24 febrero,2024 2:02 pm

“Nunca lo torturé”, dice Zerón en documental de la BBC sobre el caso Ayotzinapa

 

Ciudad de México, 24 de febrero de 2024.  Tomás Zerón de Lucio, ex titular de la Agencia de Investigación Criminal (AIC), negó en un documental de la BBC sobre el caso Ayotzinapa haber torturado a Felipe Rodríguez Salgado, “El Cepillo”, presunto integrante del grupo Guerreros Unidos.

“Se ve que yo lo amenacé, okey, pero nunca lo torturé, yo era el jefe de la Agencia de Investigación Criminal, yo no tenía necesidad de torturar a nadie“, sostiene el ex funcionario, actualmente prófugo en Israel.

“Yo me volví muy importante como para ser culpado, pero no tan importante como para que alguien saliera en mi defensa”, agrega en el documental de la BBC titulado “Ayotzinapa: la noche en que desaparecieron 43 estudiantes en México”.

En julio del 2020 circuló en redes un video en el que aparece el ex mando policiaco al frente de un interrogatorio en el que “El Cepillo” se encuentra sometido y rodeado por otros elementos de la corporación.

En las imágenes, el presunto sicario aparece sentado, esposado y encapuchado; a Zerón le imputan amenazarlo y amedrentarlo para que cooperara con las indagatorias sobre la desaparición de los 43 normalistas.

Por esta imputación, el 23 de abril de 2021 un juez de control del Centro de Justicia Penal Federal del Reclusorio Sur ordenó la aprehensión del ex jefe de la AIC por los delitos de desaparición forzada, tortura y coalición de servidores públicos.

Zerón también señala en el documental –cuyos primeros dos capítulos fueron difundidos este sábado–que la magnitud del caso, así como la presión que hubo sobre el mismo, fue “mayúscula”, y enlista algunas decisiones que tomó como jefe de la investigación.

Cuenta que el 4 de octubre de 2014 recibió una llamada del entonces Procurador Jesús Murillo Karam, en el que le dijo que la PGR atraería la investigación de los estudiantes desaparecidos, hasta entonces en manos de la Fiscalía de Guerrero.

El ex Jefe de la AIC advierte que en ese momento se desplegaron en la zona más de 10 mil efectivos del Gobierno federal, entre elementos de la Marina, el Ejército, la Policía Federal y la propia PGR.

“Todavía no teníamos ninguna teoría de lo que había pasado, lo que yo hice fue el enviar policías, el enviar peritos forenses para empezar a analizar toda la información”, agrega en el primer capítulo.

En el estado de Guerrero había impunidad en el gobierno local, particularmente en Iguala, derivado a que estaba incrementando mucho la delincuencia en esa zona y alguien que salía constantemente en estas investigaciones era el alcalde (de Iguala), su esposa“.

“Dos de los hermanos de la esposa del presidente (municipal) pues habían estado vinculados directamente con el narcotráfico; en el caso de los estudiantes todo enfocaba directamente a la participación e instrucción directa del alcalde Abarca“.

Zerón además sostiene que la teoría del basurero de Cocula –donde según el gobierno anterior fueron quemados los estudiantes– surgió de las declaraciones que rindieron los primeros policías y criminales detenidos.

“Es como nosotros llegamos al basurero. El día 27 de octubre por la mañana volamos de la Ciudad de México hacia Cocula, nos trasladan en unos vehículos de la Marina hacia el basurero”, indica.

“El Almirante de Marina que estaba a cargo de Cocula, él me dice que hay 43 cuerpos en el lugar, yo me quedo en el lugar esperando a que llegaran los peritos tanto de la propia PGR como el equipo de Antropología Forense, el de los argentinos”.

Actualmente evadido de la justicia y residente en Israel, Zerón manifiesta que, durante la investigación del caso, se encontraron “algunas bolsas” a la orilla del Río Cocula, por lo que ordenó asegurar el lugar y realizar una investigación sobre las mismas.

“Mi idea era, primero, llegar al basurero, pero cuando estábamos sobrevolando el río, el detenido dijo: ‘fue en este lugar donde nos paramos y donde tiramos las bolsas’, el detenido nos está narrando que eran 8 bolsas donde pusieron los restos de los estudiantes“, expresa.

“Y dice que los aventaron al río. Entonces llegamos al lugar, él me dice que a ese lugar del basurero de Cocula que ahí los hicieron polvo, para después ir a depositar sus restos al río San Juan. En la orilla del río había bolsas, había no una, se encontraron algunos restos de bolsas”.

Texto: Antonio Baranda / Agencia Reforma / Foto: Archivo