Chilpancingo, Guerrero, 30 de marzo de 2024. Antes de que la población enardecida de Taxco intentara linchar a los presuntos secuestradores y asesinos de la niña Camila Gómez Ortega, la violencia en el municipio ya era noticia nacional debido a desapariciones masivas, asesinatos y ataques a choferes, funcionarios y periodistas.
La noche del domingo 19 de noviembre del 2023 un comando de hombres armados irrumpió en la comunidad de Huixtac, municipio de Taxco, entró a la casa de Marco Antonio Toledo Jaimes de 59 años, periodista y director del semanario Espectador de Taxco, se lo llevaron junto a su esposa Guadalupe Denova Flores de 56 años, y a su hijo Alberto Toledo Denova de 28.
El miércoles 22 de noviembre, otro grupo de hombres armados interceptó a dos Periodistas, Nayssa Arce Avilés y Alberto Sánchez Juárez, cerca del Zócalo de la ciudad, se los llevaron frente a sus tres pequeños hijos, quedando solos en la vía pública.
La denuncia fue hecha por los familiares de los cinco desaparecidos, entre ellos los tres periodistas, la noticia se difundió ampliamente, la organización internacional de defensa de periodistas y la libertad de expresión, Artículo 19 exigió al gobierno de Guerrero que coordinara acciones de inmediato con la Comisión Nacional de Búsqueda y el mecanismo federal de Protección para Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodista, para que contactaran con las familias de los desaparecidos y brindar medidas de acompañamiento y protección por su seguridad, y urgió a las instituciones de seguridad que los encontrara inmediatamente.
La Fiscalía del estado expuso en un comunicado que se estaba investigando la desaparición forzada, mediante la Fiscalía Especializada en Delitos Cometidos en Agravio de Periodistas y Defensores de Derechos Humanos se estaba encargando del caso.
El gobierno del Estado paso días sin pronunciarse al respecto, el viernes 24 fue el presidente Andrés Manuel López Obrador en en su conferencia mañanera, diciendo “lo estamos viendo”.
Esa misma noche fueron liberados Silvia Nayssa Arce Avilés y Alberto Sánchez Juárez Periodistas de Red Siete y Guadalupe Denova Flores esposa del periodista Toledo Jaimes.
Fue hasta la noche del 25 de noviembre cuando fue liberado Toledo Jaimes, recientemente había publicado una nota en la que denunció la aprobación del gobierno municipal, de un presupuesto otorgado para una obra en Taxco.
Su hijo siguió desaparecido tres días más, el martes 28 de noviembre fue dejado en libertad por sus captores.
Doce trabajadores de limpia desaparecidos
Taxco siguió viviendo un clima de inseguridad, el 28 de diciembre del año pasado se conoció que 12 trabajadores de limpia municipal desaparecieron, un comando armado se los llevó, dos de ellos eran funcionarios municipales Wendy Salas Gutiérrez, Directora de limpia del Ayuntamiento y Tomás Eladio Bustos Hernández, el administrador del basurero.
El 26 de diciembre hombres armados entraron al basurero y se llevaron a las 12 personas, la familia de varios prefirió no denunciar por miedo a represalias de los captores, aguardaron en silencio y con temor.
A los que se atrevieron a acudir a la Fiscalía General del Estado (FGE) al día siguiente, se les negó la ayuda porque no habían transcurrido 24 horas para poder ser considerados desaparecidos, a pesar de contar con el testimonio que habían sido privados de su libertad por hombres armados.
La Fiscalía informó de la desaparición de los trabajadores dos días después porque la noticia acaparó la atención en noticieros y redes.
El 2 de enero el presidente municipal de Taxco, Mario Figueroa Mundo señaló directamente a los periodistas de causar la violencia en su municipio, “estos pseudoperiodistas son los autores del secuestro al relleno sanitario y de unos maestros”, dijo en un noticiero de Radio Fórmula, al ser cuestionado por los 12 trabajadores de su administración desaparecidos y al vincular a su administración con un grupo delictivo.
El 8 de enero fueron encontrados cuatro de los 12 trabajadores, la directora de limpia Wendy Salas hasta ese día no contaba con ficha de búsqueda. 12 días después la violencia alcanzaría un escenario poco visto en la ciudad turística de Taxco.
Para el transporte, las escuelas y cierran los negocios
El sábado 20 de enero el silencio aconteció a las balas, la avenida Juárez, justo tras el exconvento fue el lugar del ataque, el saldo un chofer de taxi muerto y una pasajera herida, en el Pueblo Mágico de la Plata, su muerte fue el anuncio de uno de los momentos más álgidos de la pugna entre dos bandas delictivas que pelean el control de Taxco, Los Tlacos y La Familia Michoacana, ésta última que había predominado por años en esa ciudad de la región Norte de Guerrero.
Para el lunes 23 los transportistas pararon su labor, como consecuencia las escuelas suspendieron sus actividades, y los comercios cerraron antes de las ocho de la noche.
Videos de hombres armados circulando por las estrechas calles de Taxco a plena luz del día comenzaron a circular en redes, retando un bando a otro a “salirse a dar el topón”.
Mas de una semana sin transporte y ataques a choferes ocasionaron una convulsión en la economía local de los taxqueños, el presidente municipal se encontraba en la Feria Internacional del Turismo en Madrid, España, aunque en un primer momento lo negó rotundamente, esto ocasiono que varios medios nacionales acudieran diario al Palacio Municipal buscando una entrevista, para saber lo que acontecía en el municipio que Figueroa Mundo gobierna, pero nunca lo encontraron.
Para el 25 de enero el alcalde dijo que eran “bachecitos” por los que atravesaba Taxco.
Otro suceso fue el 15 de febrero cuando dos hombres a bordo de una motocicleta accionaron sus armas contra la camioneta Suburban donde viajaba el alcalde, el saldo fue de un escolta del funcionario herido y uno de los presuntos atacantes muerto.
La Secretaría de Seguridad Publica del estado, entonces al mando del general brigadier Rolando Solano Rivera, negó el ataque y dijo se trató de un hecho fortuito, porque los atacantes venían de asaltar una pollería y en el trayecto de huida se encontraron con la camioneta del funcionario municipal.
Texto: David Juárez/ Foto: Jessica Torres Barrera
