26 octubre,2024 10:51 am

“Parecía que nos hubieran bombardeado”, así recuerda Otis un prestador de servicios

Para sobrellevar la depresión de ver los cuerpos en el Malecón recurrió al alcohol, relata el líder cooperativista Arturo Pantoja Guatemala

Acapulco, Guerrero, 26 de octubre de 2024. Al amanecer del 25 de octubre de 2023, luego del impacto del huracán Otis, “Acapulco parecía que nos habían bombardeado”, recuerda el prestador de servicios turísticos, Arturo Pantoja Guatemala, quien entró en depresión y para sobrellevar el impacto de ver los cuerpos de marineros en el Malecón tuvo que alcoholizarse.

El presidente de la Unión de Cooperativas en Vanguardia de Deportes Acuáticos recordó, sentado frente a la playa El Morro, que ante los avisos preventivos de la llegada de una tormenta tropical, y luego de un huracán, con sus compañeros amarró las embarcaciones y motos acuáticas en la zona de playa, pensando que no les pasaría nada.

A las 9 de la noche se fue a su casa, en uno de los departamentos de la colonia Infonavit Alta Progreso. A las 10:30 de la noche, su preocupación era a flor de piel, y para las 11 de la noche, ya con los vientos huracanados en la ciudad, aún alcanzó a hablar con el velador de la cooperativa para decirle que se refugiara y salvara su vida y dejara todo lo material.

Contó que minutos antes de la medianoche, el viento comenzó a chiflar entre los edificios, y los vidrios de las ventanas de su casa no dejaban de sonar. Durante las dos horas siguientes, sólo escuchaba el crujir de los árboles quebrarse y caer, además del estruendo que provocaba el impacto de objetos en los edificios.

Para él, hablarle a los más pequeños de la casa fue difícil, porque estaban incontrolables, “era un infierno afuera y controlar a los niños, calmarlos, tuve que hablarles fuerte”. Mientras afuera todo volaba, junto con su familia sólo pedía que nada les pasara.

En cuanto el viento se calmó, alrededor de las 5 de la mañana salió al patio del edificio, y con sus vecinos vio la magnitud de la destrucción del huracán. “Nunca imaginé el gran desastre”. Ese miércoles, desde la mañana y hasta las 7 de la noche, no paró de limpiar con sus vecinos la zona aledaña al edificio en la etapa 15.

Al día siguiente bajó a su zona de trabajo, a la playa El Morro, “Acapulco parecía que nos hubieran bombardeado. Cuando llegué a la playa no encontré ni toldo, y las motos estaban enterradas de arena y en las palmeras había vidrios enterrados como cuchillos”.

Luego de ver la destrucción de los edificios, las casas, los negocios, y la Costera llena de árboles y otros objetos que salieron de los inmuebles “llegué y lloré en casa”. Al tercer día, caminó desde el Infonavit hasta el Malecón, donde vio al menos cuatro cuerpos algunos con signos de descomposición tirados en el lugar.

Al ver las embarcaciones en la Costera, completamente destruidas, y otras hundidas, se quedó sin aliento. El impacto de la escena nuevamente lo dejó en llanto. Pantoja Guatemala no soportó la impresión y tuvo que beber alcohol para sobrellevar la fuerte depresión. Luego dijo que se calmó y reflexionó, porque su familia estaba bien. Pero a un año del acontecimiento aquellos recuerdos pesan. “El tema sicológico nos llevó varios meses”.

A un año de aquella mañana donde vio la ciudad destruida, opinó que para que el turismo regrese al destino, lo primordial es garantizar la seguridad de los habitantes y de los visitantes, “difícilmente la economía va a circular en un destino turístico. La seguridad es la base para cualquier negocio, y cualquier inversión”.

Agregó que “el gobierno falla, la economía se estanca, y es un tema (la seguridad) en lo general, no sólo de Acapulco, pero es un tema primordial en nuestro país, y ahí nos han fallado las autoridades, y hay un desencanto hacia los actores políticos, porque no lo ponen como primera línea, eso es grave, sabemos que es riesgoso”.

El dirigente recriminó que los diputados federales no tengan iniciativas, ni se promulguen leyes con penas más severas para castigar a los delincuentes, “así difícilmente vamos a salir adelante, y vamos a seguir sobreviviendo”.

Desde su visión, Pantoja Guatemala de que “Acapulco requiere de una estrategia que vaya de la mano la seguridad, de lo contrario difícilmente cualquier promoción turística servirá para reactivar la economía de la ciudad, “la parte náutica la vamos sobreviviendo, tapando un hoyo, y abriendo otro, pidiendo préstamos”.

“Es desesperante, desde ayer ando agüitado, y ese tema de Otis, al que le queremos dar vuelta, difícilmente será. Las heridas están ahí”, expresó.

Texto: Jacob Morales Antonio