17 junio,2021 9:59 am

Recuperan la trayectoria de Amparo Ochoa en el documental “Se me reventó el barzón”

El filme está previsto para estrenarse hacia el cumpleaños 75 de la cantante, el 29 de septiembre. El proceso de la película duró cuatro años, en la búsqueda de material de archivo y entrevistas a sus cercanos. También preparan disco inédito de la sinaloense, informa el director Modesto López

Ciudad de México, 17 de junio de 2021. Aunque se llamaba Amparo Ochoa (1946-1994), desde su juventud, en el pueblo azucarero de Costa Rica, en Sinaloa, la apodaban “Vida”, por su actitud siempre de lucha y firmeza.

“Era una mezcla de ternura y rebeldía”, define Modesto López, cineasta y fundador de Ediciones Pentagrama, quien recupera los pasos de la cantora en el documental Se me reventó el barzón.

El filme está previsto para estrenarse hacia el cumpleaños 75 de Ochoa, el 29 de septiembre, tras un proceso de cuatro años en la búsqueda de material de archivo, entrevistas a su cercanos y procuración de fondos.

Las pesquisas se han visto recompensadas al haber logrado ubicar el registro visual de la triunfal aparición de la sinaloense en el recital Sin fronteras, organizado por la cantante argentina Mercedes Sosa en 1988 el estadio Luna Park de Buenos Aires ante 10 mil personas.

López había participado en aquel festival y, por tanto, sabía de su existencia, pero los herederos de Sosa daban por perdidos los materiales.

Pero pudo más la perseverancia del cineasta y, al cabo de dos años y medio, en una trama casi detectivesca, logró dar con los videos. Una persona le confió que los había puesto a resguardo bajo un nombre falso en cierto archivo, cuando ocurrió el cambio de poderes en Argentina al comienzo de la presidencia de Mauricio Macri.

Ese momento apoteósico de Ochoa sirve de cierre del documental, cantando El otro México, de Los Tigres del Norte: Mientras los ricos / se van para el extranjero / para esconder su dinero / y por Europa pasear, / los mexicanos / que venimos de mojados / casi todo se lo enviamos / a los que quedan allá.

“Y entonces se viene abajo el Luna Park, y la gente de pie, aplaudiéndole; es muy emocionante”, dice López, quien entrevistó a la cantautora Teresa Parodi y recuperó el testimonio de Sosa, elogiando a la mexicana.

El realizador encontró también en viejas cintas, unos 40 casetes de entrevistas y grabaciones particulares, testimonios donde Ochoa habla del compromiso del artista con la sociedad, sus conceptos sobre la música, así como de la fraternidad y amistad.

“Me fui emocionando mucho. Era como volver a conversar con Amparo”, dice López, a quien le unía a ella una gran amistad desde principios de los 80, al calor de la campaña de solidaridad con El Salvador. Una amistad extensiva a sus respectivas familias.

Más materiales logró ubicar tanto en los propios archivos de Pentagrama, fundado hace 40 años, como de la familia y amigos de la cantante, así como cientos de fotografías que han sido útiles.

En el documental, Ochoa habla sobre Ochoa.

“Fui tomando fragmentos de sus conversaciones y de su forma de ser y cómo concebía el mundo a través de su voz”, dice López. “Yo decía: ‘¿Cómo puedo explicar un poco lo que Amparo es? Necesito la voz de ella, que ella me lo diga’. Y fui armando el rompecabezas, extrayendo lo más sensible y concreto de todo eso”.

López también se encargó de recabar entrevistas entre sus cercanos, como el testimonio del fallecido Óscar Chávez, para quien la muerte de Ochoa, el 8 de febrero de 1994 a causa de un cáncer de estómago, fue como perder a su hermana del alma.

Uno de los primeros lugares donde actuó al llegar a la Ciudad de México, en 1969, fue el Café Colón, donde el Caifán Mayor hacía su cabaret político.

“Se querían mucho. Óscar sufrió mucho cuando ocurrió lo que ocurrió con Amparo”, asegura López.

Ella prodigaba una gran admiración por Chávez, y en buena medida, el trabajo de investigación musical que hizo fue bajo su influencia.

“Una de las virtudes era la calidad de selección que ella tenía en su repertorio. No sólo se quedó con su formación de la música tradicional, que aprendió muy bien, cosas bellísimas de su padre (Don Cheno), de su familia, de la gente que admiraba, como Lola Beltrán o Agustín Lara, sino que además descubrió compositores importantes de este País que nunca habían sido grabados”.

En su repertorio hay éxitos como La calaca, La maldición de La Malinche, Jacinto Cenobio, Adelita, Bola suriana de la muerte de Emiliano Zapata y El barzón, de la que López toma título para el documental.

“Canto lo que quieran, menos basura”, decía, palabras que evoca el director en el filme.

A lo largo de su trayectoria, Ochoa difundió corridos de la Revolución Mexicana, trova yucateca, nueva canción y folclore latinoamericano, así como cantó en lenguas originarias y alternó con voces como Silvio Rodríguez y Chava Flores, además de Sosa.

Una mujer siempre comprometida con las luchas sociales y el feminismo.

“Ella fue una feminista permanente, una luchadora”, advierte López. “Y, aunque su situación no fuera holgada, se hacía presente de manera solidaria en los actos que llamaban a solidarizarse con las luchas de la gente”.

El documental pretende ser a la vez un homenaje a todos quienes, como ella, estuvieron en el andar del canto popular. “Era traerlos a la memoria y que estén presentes en nuestras vidas cotidianas”.

López destaca el respaldo de la familia para hacer posible el trabajo: sus hijos María Inés e Isaac, su hermano Norberto y su sobrina Susana Vidal.

El documental es el número 13 que dirige López, y obtuvo apoyo Procine de la Ciudad de México para la postproducción. Se prevé que se estrene también en países como Holanda, Argentina, Chile, Uruguay, España y Estados Unidos.

“No sé si (si se trata de) pagar una deuda, como no nos debíamos nada más que el amor y el afecto. Fue más que nada saber que merece estar presente en la memoria de nuestro pueblo y nuestra gente”.

..Y hallan temas inéditos

Durante la investigación para el documental Se me reventó el barzón, Modesto López logró recuperar una canción inédita de José de Molina para Amparo Ochoa, que ella presentó como Le voy cantando a la vida, aunque el compositor la tituló De la mano del viento.

Le voy cantando a la vida, / le voy cantando al amor, / sólo cuando es necesario; / también le canto a la flor. / Me inspira más el sudor, / del portador de quehaceres, / las manos del labrador, / en la rosa y los laureles.

Encontró la canción en una cinta casera y fue incluida en el documental.

López, fundador de Discos Pentagrama, conserva grabaciones que aún no han sido editadas y que podrían dar pie a la publicación de un par de discos, en ocasión del documental.

“Quizá es el momento ahora, cuando salga el documental, para poder difundir esos temas”, dice.

Se trata de grabaciones en vivo que podrían aparecer bajo el título de Inéditas de Amparo Ochoa.

Con Pentagrama, además de publicar una biografía escrita por Julio Bernal, llamada también Se me reventó el barzón, la cantora sinaloense grabó ocho discos, y grabó otros tantos con Discos Pueblo, fundado por José Ávila, de Los Folkloristas, que también participa en el documental.

Texto: Erika P. Bucio / Agencia Reforma