisar las estrategias, respondió que sólo “son posiciones que se dan” y que “aquí lo que se tiene que hacer es que cada quien trabaje por su lado”.
Asimismo, informó que este lunes comenzará a entregar en Atenango del Río los apoyos a las familias damnificadas por el sismo del 19 de septiembre, que serán aproximadamente 400 millones para unas 4 mil familias que resultaron incluidas en el censo de varios municipios.
Después de las 11 de la mañana, el gobernador encabezó con el alcalde Jesús Tejeda Vargas un programa de bacheo de calles en el carril de norte a sur del bulevar Vicente Guerrero, frente a las oficinas del Instituto de Vivienda y Suelo Urbano (Invisur).
Allí se dijo que se bachearán mil 500 metros en 36 calles, con costo de un millón 600 mil pesos; aunque el gobernador en su intervención aclaró que se utilizará material que fue donado por Pemex y que el gobierno del estado sólo apoyará con lo que haga falta.
También se dijo que serán cuatro brigadas las que bachearán esas 36 calles durante una semana.
Después, en entrevista, informó que este lunes a las 4 de la tarde entregará las primeras tarjetas de apoyo a familias damnificadas por el sismo del 19 de septiembre, en Atenango del Río.
Adelantó que las familias que sufrieron pérdida total recibirán 120 mil pesos y los que tengan daños parciales, de 12 a 15 mil. Adelantó que el siguiente municipio en dónde entregará estas tarjetas será Huitzuco.
Informó que los recursos serán entregados a unas 4 mil familias que perdieron sus casas en el estado, según el resultado del censo elaborado por la delegación de la Secretaría de Desarrollo Agrario Territorial y Urbano (Sedatu).
Explicó que como en los otros estados en donde hubo daños, aquí los recursos serán entregados a través de tarjetas de Bansefi, mismas que se han protegido para evitar la clonación, como ocurrió en otras entidades.
Detalló que de cada 100 pesos, 75 por ciento lo aportará el Fondo Nacional de Desastres Naturales (Fonden) y el 25 por ciento el gobierno estatal, pero aclaró que este dinero se pagará con el seguro catastrófico que se tiene contratado, “el gobierno no va a desembolsar un dinero que definitivamente no tiene”, aclaró.
También se le preguntó su opinión con respecto a las conclusiones del foro sobre turismo organizado por los partidos que integran el Frente Ciudadano por México, el sábado en Acapulco, en donde se afirmó que la violencia ha rebasado a las instituciones y se pidió una revisión de las estrategias de seguridad.
“Son posiciones que se dan, y aquí lo que se tiene que hacer es que cada quien trabaje por su lado”, dijo, desdeñando evidentemente el tema.
En cuanto a la suspensión de clases que sigue en la región Montaña baja, por temor a la violencia por parte de padres y maestros, el gobernador anunció que regresará en las próximas horas a Chilapa, no precisó si este lunes o martes, para evaluar la situación, pero dijo que espera que este lunes haya un avance “visible” en el regreso a clases.
Admitió que la semana pasada el regreso a clases “no fue como nos hubiera gustado, cada día vinieron avanzando de 5 a 10 escuelas. Nosotros esperamos que mañana lunes nos acerquemos a la totalidad de las escuelas”, declaró.
En otro tema, informó que el martes continuará sus reuniones con los partidos políticos, en el contexto de las pláticas del pacto por la seguridad.
