Ciudad de México, 1 de octubre de 2023. Cuando tenía 10 años, Diego Roel Chapa vio cómo una persona con discapacidad batallaba para hacer actividades que para muchos son sencillas.
Aquella escena le sembró el deseo de inventar algo que facilitara la vida de quienes tienen una condición de este tipo.
Así, mientras muchos de sus amigos pasaban las tardes jugando o paseando, él dedicó gran parte de su infancia a aprender robótica -disciplina que le apasiona desde muy pequeño- y en su adolescencia, se enfocó en hacer realidad su sueño.
Con 22 años, cuenta emocionado que “Ara”, el dispositivo que inventó, ayuda a que personas ciegas o con discapacidad visual tengan una vida más autónoma y segura.
“Es un arnés en el pecho, te lo pones como una playera”, explica el regio.
“Tiene ocho sensores diferentes que están viendo todo lo que está pasando en el entorno. Analiza la información y cuando encuentra que hay un posible riesgo, le notifica al usuario de posibles golpes u obstáculos”.
Este dispositivo, manufacturado en México y por mexicanos, fue lanzado al mercado en septiembre del 2022 por Strap Tech, empresa creada y dirigida por el joven emprendedor, tras más de dos años de trabajo.
Se vende actualmente en 17 países, entre ellos Estados Unidos, Canadá, México, Honduras, Alemania, Inglaterra, India, Italia, Francia y Australia.
La idea de crear un dispositivo para personas con discapacidad visual surgió cuando Diego se dio cuenta que no existen tantos desarrollos tecnológicos para esta población, formada por más de mil 300 millones de personas en el mundo.
“El bastón blanco que conocemos para personas ciegas se inventó en 1921, no se ha actualizado y ya no sirve para el mundo de hoy”, cuenta el joven, quien debido a su trabajo se la pasa viajando entre Guadalajara y Texas, dos ciudades donde hoy tiene oficinas su empresa.
A través de inteligencia artificial, “Ara” detecta obstáculos como escaleras, baches, personas y muebles; y avisa con anticipación al usuario por medio de vibraciones.
Según la posición donde se encuentre el obstáculo en el entorno, manda la vibración en determinada parte del cuerpo.
“Por ejemplo, si te vibra en los hombros, significa que tienes algo en la cabeza”, detalla Diego.
“Si te vibra en el pecho, significa que tienes algo grande como una pared, como una persona, una columna o una ventana; y si te vibra en las costillas, significa que tienes algo en el piso como escaleras, baches, bordos, albercas”.
Entre los usuarios, cuenta, hay un niño que pudo volver a la escuela luego de haberla dejado porque batallaba para trasladarse dentro del plantel y el caso de un hombre que juega futbol con ayuda del dispositivo.
ROMPER ESQUEMAS
Diego cursaba el segundo año en la PrepaTec Eugenio Garza Sada, cuando recibió una pregunta que cambiaría el rumbo de su vida.
Para entonces, ya llevaba algunos meses enfocado en el desarrollo del dispositivo que quería crear y dos inversionistas se interesaron en impulsar su emprendimiento.
“Queremos invertir en la empresa”, le dijeron, “pero tienes una decisión que hacer: O estudias o trabajas”.
Entre risas, el joven regio cuenta que no fue una decisión tan difícil: dejó inconclusa la preparatoria y se puso a crear “Ara”.
De haber elegido el camino tradicional del sistema educativo, hoy estaría a un año de graduarse de la universidad.
“Muchos pensaban en mí como loco, otros como irrealista, otros como el niño que está soñando y jugando, y que al rato se le pasa”, se acuerda el joven, quien se ha seguido formando de manera autodidacta y estudió una maestría en Negocios y Tecnología en Collective Academy.
Diego comenzó a destacar desde que tenía 10 años, cuando sus capacidades en la mecatrónica lo llevaron a convertirse en profesor de otros niños y adolescentes. Su historia se publicó en EL NORTE en 2012.
En los años siguientes representó a México en competencias de robótica internacionales y a los 16 años empezó a desarrollar prototipos del dispositivo que quería crear.
En 2018, inversionistas lo ayudaron a formalizar su emprendimiento y Diego se mudó a Guadalajara, debido a su oferta en manufactura electrónica.
La empresa de Diego, Strap Tech, está constituida por más de 20 especialistas en diferentes áreas. En 2022, formaron parte de los ganadores de SXSW Innovation Awards, que reconoce a los desarrollos tecnológicos más creativos.
Su próxima meta es hacer alianzas con organizaciones para que personas de bajos recursos puedan usar “Ara”, que en su sitio de internet puede adquirirse por mil 300 dólares (unos 22 mil pesos).
“Mucha gente piensa que perdí etapas de mi vida por hacer esto, pero he ganado muchísimo”, reflexiona Diego.
“Aunque es una vida muy exigente y de muchas responsabilidades, que tal vez no debería lidiar una persona de 21 o 22 años, han explotado mi vida en su máxima expresión en todos los sentidos, responsabilidad y la realización de poder crear algo que inventé de niño”.
TABLA
¿Qué es “Ara”?
* Es un arnés que se coloca en el pecho, como una playera.
* Tiene ocho sensores diferentes que detectan el entorno.
* El dispositivo analiza la información.
* Cuando prevé un posible riesgo, notifica al usuario de posibles golpes u obstáculos.
Texto y foto: Agencia Reforma
