Con tal despliegue de poder los grupos criminales pretenden ser considerados a la hora de la “búsqueda de poder”, dice el párroco de La Sabana. El también articulista de El Sur se opone a que se negocie con ellos, y propone que se revise la estrategia de seguridad
Acapulco, Guerrero, 4 de agosto de 2023. El padre Jesús Mendoza Zaragoza opinó que la jornada de violencia que se vivió este miércoles en Acapulco en la que hasta 12 vehículos fueron incendiados, es la muestra del poder de los grupos criminales y que se debe de entender en el contexto del periodo preelectoral en el que transitamos.
Consultado vía telefónica, expuso que con esta capacidad de manifestación dijo estar en contra de negociar con ellos y mejor se debe de revisar la estrategia de seguridad y la población debe ser tomada en cuenta para construir la paz porque “el gobierno no va a poder nunca, no tiene la capacidad, no tiene a la sociedad”.
El también articulista de El Sur dijo ayer “que los grupos criminales, ya sea aquí o en otras partes del estado, desean hacer sentir su poder para lograr interlocución o para hacer presión en torno a algunos de sus intereses, y yo creo que particularmente en estos tiempos preelectorales, yo creo que va a ser una tónica que va a permanecer como para posicionarse políticamente”.
Señaló que estos grupos “ya tienen dinero, pero no están contentos con tener dinero, ahora lo que buscan es tener poder y el poder lo van teniendo de distintas formas, como lo han tenido desde siempre, es decir, los vínculos con la política son los que les han dado la capacidad de encaramarse en espacios de poder, sobre todo, en municipios, también en otros ámbitos de gobierno”.
Jesús Mendoza agregó que la manifestación de violencia que presenció la sociedad acapulqueña este miércoles en el poniente y el centro del municipio, “sin duda tiene que ver con mostrar su capacidad, de tal forma sean escuchados, sean tenidos en cuenta y sean considerados a la hora de la búsqueda de poder”.
En cuanto a la posibilidad de negociar con estos grupos como solución de los conflictos, dijo que “la delincuencia tradicionalmente siempre ha hecho negociaciones con el poder, solamente que han estado ocultas y ahora pues quieren hacerlo quizás de otra forma”.
“Negociar es una alternativa que tienen las autoridades, pero no me parece que sea la conveniente”, aseveró el párroco de La Sabana.
Expuso: “si va a haber negociaciones, que sean abiertas y que sean legales también, es decir, en circunstancias difíciles pueden hacerse leyes que permitan este tipo de cosas, pero siempre y cuando sean transparentes porque las negociaciones ocultas siempre llevan a situaciones más complicadas”.
Reiteró su postura en contra de la negociación y propuso en cambio “que realmente se revise la estrategia gubernamental relacionada con la inseguridad y con la violencia, pues que tiene aspectos que no convencen”.
Indicó que “el gobierno tiene que buscar otras formas, que la sociedad se involucre de otra forma. El gobierno no va a poder nunca, no tiene la capacidad, no tiene a la sociedad”.
Jesús Mendoza, quien escribe en sus artículos sobre la construcción de paz, explicó que en el pasado “hemos tenido contextos muy, muy difíciles en la historia de México, ya sea las transformaciones, la Independencia, la Reforma, la Revolución, y han sido muy complicados”.
Sin embargo, “hemos salido de esas situaciones y se han superado”, mencionó y por ello “la paz sigue siendo posible y sigue siendo una aspiración a la que tenemos derecho todos y en ese sentido hay que mantener la esperanza”.
Recalcó que la paz “es posible, no es solamente un sueño, si no hay la posibilidad, el asunto es que reconozcamos que si somos parte del problema, ahora tenemos que convertirnos en parte de la solución y que una estrategia bien, que vincule a la sociedad y a los gobiernos, nos podría abrirnos mejores caminos”.
Texto: Ramón Gracida Gómez / Foto: Archivo-Jesús Trigo
