Son para “resguardar y salvaguardar la integridad física de las mujeres víctimas de violencia extrema, sus hijas e hijos menores de edad”
Chilpancingo, Guerrero, 13 de junio de 2024. La Secretaría de Gobernación, a través de la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las Mujeres (Conavim), otorgó un subsidio por 4 millones 255 mil 800 pesos al gobierno estatal, etiquetado específicamente para refugios especializados para mujeres víctimas de violencia de género, sus hijas e hijos, para el ejercicio fiscal 2024.
El convenio para la obtención del subsidios se firmó el pasado 26 de marzo, pero apenas este martes 11 de junio se publicó en el Diario Oficial de la Federación. En el documento se lee que la entrega del dinero se programó en dos partes, la primera, correspondiente a 2 millones 553 mil 480 pesos, se entregó 30 días después de que se suscribió el acuerdo y la segunda parte, correspondiente a un millón 702 mil 320 pesos, está condicionada a que el gobierno estatal entregue el primer informe de ejecución del dinero entregado.
El objetivo de los refugios es “resguardar y salvaguardar la integridad física de las mujeres víctimas de violencia extrema, sus hijas e hijos menores de edad, y brindar servicios de hospedaje, alimentación, vestido y calzado; así como dotar de blancos, artículos de higiene personal, limpieza y artículos para bebés; además de una atención integral mediante servicios de carácter psicológico, educativo, médico, legal y de trabajo social; proporcionados por personal especializado y capacitación para el desempeño de las mujeres en una actividad laboral y bolsa de trabajo; de conformidad con el artículo 1 del decreto por el que se crea el Refugio para Mujeres, sus Hijas e Hijos en Situación de Violencia Extrema del Estado de Guerrero, publicado en el Periódico Oficial del Gobierno del Estado 29 alcance 1, el viernes 10 de abril 2020; lo cual es congruente con el objeto del presente convenio de coordinación y adhesión”.
En el convenio, el gobierno estatal se compromete a “reintegrar a la Tesorería de la Federación a más tardar el 15 de enero de 2025, los recursos federales transferidos que, al 31 de diciembre de 2024, no hayan sido devengados en términos del presente convenio de coordinación y adhesión”.
Los compromisos del refugio, suscritos en el convenio, son: “Brindar a las mujeres y sus hijas e hijos que viven en situación de violencia extrema, un espacio temporal de protección que cumpla con las características necesarias de seguridad, confidencialidad, guardias de vigilancia, ruta de evacuación y espacio arquitectónico adecuado para refugiar a la población usuaria vulnerable; proporcionar a la población usuaria del ‘refugio’, la atención psicológica, jurídica, de trabajo social y de atención que requieran, en los términos previstos en el presente convenio de coordinación y adhesión y los correspondientes anexos; establecer los mecanismos de coordinación y acciones necesarias que permitan referir a una usuaria a otro refugio, en el supuesto de que no haya espacio en el suyo para un nuevo ingreso; en cuyo caso deberá informar por escrito a ‘Gobernación’ a través de la ‘Conavim’, de esta circunstancia; mantener las instalaciones del ‘refugio’ en condiciones higiénicas adecuadas, a fin de brindar los servicios con empatía, calidad y calidez, evitando en todo momento el hacinamiento de las usuarias, así como de sus hijas e hijos”.
Este 4 de junio, en el Periódico Oficial del Estado se publicó el “modelo integrado del refugio para mujeres, sus hijas e hijos en situación de violencia extrema del estado de guerrero, integrado por: protocolo de seguridad, lineamientos para el programa de capacitación para el empleo, protocolo de atención psicosocial a mujeres usuarias de un refugio, protocolos de atención psicopedagógicas a niñas, niños y adolescentes”.
“En el refugio se pueden atender a diez familias, de manera simultánea, hasta por un lapso de tres meses ya que cuenta con diez habitaciones exclusivamente para hospedarlas y, cuando los casos lo ameriten, podrá compartirse la habitación con otra familia siempre y cuando no exista hacinamiento”.
Texto: Daniel Velázquez
