Acapulco, Guerrero, 7 de mayo de 2020. Representantes de diversas asociaciones de Restauranteros de la zona Diamante, la bahía de Acapulco y Pie de la Cuesta se instalaron a la entrada del Centro de Convenciones para exigir apoyos al gobierno ante el cierre forzado de sus negocios por la pandemia del Covid-19 que azota al país.
Negocios de Pie de la Cuesta, la bahía de Acapulco, Puerto Marqués, Revolcadero, Barra Vieja, Bonfil, San Andrés, Playa Linda o Las Glorias, entre los afectados.
Para el presidente de Restauranteros Unidos de Acapulco (RUA) Javier Reinada, “ya no hay de dónde rascarle, ya tocamos fondo” luego del cierre de negocios y la falta de turismo y por ende, trabajo.
Asimismo, lamentó el poco interés de las autoridades de los tres órdenes para apoyarlos más allá de haberles entregado una despensa.
Por ello, indicó que en colaboración con unas 15 asociaciones de restauranteros preparan un documento –que se enviará en breve a las tres instancias de gobierno– en el que exigen descuentos para pagar servicios como agua y luz así como el predial, “pues ya no tenemos de dónde sacar más dinero”. Argumentó también que no hay manera de ayudar a sus trabajadores ni con una despensa.
“Esta situación es algo desesperante, es algo que no podemos ya aguantar, tenemos más de un mes así”, añadió.
Por su parte, el presidente de la Agrupación Única de Restauranteros de Puerto Marqués, David Deloya Hernández, comentó que luego de casi dos meses de inactividad por la pandemia, “nos vemos en una situación crítica económicamente hablando; los restaurantes de Puerto Marqués estamos pasando por una crisis como nunca la hemos sentido y en este momento necesitamos urgentemente un apoyo económico y en especie por parte de los tres niveles de gobierno”.
No queremos hacer presión de alguna índole, destacó, “más que plantearle de forma pacífica a nuestras autoridades la necesidad que está sufriendo nuestra gente”, indicando que en Puerto Marqués se trata de unos 85 restaurantes afectados.
Del mismo modo declaró el presidente de la Unión Única de Restauranteros de Playa Bonfil, Margarito Pinzón Ignacio. “La situación es grave para todos, nos está dejando con hambre, con deudas y todos estamos sufriendo”. Lamentó que el gobierno sólo les ofreció una despensa y por una ocasión.
Queremos salir de este confinamiento, aseguró al tiempo que solicitó ayuda para pagar de manera diferida servicios como la luz, el agua o teléfono y apoyos para hacer regresar el turismo a Acapulco.
Mientras tanto, la presidente de la Unión de Restauranteros y Hoteleros de Pie de la Cuesta, Martina Zequeida Angelito, que representa a 45 negocios, declaró que “nosotros sí atendemos el llamado que nos hizo el gobernador (Héctor Astudillo Flores) de quédate en casa; sí, nosotros nos quedamos en casa pero cómo le vamos a hacer para comer”, preguntó.
“Tenemos completamente cerrado, lo poco que teníamos ya se acabó, estamos completamente endeudados y queremos que los tres niveles de gobierno nos apoyen, al menos que nos manden despensas para los trabajadores porque ellos también necesitan”.
En ese sentido, la presidenta de la Unión de Concesionarios de Playa Revolcadero, Ofelia Niño Pineda, reveló que “a Revolcadero no ha llegado ningún apoyo, nosotros los concesionarios hemos comprado de nuestra propia bolsa algunas despensa a nuestros trabajadores, pero la verdad ya estamos en una situación de insolvencia económica muy grande porque no hemos tenido ningún ingreso, tenemos cerrados los negocios y estamos olvidados por parte de los tres niveles de gobierno”.
Texto: Óscar Ricardo Muñoz Cano / Foto: Jesús Trigo
