29 mayo,2024 3:05 am

Reabrirá antes de verano el último de los cinco 100% Natural, dice el propietario; incumplió el gobierno con los créditos, se queja

 

Acapulco, Guerrero, a 29 de mayo de 2024.- El fundador y propietario de los restaurantes 100% Natural en Acapulco, Pablo Álvarez, informó que a siete meses del impacto del huracán y antes de las vacaciones de verano reabrirá en la Condesa el último de los cinco restaurantes que resultaron severamente afectados con el impacto del meteoro.

En declaraciones en la sucursal de Costa Azul, que está en pleno proceso de remodelación, pero que fue la primera que abrió luego del impacto del huracán, informó que antes de las vacaciones de verano reabrirá el último de los cinco restaurantes que tiene la marca en la ciudad.

Contó que de las cinco sucursales, las que tuvieron pérdida total fueron las ubicada en playa Dominguillo, Condesa y en el bulevar de Las Naciones, y de forma parcial en la primera que se fundó hace 43 años en el fraccionamiento Magallanes, y el de Costa Azul, que fue la primera en abrir luego del impacto del huracán, y donde se estuvo apoyando a la población con comida.

El fundador del concepto indicó que para la seguridad de los comensales y como parte de la renovación del techo, decidieron remodelar la sucursal y que en aproximadamente 15 días volverán a atender a los clientes.

El señor Álvarez indicó que a siete meses del impacto del meteoro categoría 5 el costo del metro cuadrado de la construcción de la palapa es de mil 700 pesos, que es casi el doble de lo que costaba antes del huracán.

La empresa en Acapulco emplea a 350 personas de forma directa, y durante estos meses ninguno de los trabajadores fue despedido, e incluso fueron solidarios con la marca, al apoyar en los trabajos de limpieza y reconstrucción de cada una de las sucursales, además de aceptar la reducción de sus jornadas de trabajo y sus salarios durante los meses en los que estuvieron en reconstrucción.

Comentó que el retraso en la reconstrucción de los inmuebles se debió a tres factores, la gran cantidad de afectados, que alentó el pago de las pólizas de seguros, la falta de mano de obra y la falta de materiales: “afortunadamente nuestros negocios han estado asegurados, y eso ha sido un beneficio, que jamás nos imaginábamos que nos iba a pegar un huracán de esta categoría y pensamos que nunca nos iba a pasar nada, y para eso son los seguros”.

“A nosotros el huracán nos afectó mucho en nuestra infraestructura. Ha sido difícil, un trabajo arduo, tardío, porque la gente ha tenido mucho trabajo y no hay mano de obra, ahora ya hay, y hemos contratado a guerrerenses que son muy trabajadores”, expresó.

Sin hablar de los montos de la inversión para la reconstrucción total de tres inmuebles, uno de forma parcial y uno en remodelación, expresó que “ha sido mucho esfuerzo, mucho trabajo y mucho dinero”, y agradeció a los comensales que han hecho de la marca una tradición en el puerto, y subrayó “ha implicado mucha inversión, pero vale la pena, porque Guerrero lo merece”.

Pablo Álvarez reclamó la falta de ayuda a las empresas por parte del gobierno federal, “desgraciadamente el gobierno quedó de apoyarnos, pero no nos apoyó. Quedaron de darnos un crédito de 350 mil pesos que no llegó. A lo mejor se les acabó el dinero o lo guardaron para las campañas”.

El fundador de la cadena que tiene sucursales en Cancún y otras ciudades de la República consideró que la recuperación y reconstrucción de la ciudad ha sido lenta, además de que el turismo que esperan no ha llegado, porque no todos los hoteles han reabierto, además de que hay mucha inseguridad y falta de servicios públicos.

“A nosotros como empresarios nos toca seguir trabajando y pagar nuestros impuestos”. Dijo que la ciudad podría estar reconstruida al 100 por ciento, en cuatro años más.

El empresario informó que preocupado por el derribo de árboles en la ciudad durante el huracán ha comenzado la campaña Sembrando con Amor para reforestar en una primera etapa el Club de Golf, y luego en el parque nacional El Veladero e invitó a la ciudadanía a participar acudiendo al Club de Golf y sumarse a las brigadas que ya han comenzado los trabajos de organización.

Texto y foto: Jacob Morales Antonio