El apoyo se entregó más tarde a los beneficiarios que quedaron pendientes, asegura el alcalde. Niega que hubiera prioridad para funcionarios en el acceso al concierto de Lila Downs, que se llevó a cabo en el Museo Fuerte de San Diego en el segundo día del festival de La Nao. “Los espacios apartados eran para personas con discapacidad y adultos mayores”, dice
Acapulco, Guerrero. El alcalde Evodio Velázquez Aguirre dijo que por un “mal cálculo” se terminó el dinero para pagar a los beneficiarios de las Becas Municipales de Excelencia el pasado martes, pero aseguró que el apoyo se entregó más tarde a quienes quedaron pendientes.
De la desorganización en el segundo día del Festival Internacional de La Nao, el alcalde argumentó que los espacios apartados eran para personas con capacidades diferentes y de la tercera edad, y negó que se haya dado prioridad en el paso a funcionarios y regidores.
Consultado en la oficina de Presidencia sobre los beneficiarios del programa de Becas Municipales de Excelencia que no pudieron cobrar el pasado martes porque según les dijeron se acabó el dinero, aseguró que se les entregó más tarde.
Indicó que el secretario de Desarrollo Social, Octavio Olea Apátiga, le informó que se pagó a los pendientes más tarde, aunque el martes, luego de que les avisaron que ya no había dinero, los padres de familia y alumnos se retiraron del lugar donde se entregó el apoyo de 2 mil pesos.
Velázquez Aguirre explicó que la falta de dinero para pagar a todos los que asistieron al evento se debió a que “fueron muy pocos y hubo un mal cálculo por parte de las instancias que se encargaron”.
Insistió en que se atendió el problema y se resolvió pagando más tarde porque “hubo un retraso”.
Sobre las inconformidades en el segundo día del Festival Internacional de La Nao, en el acceso al Museo Fuerte de San Diego donde se realizó el concierto de la cantante y compositora oaxaqueña Lila Downs, porque no se respetó la fila del publico y funcionarios y regidores ingresaron sin esperar y además hubo espacios apartados, Velázquez Aguirre respondió que “no se apartó ni un solo lugar”.
Al mostrarle fotografías difundidas en las que se ven espacios apartados, justificó que eran reservados para personas con capacidades diferentes y adultos mayores que no pueden subir a las gradas que están colocadas en la parte alta del museo.
“El alcalde estuvo en la parte de arriba y sus funcionarios, muchos de ellos, más de la mitad, estuvieron parados”, expuso.
Añadió que los funcionarios municipales tienen la instrucción de ser los anfitriones en las actividades de La Nao, que son los que atienden, saludan, dan la bienvenida y ayudan que no haya ninguna situación que pueda generar algún enojo.
Velázquez Aguirre insistió en que no hubo prioridad “absoluta” para el ingreso al museo, que incluso regidores se regresaron molestos. “Hubo una delegación de cónsules invitados a la ceremonia de inauguración y hubo algunos regidores de las comisiones encargadas que estuvieron acompañándome en la parte del estrado, a ellos se les hizo una sala de ajuste de tiempo”, explicó respecto al ingreso de ediles como la perredista Alejandra Solorio Almazán.
Pidió a la población tener paciencia porque el Museo Fuerte de San Diego tiene ciertas restricciones al ser patrimonio cultural, por ello el acceso es limitado a un número de personas y es necesario respetar la cantidad de sillas que se colocaron y la logística que se tiene en el lugar.
Texto: Mariana Lebastida / Foto: Archivo El Sur
