9 enero,2024 10:02 am

Pobladores en la frontera sur de Chiapas denuncian enfrentamientos entre cárteles

Habitantes de Chicomuselo aseguran en una carta que el Cártel de Sinaloa y el CJNG provocaron una masacre de 20 personas, entre ellas dos civiles, el pasado 4 de enero

San Cristóbal de las Casas, Chiapas, 9 de enero de 2024. Pobladores de Chicomuselo, en la frontera sur de Chiapas, denunciaron el terror causado por los enfrentamientos del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y el Cártel de Sinaloa (CS), que presuntamente provocaron, el pasado 4 de enero, una masacre de 20 personas, entre ellas dos civiles, y el desplazamiento forzado de habitantes.

En una carta dirigida por “Sociedad Civil de Chicomuselo”, se aseguró que el enfrentamiento de casi siete horas puso en peligro a mujeres, hombres y niños de la localidad de Nueva Morelia.

“Es doloroso escuchar el testimonio de las personas, ver a niños y jóvenes temblando de miedo y enfermándose por vivir estas experiencias traumáticas”, dice la carta.

Desde los primeros días de enero la violencia ha impactado a los habitantes de esta comunidad.

Entre el 3 y 4 se suscitó una ola de violencia a cargo de criminales, a pesar de que los elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) se mantienen a una hora, en la cabecera municipal, desde Octubre pasado, de acuerdo con testimonios de habitantes.

“El pasado 4 de enero alrededor de las 11:30 am se suscitó un enfrentamiento entre cárteles que tienen presencia en la región: CJNG y CS en el ejido de Nueva Morelia, Chicomuselo, Chiapas, enfrentamiento que duró alrededor de 7 horas, donde la población se mantuvo en pánico y en la zozobra, resguardándose como pudo para cuidar sus vidas, ya que en muchas de las casas las balas pasaban por las láminas. Cientos de familias atemorizadas por tanta violencia, obligándose a salir”, dicen en el documento.

De acuerdo con pobladores entrevistados, dos de los muertos eran vecinos que quedaron entre el fuego cruzado. Uno de ellos tenía 35 años y era de la comunidad La Pinta, el otro 52 años, de la comunidad Las Flores. El resto presuntamente eran criminales.

“No hay evidencia de estos muertos (18), porque los grupos del crimen siempre se los llevan, los recogen; hay un video que se difundió en el que una retroexcavadora hace una fosa en el mismo municipio donde sucedió el enfrentamiento, lo que sabemos es que ahí van a depositar a estos muertos sicarios”, dijo uno de los entrevistados.

“Durante el desplazamiento, personas empezaron a huir de sus viviendas de Nueva Morelia, el 5 y 6 de enero, muchos en sus carros de redilas escaparon por la vía de La Angostura, que saca a Comitán.

“Otras personas se fueron a comunidades cercanas, el caso es que ya nadie se quedó, porque aquí los soldados se saludan y hasta se dan la mano con los criminales”, agregó un poblador entrevistado.

“La comunidad tuvo que salir el 5 de enero porque no hay seguridad para permanecer en sus casas, puesto que ninguna autoridad les ofrecía quedarse garantizando seguridad”, se indica en la carta de denuncia.

Nueva Morelia tiene unos 600 habitantes, se ubica en un camino estratégico que lleva a la mina de barita explotada años atrás por la empresa canadiense Blackfire Exploration México. Sus habitantes se dedican a la siembra de maíz, café y cacahuate.

Antes de este hecho, los pobladores habían sido testigos de violencia de los grupos del crimen organizado, pero hasta ahora decidieron huir.

Texto: Mariana Morales / Agencia Reforma