26 abril,2018 7:44 am

Remarca investigador importancia de Chilapa durante la Revolución

Texto y foto: Luis Daniel Nava
Chilapa, 26 de abril de 2018. La plaza de Chilapa fue estratégica para la toma de Chilpancingo en la Revolución, afirmó el investigador Francisco Herrera Cipriano.
La fuerza del ejército insurrecto vino de la población campesina y no participaron los habitantes de la cabecera municipal de Chilapa, porque en ese tiempo estaban dominadas por las élites políticas y económicas, agregó.
Ayer por la mañana se llevó a cabo el conversatorio encabezado por el investigador del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), Francisco Herrera, titulado La presencia de Zapata en Chilapa y la toma de Chilpancingo.
El conversatorio fue organizado por la maestra Rosalba Díaz Vázquez, de la Escuela Superior de Antropología Social de la Universidad Autónoma de Guerrero, quien invitó a alumnos de esa institución.
La exposición duró más de una hora y media, con la explicación de los antecedentes, el contexto y la estrategia militar de Emiliano Zapata para tomar el sur del país y posteriormente el gobierno mexicano.
Chilapa ha sido una ciudad muy importante, lo era en la época de la Revolución, lo era por los recursos, suministros, económicos, la cercanía hacia Chilpancingo, ocupar esta plaza implicaba ciertas ventajas para cercarse al objetivo principal que era la capital del estado, indicó el especialista.
Herrera Cipriano, consultado al final, dijo que en Guerrero, Emiliano Zapata tenía mucha gente a su favor.
“En el distrito de Álvarez, con cabecera en Chilapa estaba el general Julio Astudillo Gómez, de Atenango del Río; más cerca, el coronel Juan Pablo Cuchillo, de Zitlala, y gente de Tlapa como el general Crispín Galeana y otros generales y jefes de diferentes partes del estado que se fueron concentrando en Chilapa y Tixtla, para organizar la toma de Chilpancingo”.
A pregunta directa, dijo que es difícil cuantificar cuánta gente de Chilapa participó en la toma de Chilpancingo.
“Es muy difícil, la cabecera fue una ciudad muy dominada por las élites económicas y políticas de aquella época, simpatizantes de la cabecera no había, pero sí de los pueblos pertenecientes al municipio de Chilapa y de las demás cabeceras municipales, campesinos.
“Es difícil cuantificar, aunque por el lado donde atacó Zapata, Tixtla, Petaquillas y Amojileca, se calcula un número de más de mil campesinos de tropa”.
Agregó que el ahora Mesón de Zapata, en la época de Porfirio Díaz y de la Revolución, fue un hotel, “un hotelito que se llamaba hotel Álvarez, no había carreteras, era el principal lugar de hospedaje del comercio de la arriería, de la gente que venía a comprar y vender, tenían hospedaje para las personas y también alojamiento para los animales, caballos, mulas, machos”.