Los jóvenes, en voz de su representantes, refrendan su exigencia de justicia y para la presentación con vida de los 43 desaparecidos en Iguala.
Chilpancingo, Guerrero, 16 de julio 2019. Alumnos de la Normal Rural de Ayotzinapa, de la generación 2015-2019, La resistencia contra el olvido 26 de septiembre, concluyeron su ciclo escolar en medio de un conflicto interno, refrendaron su exigencia para la presentación con vida de los 43 y recriminaron las acciones de la planta trabajadora, que pretende “desestabilizar” a la institución.
En la escuela, ubicada en Tixtla, se dieron cita familiares de los 84 jóvenes que concluyeron con el ciclo escolar, donde al acto de clausura no asistió ningún representante de la Secretaría de Educación Guerrero (SEG), tampoco de la planta trabajadora, que se mantiene en paro desde el 23 de mayo.
El acto se realizó este lunes, en la explanada de la Normal Rural, con 92 años de creación, donde estuvo presente el director de la escuela, Víctor Gerardo Díaz, y el subdirector administrativo, Gregorio Salgado Cortés.
También acudió el secretario del comité estudiantil, Alfredo Conde, y la señora Bertha Nava, madre del normalista Julio César Ramírez Nava, asesinado el 26 de septiembre de 2014 en Iguala, durante la noche en la que desaparecieron los 43 estudiantes.
El estudiante Aureliano Xomulco Villalba, a nombre de sus compañeros, recordó a los diez muertos que tiene la institución, y sostuvo que cuando egresen continuarán demandando justicia.
Asimismo, recordó a los 43 “hermanos” ausentes, a Julio César Mondragón Fontes, Daniel Solís Gallardo, Julio César Ramírez Nava, Jonathan Morales Hernández, Filemón Tacuba Castro, Eugenio Tamarit Huerta, Fredy Vázquez Crispín y Juan Manuel Huican Huican, “todos ellos nuestros hermanos, caídos defendiendo la Normal Rural de Ayotzinapa”.
El joven destacó que “se va la generación que mantuvo la resistencia, acompañando a las madres y padres de los 43 desaparecidos, luchando y marchando con ellos. No fue fácil, nos enfrentamos al régimen priista encabezado por Enrique Peña Nieto y reproducido por (el gobernador Héctor) Astudillo. Eso significó retenes en la salida de Tixtla, brutalidad policíaca en nuestras protestas, presión a nuestras manifestaciones, expulsión de nuestros compañeros, difamaciones para deslegitimar nuestra organización, representada por el comité estudiantil”.
Añadió que egresan con un “amargo sabor de boca”, con profesores contrarios a los principios de autogobierno estudiantil, que han mantenido viva Ayotzinapa durante 92 años.
Agregó que les consterna que difamen las decisiones tomadas en asamblea, señalando una supuesta corrupción por parte del director y de la estructura del comité, por lo que dijo que desmienten y reprueban las palabras de los docentes, quienes señalan que la dirección otorga “dádivas” a los estudiantes.
Xomulco Villalba sostuvo que el recurso que el comité ocupa se destinó a las necesidades del movimiento de los 43 durante cinco años, en que han mantenido viva la protesta por la presentación con vida de los desaparecidos y han sido constantes en sus prácticas.
“Nos vamos insatisfechos con los profesores de práctica, que no visitaron las primarias donde dábamos clases. Nos vamos decepcionados de que no tuvieran presencia en las comunidades, donde estábamos durante semanas, y únicamente se presentaban un día. Terminamos este proceso, sabiendo que los desestabilizadores de nuestra alma mater son quienes creíamos que podrían ser el ejemplo de la formación docente”, resaltó el egresado.
Por su parte, la señora Bertha Nava, madre de Julio César Ramírez, en su mensaje lloró y dijo que “es un gusto y una tristeza a la vez, no ver a mi hijo entre quienes este lunes egresan”.
Enfatizó: “Una disculpa, pero no vengo en representación de ellos, los 43. Vengo y represento a la mamá de Julio César Mondragón Fontes, a Daniel Solís Gallardo y mi hijo Julio César Ramírez Nava”, quienes fueron asesinados en 2014 en Iguala.
Bertha Nava externó que muchas personas dicen que ellos están muertos, “pero están muertos para quienes los olvidan (…) mis niños, mucha suerte y a seguir construyendo sus vidas”.
Manifestó que faltan 43 alumnos y que siempre deben de estar de pie, y pidió a los egresados seguir poniendo muy alto el nombre de Ayotzinapa, “¡Ayotzi vive y la lucha sigue, hasta encontrar a los 43. Vamos muchachos, ni un paso atrás!”.
El pasado 22 de mayo, el director Víctor Gerardo y el ex subdirector Rigoberto Barrera Urióstegui, tuvieron una discusión verbal en presencia de los docentes José Luis García Peralta y Néstor Encarnación.
Un día después, García Peralta y Néstor Encarnación fueron rapados por los estudiantes, en la explanada de la institución, y el director ordenó la suspensión de clases hasta nuevo aviso.
Texto: María Avilez Rodríguez / Foto: Jesús Eduardo Guerrero
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