5 enero,2018 8:40 am

Riesgos al proceso electoral

Jorge Camacho Peñaloza.

No hay mayor cinismo que el de aquellos que reclaman para sí lo que nunca han dado.

Jorge González Moore.

Arrancamos el 2018 con todo el ánimo de que nos vaya bien a todos, al país, a nuestro estado, nuestras familias y a cada uno de nosotros, tenemos miles de proyectos y planes para crecer y desarrollarnos como personas y sociedad, hay esperanza y convicción de hacer cosas buenas y cambios para mejorar; sin embargo, entramos al año nuevo con un proceso electoral en el que se van a renovar la Presidencia de la República, alcaldías, diputados federales y locales, y senadores, proceso que ineluctablemente va a incidir en todos esos proyectos y planes de vida, de ahí que resulta necesario involucrarnos como ciudadanos.

Electoralmente el año viejo no cerró muy bien que digamos, dos homicidios en Costa Grande y la violencia en Acapulco y Chilpancingo, presagian la tensión con que se desarrollará el proceso electoral en torno a los aspirantes y candidatos; así también cerró con el regreso sorpresivo de Ángel Aguirre Rivero a la política, presentándose como el virtual candidato de la coalición Por México al Frente del PRD, PAN y Movimiento Ciudadano, lo que viene a representar una cachetada a los padres de los 43 normalistas de Ayotzinapa, quienes no se hicieron esperar para manifestar su válida y legítima indignación al ex gobernador, boicoteando el arranque de su precampaña en Ayutla, el pasado 27 de diciembre.

Aunque aún no se conocen las líneas de investigación, ni los posibles móviles, los homicidios del presidente municipal de Petatlán y del aspirante militante del PRI de Atoyac, estos hechos se ubican en el contexto político enrareciendo el proceso electoral. Los cargos en juego mueven muchos intereses, más allá de los propiamente políticos, tanto que se han convertido en objetivos muy codiciados, no sólo por los militantes y dirigentes de los partidos, quienes tratan de obtenerlos a toda costa, sino por representantes de otros sectores sociales hasta incluir al mismo crimen organizado, por lo que no se descarta que se registren más agresiones contra candidatos o aspirantes, de ahí que el propio presidente del Instituto Electoral y de Participación Ciudadana (IEPC) crea importante que las autoridades de seguridad garanticen un proceso electoral en paz.

En ese mismo tenor se presentó al final del año el reclamo de los padres y familiares de los 43 normalistas desaparecidos, contra la pretensión de Ángel Aguirre de participar en el proceso electoral como candidato por el 08 Distrito electoral federal. En Guerrero se conoce muy bien el grado de responsabilidad con que gobernó Ángel Aguirre el estado, lo que dio como resultado dos normalistas de Ayotzinapa asesinados en el Parador del Marqués, en diciembre de 2011, cuando su jefe operativo de la policía estatal dio a conocer públicamente que le había instruido limpiar la carretera; así como los cientos de damnificados y decenas de muertos por no haber alertado a tiempo sobre la llegada de las tormentas Ingrid y Manuel en septiembre de 2013 y la abominable desaparición de los 43 estudiantes de Ayotzinapa en Iguala, en septiembre de 2014, hechos en los que hay responsabilidad, si no legal sí política, de Ángel Aguirre; sin embargo, eso no le importó a Ricardo Anaya y a los dirigentes del PRD, a quienes más que la justicia lo que les interesa es la obtención de votos a toda costa, utilizando la supuesta popularidad de Aguirre en Costa Chica.

De tal suerte que no sólo la violencia política o del crimen organizado, sino la irresponsabilidad y el cinismo de políticos, como Ángel Aguirre y Ricardo Anaya, de la coalición Por México al Frente están poniendo en riesgo la tranquilidad del proceso electoral retando a la herida abierta, al clamor de justicia que se ha expresado en el mundo y por las familias de los 43 y estudiantes de Ayotzinapa, pero la ambición tanto de uno como de otro ya es bien conocida, sólo cabría esperar que la ciudadanía guerrerense no se vuelva a equivocar votando por este tipo de candidatos.

Vuela vuela palomita y ve y dile: A los Santos Reyes que se den una vueltecita por Guerrero, para que desenmascaren a tantos políticos y aspirantes que les están usurpando sus funciones.