En Ámsterdam, La Haya y Rotterdam se registraron ataques con piedras y fuegos artificiales contra los agentes desplegados para intentar contener las protestas
Amsterdam, Holanda, 26 de enero de 2021. Las fuerzas de seguridad de Países Bajos detuvieron a más de 180 personas durante la última noche de protestas contra el toque de queda y otras restricciones impuestas por las autoridades frente a la pandemia de coronavirus, confirmó la Policía.
Los disturbios sucedieron en varias ciudades del país, si bien tuvieron su epicentro en la capital, Ámsterdam, La Haya y Rotterdam, donde se registraron ataques con piedras y fuegos artificiales contra los agentes desplegados para intentar contener las protestas.
La Policía confirmó el arresto de nueve personas en Ámsterdam y de más de 50 en Rotterdam, uno de los principales epicentros de los disturbios. La Policía de Rotterdam señaló además a través de un comunicado que un agente resultó herido durante los incidentes.
Asimismo, resaltó que una comisaría de la ciudad fue apedreada y fue objeto de un intento de incendio por parte de los manifestantes. “La rápida reacción evitó que la comisaría fuera incendiada”, manifestó.
La localidad de Hertogenbosch, a unos cien kilómetros al sur de Ámsterdam, fue también escenario de unos disturbios en los que fueron saqueadas varias tiendas, un supermercado y fueron dañados numerosos vehículos, según recogióla cadena de televisión neerlandesa NOS.
Los incidentes provocaron duras críticas por parte de las autoridades. Así, el alcalde de Rotterdam, Ahmed Aboutaleb, tildó a los participantes en las protestas de “ladrones sin vergüenza”, mientras que el alcalde de Hertogenbosch, Jack Mikkers, denunció un “inimaginable rastro de destrucción.
Los departamentos de Policía local y los alcaldes apuntan a varios grupos detrás de los disturbios, incluidos negacionistas del coronavirus y seguidores radicales de equipos de futbol. Los incidentes llegaron después de los del domingo, que las autoridades describieron como los peores en 40 años.
El primer ministro de Países Bajos, Mark Rutte, expresó su apoyo a las fuerzas de seguridad y dijo en que “la violencia criminal debe terminar”. “Los disturbios no tienen nada que ver con las protestas o la lucha por la libertad. Debemos ganar juntos la batalla contra el virus, porque sólo entonces podremos recuperar nuestra libertad”, puntualizó.
Por su parte, el ministro de Justicia, Ferd Grapperhaus, dijo que los responsables de los disturbios deben ser castigados rápidamente, según informó la agencia alemana de noticias DPA. Asimismo, hizo hincapié en que el Gobierno mantendrá en pie el toque de queda.
El toque de queda impuesto recientemente entró en vigor la noche del sábado al domingo y obliga a los ciudadanos, bajo penas que rondan los 95 euros, a permanecer en sus hogares entre las 21:00 y 4:30 horas del día siguiente.
Texto: Europa Press / Foto: Especial
