Ciudad de México, 16 de junio de 2021. Mare Advertencia Lirika (Ciudad de Oaxaca, 1987) rapea para poder nombrar lo que la atraviesa, soltar lo que no quiere estar cargando y cuestionar su lugar en el mundo como mujer, un mundo injusto.
Siempre se ha asumido como una chica libre, criada en una familia donde las mujeres debieron tomar las riendas empujadas por circunstancias fatales. Su padre fue asesinado en medio de los conflictos agrarios en su estado natal.
“Vi a estas mujeres tener que pelear en el cotidiano”, comparte en entrevista. Y añade: “Una se descubre feminista”.
En su caso, la también poeta y activista que empezó a rapear a los 16 años, ese despertar ocurrió ante el impulso de las leyes provida en Oaxaca y la criminalización del derecho de las mujeres a decidir sobre sus propios cuerpos.
“Empezó a ser muy obvio el que había una violencia que me atravesaba”, dice.
Y entonces despertó una necesidad de reivindicarse desde el feminismo para reconocer directamente al “enemigo común”, y entendió que la sociedad es sumamente injusta en la cuestión de género.
La legislación en Oaxaca, sin embargo, ha dejado atrás el estancamiento y ha avanzado ya en ese reconocimiento, aunque algunas comunidades del estado aún resienten el rezago.
Un diálogo colectivo
Las posturas feministas de Mare Advertencia Lirika, de 34 años, son evidentes en sus letras. “No escribo de lo que no conozco”, ataja.
Su rap es como pensar en voz alta. “Es un diálogo colectivo que lanzo al mundo”.
En Incómoda, por ejemplo, tema grabado en su disco Siempre viva, de 2016, escribió: “La mula no era arisca, pero la hicieron, / la niña no era feminista, pero aquí nos vemos, / compas creemos, machitos no sabemos, / porque es normal que los lobos vistan piel de cordero”.
Aunque muchas mujeres de las localidades indígenas de Oaxaca no se reivindican como feministas, sí ejercen luchas por los derechos de los pueblos originarios y de las mujeres en particular. En muchas comunidades, advierte la rapera, antes ellas ni siquiera ocupaban cargos públicos o no eran figuras de autoridad.
“Hay una resistencia histórica de los pueblos originarios donde las mujeres han entablado esa lucha por la preservación de la cultura, de la lengua. Y ahora mismo (hay esfuerzos) contra los proyectos transnacionales extractivistas y la defensa del territorio”, dice la rapera, quien, para expresarse y dar cuenta de lo que la “atraviesa”, además de la voz y la letra, se vale de la jarana y muy pronto del requinto, que está aprendiendo.
En 2013, Mare Advertencia Lirika recibió el reconocimiento María Sabina otorgado por el Instituto de la Mujer Oaxaqueña por su trabajo a favor de la reivindicación de los derechos de la mujer a través de la música.
Pero su labor va más allá: Ha brindado acompañamiento a familiares de desaparecidos en su exigencia de justicia ante las autoridades. Así lo denunció en Se busca: “Cada persona que no está / es una ausencia que no sana / nos vamos convirtiendo en una sociedad sin alma”.
“Pienso que Se busca es una de las canciones que no debería existir, pero sí es necesario que exista porque el mundo no está para negar esta problemática”, señala.
Esa denuncia tenía que hacerse, enfatiza, sobre todo en un país donde la desaparición forzada alcanza un número muy alto de víctimas.
La desigualdad económica y la segregación racial son también otros de sus temas.
“Veo la música como un documento histórico”, define: “Este proceso donde vamos contando la realidad”.
Texto: Erika P. Bucio / Agencia Reforma
