La Coordinación de Protección Civil, Ecología y Servicios Públicos localizan diversas “incidencias o anomalías” a considerar antes de la temporada de lluvias en las colonias Ampliación 5 de Mayo y La Máquina
Acapulco, Guerrero, 13 de marzo de 2024. Viviendas cerca de cauces pluviales, colchones, láminas, cajas de cartón, quema de basura había ayer en los cauces de la colonia Ampliación 5 de Mayo y de la colonia La Máquina durante el recorrido que hizo la Coordinación de Protección Civil.
También escurrimientos de aguas residuales, debido a que algunas casas no están conectadas a los drenajes, lo que ocasiona mal olor y que el agua pluvial se contamine.
Los cauces pluviales recorridos se ubican en la zona suburbana de Acapulco, cerca del poblado de La Sabana. El primero fue el ubicado en la colonia 5 de Mayo, tiene una longitud de 1.29 kilómetros, una parte es cauce natural, luego está pavimentada la calle principal y en la parte baja nuevamente es cauce y está azolvado con plantas y residuos sólidos.
Cerca del cauce hay viviendas, en el interior del mismo hay dos pozos artesanales de donde los vecinos extraen agua, además hay unos lavaderos elaborados con llantas de carro y piedra, también había mangueras colocadas por vecinos para captar agua.
En algunas casas que están cerca del cauce construyeron tipo retajes con llantas y tierra, las viviendas son de concreto, algunas se encuentran en laderas de zonas de riesgo.
Durante el recorrido algunas personas se acercaron a los trabajadores de Protección Civil y les preguntaban el motivo del recorrido, hubo quienes dijeron que se continuara la pavimentación de la calle, y otros pensaron que se encontraban censando.
Los trabajadores de Protección Civil, Ecología y Servicios Públicos hicieron anotaciones de las condiciones en las que se encontraba el cauce pluvial, el cual requiere de limpieza y que se encaucen las aguas residuales que escurren de algunas viviendas.
Posteriormente se acudió al cauce pluvial que se ubica en la colonia La Máquina, tiene más de un kilómetro de largo, atraviesa esa colonia y la José López Portillo.
Ese está más sucio, había residuos sólidos, colchones, tinacos, láminas que se cayeron de las viviendas al impactar el huracán Otis en Acapulco la madrugada del 25 de octubre, pedazos de bocinas, una carriola de bebé, llantas y varias cajas de cartón de las despensas que dio el gobierno federal como apoyo para las personas damnificadas por el huracán.
Un vecino les dijo a los trabajadores de Protección Civil que era la primera vez que veían a las autoridades recorrer esa zona, comentaron que ellos tratan de tener limpio, pero sus demás vecinos no apoyan, incluso ha tenido problemas porque le dejan basura.
El encargado del Atlas de Riesgo de Acapulco y la Cartografía, Javier Aparicio García, quien tiene 22 años laborando en dicha dependencia, indicó que el recorrido es de evaluación de los cauces, presas gavión y desarenadores de la ciudad.
“La finalidad es de recabar toda información técnica de incidencias o anomalías que podamos detectar en los cauces, como pudieran ser las descargas de aguas residuales, árboles caídos y en este año tenemos mucha actividad en ese sentido, porque hay muchos taponamientos en diversas secciones de los cauces pluviales a raíz de la caída de árboles, tiraderos de basura, arrojo de escombro, dijo.
Indicó que año con año estas acciones se efectúan como medida preventiva y antes de la temporada de lluvias, y en este año se ha demorado mucho la revisión y se ha prolongado este programa debido a la gran cantidad de afectaciones que se han encontrado a raíz del huracán Otis, que impactó la madrugada del 25 de octubre.
Recordó que el tiempo destinado para el programa de revisión de los cauces pluviales y presas gavión es de un mes y en la actualidad “llevamos dos meses y aproximadamente un 60 por ciento del programa, todavía nos falta mucho por hacer”.
Aparicio García enfatizó que el trabajo de revisión es para recabar la información técnica necesaria para hacer un análisis y una vez que se tenga junto con los mapas de riesgo se va a distribuir a las dependencias para que ellos generen acciones que puedan llevar a la mitigación de las incidencias que se encuentren.
Texto y foto: Aurora Harrison
