Acapulco, Guerrero, 15 de febrero de 2023. Fechas conmemorativas como el Día de San Valentín revivieron la economía de los establecimientos como restaurantes y yates, de acapulqueños que salen a convivir en familia o parejas.
Este martes, espacios como el Zócalo de la ciudad, el Malecón, el Parque de la Reina, el Parque Papagayo, y los centros comerciales lucieron llenos de enamorados que portaban globos, rosas y peluches.
En algunos establecimientos como el restaurante Mi Piaci tenían lista de espera a la hora de la comida, sus 35 mesas estaban llenas de familia y parejas que salieron a festejar el Día de San Valentín.
El encargado del establecimiento, Rubén Castillo, dijo que la mayor parte de las personas que estaban eran acapulqueños, y destacó que después de la medidas restrictivas por Covid-19 la gente de la ciudad comenzó a salir como antes de la pandemia.
Indicó que en un martes habitual el cupo es de un 60 por ciento, pero por ser un día especial el restaurante de comida italiana lució lleno. Dijo que el movimiento de comensales genera una cadena de derrama económica para quienes trabajan en el restaurante, los proveedores, y también para los motociclistas que entregan servicios a domicilio por aplicación.
El yate Acarey también ofreció un servicio muy peculiar este martes en el barco de tres niveles había música romántica para las parejas, lo que no solo atrajo a los porteños, sino a turistas de Perú y Polonia que subieron a la embarcación para dar un recorrido por la bahía.
El Acarey ofreció tres servicios de recorrido este día de los enamorados: a las 4:30 de la tarde, 7 de la noche y un recorrido especial a las 10 de la noche, informó el encargado de ventas Candido Reyes Mosso.
La embarcación fue adornada con globos de corazón y otras figuras alusivas al día, “en este día, y fecha como esta, lo que movemos es gente local, viene uno que otro turista. Afortunadamente salen a divertirse”.
El trabajador dijo que cada persona paga 460 pesos por el recorrido por la bahía que incluye las bebidas en la embarcación, que tiene una capacidad de 400 personas.
Luego del evento de bodas colectivas, el restaurante Copacabana Club comenzó a llenarse, y la música costeña y cumbias llamaban a todos a bailar.
Uno de los encargados indicó que para la noche el lugar con capacidad para 300 personas estaría lleno porque había mucho entusiasmo y la gente seguía llegando, incluso lo comparó con un jueves pozolero, que es el día que el lugar se llena.
En el recorrido se observó que la gran mayoría de restaurantes desde playa Suave hasta Papagayo abrieron este martes, día en que regularmente están cerrados.
Texto: Jacob Morales Antonio / Foto: Carlos Carbajal
