27 agosto,2020 4:53 am

Prevalece la corrupción en los jueces, señalan familiares de los 43 sobre el amparo a los Abarca

“El hallazgo de Christian nos cayó como bomba, fue y es muy doloroso”, dice la mamá Hilda Hernández. La presencia del GIEI y de los peritos argentinos ha hecho la diferencia respecto a otros casos de desapariciones, considera. A un mes de que se cumplan seis años de la desaparición de sus hijos participan en un mitin en el Antimonumento en Cdmx 

Ciudad de México, 27 de agosto de 2020. A un mes de que se cumplan seis años de los crímenes cometidos en Iguala la noche del 26 y la madrugada del 27 de septiembre de 2014, familiares de los 43 estudiantes normalistas desaparecidos esa noche, acompañados por otros ciudadanos y colectivos solidarios, realizaron un mitin en el Antimonumento +43, como parte la 71 Acción Global por Ayotzinapa.

Aproximarse a un nuevo aniversario sin saber el paradero de los 43 jóvenes, es un momento particularmente duro para sus madres y padres, según lo expresó con firmeza Hilda Leguideño, mamá de Jorge Antonio Tizapa Leguideño, al recordar que por estas fechas, hace 71 meses, sus hijos empezaban a recorrer el camino en la escuela Normal Rural Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa, “para estudiar y cumplir un sueño”.

“El próximo mes se cumplen seis años de una angustia que ustedes no se imaginan. Llevamos casi seis años caminando sin verdad y sin justicia, cuatro años en el sexenio de Enrique Peña Nieto, quien se encargó de formular la gran mentira histórica que hizo mucho daño a las madres y los padres de los 43. Cuatro años en que dijeron que fue la delincuencia organizada, cuando en ese hecho participaron la Policía Municipal, Ministerial y Federal, y los militares”.

La presencia del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) y de los peritos del Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF), dijo la señora Hilda, ha hecho la diferencia respecto a otros casos de desapariciones cuyos expedientes quedan atorados en las telarañas de la burocracia, “es gracias a ellos que seguimos caminando”, dijo.

Pone “piedras en el camino”

Los padres y madres expresaron su preocupación ante los recientes amparos otorgados al exalcalde de Iguala, José Luis Abarca, y a su esposa, María de los Ángeles Pineda Villa, quienes obtuvieron la cancelación del auto de formal prisión en su contra por delincuencia organizada y operaciones con recursos de procedencia ilícita.

“La herida sigue abierta y nos siguen faltando 43 y eso nos hace pararnos en este lugar, hoy principalmente con la noticia de que un juez concede amparo al matrimonio de los Abarca”, expuso Felipe de la Cruz, vocero de los familiares.

“La corrupción que prevalece en el Poder Judicial queda de manifiesto. Tenemos como evidencia el hecho de que la juez, a pocas horas de haberse capturado al Mochomo –Ángel Casarrubias Salgado, presunto líder del cártel Guerreros Unidos–, había recibido un soborno para liberarlo y hoy con esta noticia. Pero estamos seguros de que la justicia va a llegar y van a permanecer donde tienen que estar, porque lo que saben deben decirlo para poder llegar a los jóvenes”.

Consideró que si bien el actual Poder ejecutivo está marcando una diferencia contundente respecto al trabajo del sexenio anterior, el Poder judicial estaría interponiendo “piedras en el camino para que esto no avance como debería”.

Lamentó que es a pesar del compromiso que a principios de marzo firmaron el presidente Andrés Manuel López Obrador, el fiscal general de la República, Alejandro Gertz Manero, y el ministro presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Arturo Zaldívar, para colaborar en el esclarecimiento de los ataques en Iguala.

“Hemos visto cómo han liberado a mucha gente involucrada, como al Cabo Gil –Gildardo López Astudillo–, por mencionar a alguno de Guerreros Unidos. Hoy se está viviendo la consecuencia del mal trabajo hecho por la entonces Procuraduría General de la República (PGR) y se les concede el amparo a los Abarca, con la intención de empezar un nuevo proceso”.

“No creo que salgan porque nunca han sido consignados por el caso Ayotzinapa, están consignados por cargos diferentes al que nosotros estamos exigiendo”, afirmó el portavoz de los padres.

La mamá de uno de los 43, Hilda Legideño dijo que la exigencia de que el ex gobernador Ángel Aguirre Rivero se presente ante la justicia sigue vigente.

“Aunque muchos lo defiendan, para nosotros tiene responsabilidad. No movió un solo dedo por detener el ataque que estaban sufriendo nuestros hijos, jóvenes estudiantes, de los que sabían perfectamente quiénes eran porque estaban monitoreados desde la mañana. Dijeron que fue una confrontación, pero no fue así, sabían lo que estaba ocurriendo”.

Añadió que en La noche de Iguala existe responsabilidad de las fuerzas armadas y la Policía Federal, la cual presentó un informe “a su manera, no sabemos si sea verdad o mentira lo que nos estén diciendo”.

La fuerza de la verdad científica

En cuanto a las investigaciones del sexenio pasado encabezado por el presidente Enrique Peña Nieto, y la modalidad que se persigue actualmente, Felipe de la Cruz enfatizó que hay una diferencia en cuanto a los resultados que se están consiguiendo ahora, los cuales corresponden a “una verdad científica”.

“Es cierto que es doloroso para nosotros, el hallazgo de una parte del cuerpo de Christian Alfonso Rodríguez Telumbre, por ejemplo, pero es demostrado científicamente ante una ‘verdad histórica’ que decía que fueron quemados todos, y que hoy sabemos que siempre fue una simulación para distraer de lo que estaba pasando”, dijo.

“El hallazgo de Christian nos cayó como bomba: fue y es muy doloroso porque los muchachos son parte de nosotros, nos duele mucho cada vez que salen este tipo de noticias”, comentó posteriormente en exclusiva Hilda Hernández, mamá de César Manuel González Hernández.

De la posibilidad de que madres y padres recibieran atención psicológica especial después de la noticia de la identificación genética de Christian, Hilda dijo, “la verdad, nos hemos descuidado un poquito de eso”.

“A veces sentimos que es necesario mejor insistirles en las líneas de investigación que en otras cosas. Aunque a lo mejor sí es necesario, porque como padres sentimos un decaimiento y quieres hablar con alguien para que te dé algo de sanidad”, admitió.

Lo que más desespera a los padres, insistió, es no tener una respuesta.

“Hay varias líneas que se investigan, pero no puedes encontrar a esa persona que te puede dar en verdad información sobre dónde están los muchachos. Hay que agarrar más fuerza para seguir exigiendo al gobierno que nos dé una respuesta rápida: no queremos que apresuren, pero sí queremos que sea rápido y concreto. Para que no sólo sea reunión tras reunión, sin un resultado favorable”.

Para el próximo 26 de septiembre, sexto aniversario de la desaparición de los 43 estudiantes, los familiares evalúan de que manera protestar.

Texto y foto: Caterina Morbiato