8 julio,2018 5:47 am

Pompeo rechaza acusaciones; gángster, lo llama Corea del Norte

Norcorea acusó este fin de semana a una delegación estadunidense de presionar unilateralmente para obligar al país a desmantelar su armamento nuclear, calificando las conversaciones de “preocupantes”.

Texto: DPA / Foto: Archivo Redes sociales
Seúl/Tokio, 8 de julio de 2018. El secretario estadunidense de Estado, Mike Pompeo, rechazó hoy sábado las duras críticas de Corea del Norte tras su visita el viernes y el sábado al país, después de que Corea del Norte calificara de “muy decepcionante” y de “mentalidad de gánster” la actitud de Estados Unidos.
“Sé exactamente lo que pasó”, dijo hoy domingo desde Tokio, donde se reunió con sus homólogos de Corea del Sur y Japón para informarles de la reunión. “Cuando hablábamos del alcance de la desnuclearización, no hubo réplicas”.
El ministerio norcoreano de Relaciones Exteriores acusó a la delegación estadunidense de tener una “mentalidad de gánster” y de presionar unilateralmente para obligar al país a desmantelar su armamento nuclear, calificando las conversaciones de “preocupantes”. Al contrario, Pompeo había informado de avances en casi todas las cuestiones centrales.
“Si esas existencias son propias de gánsters, entonces el mundo es un gánster”, dijo Pompeo en referencia a la exigencia a Pyongyang de que desmantele sus armas nucleares. Hubo una decisión unilateral al respecto en el Consejo de Seguridad de la Organización de Naciones Unidas (ONU), recordó.
Pompeo habló en una rueda de prensa conjunta con el ministro de Exteriores japonés, Taro Kono, y su par surcoreana, Kang Kyung-wha, en la que los tres enfatizaron la necesidad de urgir a Pyongyang pasos concretos hacia el desmantelamiento de sus armas nucleares y acordaron mantener las sanciones económicas de la ONU contra el Estado comunista.
“Podemos reafirmar nuestro firme compromiso con el continuado fortalecimiento de nuestra cooperación trilateral hacia el objetivo común de un desmantelamiento completo, verificable e irreversible de todas las armas nucleares y misiles de Corea del Norte”, dijo Kono en una rueda de prensa conjunta tras el encuentro.
El viaje de Pompeo pretendía concretar el compromiso alcanzado entre el presidente estadunidense Donald Trump y el líder norcoreano Kim Jong-un, el 12 de junio en Singapur. Este último se comprometió a desmantelar su armamento nuclear a cambio de garantías de seguridad. Además, Washington anunció la suspensión de los ejercicios militares conjuntos con Corea del Sur.
Pompeo continuará ahora su gira por Asia con una visita a Vietnam, donde se reunirá con su homólogo, Pham Binh Minh; el secretario general del Partido Comunista, Nguyen Phu Trong, líder de facto del Gobierno, y el primer ministro, Nguyen Xuan Phuc.
Algunos analistas creen que Vietnam podría ayudar en la mediación con Corea del Nortey organizar conversaciones entre Tokio y Pyongyang, dijo a dpa el experto Carlyle Thayer de la universiad de Nueva Gales del Sur en Australia.
Las relaciones entre Vietnam y Estados Unidos se estrecharon en los últimos años en el intento de hacer frente a las crecientes ambiciones de China en la región.
Tras una visita en 2016, el entonces presidente estadunidense Barack Obama levantó las sanciones armamentísticas contra Vietnam, allanando el camino a alcanzar acuerdos entre los dos países.
Pyongyang critica a EU sobre
desnuclearización tras la marcha de Pompeo
El sábado, Corea del Norte criticó con dureza la actitud de Estados Unidos en las negociaciones para su desnuclearización, unas horas después de que abandonase el país su secretario de Estado, Mike Pompeo.
Cuando Pompeo ya había llegado a Tokio tras dos días de conversaciones en Pyongyang, el Ministerio de Exteriores del régimen comunista norcoreano calificó de “lamentable” y “preocupante” la postura del gobierno de Donald Trump en esas conversaciones.
Ello pese a que el propio secretario estadunidense de Estado, poco antes de abandonar Pyongyang, había asegurado que se habían alcanzado progresos “en casi todos los temas centrales”, sin dar más detalles.
Pero, en un comunicado divulgado por la agencia estatal KCNA, el régimen norcoreano aseguró hoy que la demanda de Estados Unidos para que su desnuclearización sea “unilateral y forzada” fue “lamentable”, al tiempo que reiteró su petición de que el desarme se produzca de forma “gradual”.
El régimen calificó el resultado de las conversaciones de “preocupante” y dijo que no han servido para fortalecer la confianza entre ambas partes, sino para “encarar una fase peligrosa en la que nuestra voluntad de desnuclearización podría tambalearse”.
Un portavoz del Ministerio norcoreano de Exteriores afirmó que Washington expresó unas demandas “en contra del espíritu” de la histórica cumbre de junio en Singapur entre Trump y el líder norcoreano Kim Jong-un, algo que no ha servido para fortalecer la confianza entre ambas partes.
El pasado 12 de junio, Kim Jong-un y Trump firmaron una declaración con la que dijeron abrir una nueva era de relaciones y en la que el régimen norcoreano se comprometió a trabajar por la “desnuclearización total” si Washington garantiza su supervivencia.
Pero el documento no aportó apenas detalles y, pasadas ya varias semanas, el escepticismo y las dudas en torno a la viabilidad del acuerdo han ido ganando fuerza.
En este contexto se celebró la visita a Pyongyang del responsable de la diplomacia de Estados Unidos, presionado para alcanzar acuerdos tangibles y que no llegó a reunirse con Kim Jong-un, como sí ocurrió en sus dos viajes previos, según confirmó el Departamento de Estado de EU.
Durante dos días mantuvo reuniones de varias horas con el general Kim Yong-chol, figura de peso de la inteligencia norcoreana, en las que hablaron de “construir confianza”, sin que haya trascendido una posible hoja de ruta hacia la desnuclearización de Corea del Norte, objetivo principal de la visita.
“Son temas complicados, pero creo que hemos progresado en casi todos los temas centrales. En algunos hemos hecho un gran progreso, en otros todavía hay trabajo por hacer”, dijo hoy Pompeo antes de abandonar Pyongyang.
El secretario de Estado de EU mostró su deseo de continuar las conversaciones e insistió en que el presidente Trump está comprometido con lograr “un futuro mejor para Corea del Norte”.
Según la portavoz del Departamento de Estado, Heather Nauert, Washington y Pyongyang acordaron crear grupos de trabajo para abordar “cosas esenciales”, incluida la verificación de la desnuclearización norcoreana, y hablaron de la repatriación de los soldados estadunidenses caídos durante la Guerra de Corea (1950-1953), ya tratada durante la cumbre de junio.
(En la imagen de archivo, un encuentro anterior entre el secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, y el líder norcoreano Kim Jong-un)