20 abril,2022 6:39 am

Rusia ofrece evacuar a civiles en Mariúpol si las fuerzas ucranianas deponen las armas

Europa Press

Madrid

El jefe del Centro de Control de la Defensa Nacional de Rusia, el coronel general Mijail Mizintsev, ha vuelto a ofrecer a las fuerzas ucranianas deponer las armas y retirarse de la planta metalúrgica Azovstal para evacuar civiles en la ciudad ucraniana de Mariúpol.
“Las Fuerzas Armadas rusas, guiadas por principios puramente humanos, ofrecen nuevamente a los militantes batallones nacionalistas y mercenarios extranjeros a partir de las 14.00 horas (hora de Moscú) del 20 de abril de 2022, el cese de las hostilidades y deponer las armas”, ha dicho, según ha informado la agencia rusa de noticias TASS.
Las unidades de la Fuerza Armada rusa y la formación de la República Popular de Donetsk, a lo largo de todo el perímetro de Azovstal, establecerán una “distancia segura” y un izamiento de banderas: del lado ruso, rojo, y del lado ucraniano, blanco.
El cese de las hostilidades permitiría establecer más corredores humanitarios en la zona. En la jornada de ayer, Rusia precisó que, durante la activación del alto el fuego para evacuar a civiles, los militares ucranianos no abandonaron la planta.
Pese a ello, tal y como ha recogido la agencia de noticias Interfax, la televisión estatal rusa informó de que 120 personas abandonaron sus hogares en los alrededores de Azovstal aprovechando estos corredores humanitarios.
Por otro lado, el máximo responsable de la Administración Estatal Regional de Donetsk, Pavlo Kirilenko, ha informado de una explosión en la planta, sin precisar víctimas o el origen de la explosión, según ha recogido la ucraniana Cadena 24.
Anteriormente, el Comandante Adjunto del Batallón Azov –un grupo armado neonazi integrado en las fuerzas de seguridad ucranianas–, Sviatoslav Kalyna Palamar, ha señalado que la planta está destruida “casi por completo”, según ha dicho a la emisora ucranianan Radio Svoboda.
Las fuerzas de la autoproclamada República Popular de Donetsk han anunciado ayer el inicio de una ofensiva contra esta acería después de que Rusia haya ofrecido, en un primer momento, a “batallones nacionalistas” y “mercenarios” que entreguen las armas sin combatir.
El portavoz de las milicias de Donetsk, Eduard Basurin, ha indicado que “los grupos de asalto seleccionados para asaltar este lugar han empezado su trabajo” y ha destacado que “Rusia está ayudando mucho en esto con aviación y artillería”, según ha informado la agencia rusa de noticias TASS.
El Ayuntamiento de Mariúpol ha informado en su cuenta oficial de Facebook de que las tropas rusas están atacando la planta con bombas pesadas y que habría al menos mil civiles dentro de los refugios subterráneos de la planta metalúrgica, en su mayoría mujeres con niños y ancianos.
Sin embargo, el gobierno de Rusia ha anunciado ayer la apertura de tres corredores humanitarios para evacuar una acería de la localidad ucraniana de Mariúpol, Azovstal, horas después del inicio de una ofensiva por parte de las milicias de la autoproclamada República Popular de Donetsk contra la central, uno de los últimos focos de resistencia en la localidad.
El Ministerio de Defensa ruso ha señalado en un comunicado publicado en su página web que la decisión ha sido adoptada “ante la situación catastrófica” en la acería y “siguiendo principios puramente humanitarios”. Así, ha destacado que los corredores humanitarios buscan “la retirada de militares ucranianos y milicianos de formaciones nacionalistas que entregaron sus armas de forma voluntaria”.
El presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, ha afirmado a última hora de ayer que la situación en Mariúpol, ciudad portuaria asediada por las tropas rusas, continúa siendo “la más grave posible”, y que no han recibido una respuesta por parte de Rusia para el intercambio de civiles.
“El ejército ruso está bloqueando cualquier esfuerzo para organizar corredores humanitarios y salvar a nuestra gente. Se desconoce el destino de al menos decenas de miles de residentes de Mariúpol que fueron reubicados previamente en territorio controlado por Rusia”, ha sostenido en su discurso diario.
Además, ha subrayado que la intensidad del fuego de las tropas rusas en la dirección de Járkov, en la región del Donbás y en la región de Dnipropetrovsk “ha aumentado considerablemente” cuando llega a su fin “el día 55 de la Defensa de Ucrania contra la agresión a gran escala” del país.
El comandante, Sergei Volyna, de la 36 Brigada de Marines del ejército de Ucrania ha pedido a los líderes mundiales extraditar a las fuerzas armadas, a los más de 500 heridos y cientos de civiles ucranianos de Mariúpol porque la situación es difícil en el territorio de Azovstal.
“Este es nuestro llamamiento al mundo, puede ser nuestro último llamamiento. Puede que sólo nos queden unos días u horas. La agrupación enemiga es decenas de veces más grande que nosotros, tienen dominio en el aire, en la artillería, en los grupos que operan en tierra , equipos y tanques”, ha denunciado Volyna en un vídeo publicado en su cuenta de Facebook, según ha recogido la agencia de noticias ucraniana UNIAN.
Las Fuerzas Armadas de Ucrania han afirmado ayer que las fuerzas de Rusia están intentando hacerse con “el control total” de las regiones de Donetsk y Lugansk, en el este del país.
“El enemigo ruso está intentando continuar las operaciones ofensivas en la Zona Operacional Este para establecer el control total del territorio de las regiones de Donetsk y Lugansk, así como mantener un corredor terrestre con la Crimea ocupada temporalmente”, ha dicho el Estado Mayor del ejército ucraniano.
Al menos tres personas han muerto y otras cinco han resultado heridas, entre ellos un niño, en un bombardeo en distintas localidades de la región de Donetsk, según ha informado el jefe de la administración militar regional de Donetsk, Pavlo Kirilenko.
Zelenski, ha presentado ayer ante el Parlamento ucraniano un proyecto de ley para extender la ley marcial en el país, impuesta el pasado 24 de febrero por la invasión rusa.
La extensión actual estará en vigor hasta el 25 de abril. No obstante, el texto del borrador del proyecto de ley aún no se ha hecho público, según ha recogido la agencia de noticias ucraniana Ukrinform.
Por su parte, el secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, ha pedido a las autoridades rusas y ucranianas un alto el fuego de cuatro días en Ucrania con motivo de la Pascua ortodoxa, que este año se celebra “bajo la nube de una guerra” que supone una “negación total” de los mensajes tradicionalmente a estas fechas.
La Alta Comisionada Adjunta para los Refugiados, Kelly Clements, ha pedido a los miembros del Consejo de Seguridad de la ONU que dejen de lado sus diferencias y que encuentren una manera de poner fin a una “guerra horrible y sin sentido” que ha dejado ya casi 5 millones de refugiados en Ucrania.
Clements ha señalado, desde Hungría, un país al que han huido casi medio millón de ucranianos, que “casi 5 millones de refugiados ucranianos se han visto obligados a abandonar su país, además de los más de 7 millones que siguen desplazados dentro de Ucrania”.
Así, ha dicho ante el Consejo de Seguridad, según recoge un comunicado, que Naciones Unidas estima que más de 13 millones se encuentran en las áreas más afectadas, muchos incapaces de moverse y difíciles de alcanzar con ayuda de manera segura.

La UE y la OTAN refuerzan su apoyo a Ucrania

Los máximos representantes de la Alianza Atlántica y la Unión Europea han mantenido ayer una conversación telefónica en la que han reiterado su apoyo a Ucrania en el marco de la invasión rusa, y han apuntado a la posibilidad de imponer más sanciones si no cesa su agresión.
La llamada, organizada por el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha servido para que las potencias internacionales trasladen su enésima condena a lo acontecido en Ucrania y la adopción de sanciones para hacer que Rusia “rinda cuentas” por su “invasión no provocada e injustificada”, según un comunicado de la Casa Blanca.
Por su parte, el primer ministro británico, Boris Johnson, quien también ha participado en la conversación, ha puesto al día a sus aliados sobre su reciente visita a la capital de Ucrania, Kiev, y ha instado a las potencias internacionales a que refuercen su apoyo armamentístico al ejército ucraniano ante la nueva ofensiva rusa en el este.

Ucrania y Rusia llevan a cabo un nuevo intercambio de prisioneros

Ucrania y Rusia han llevado a cabo ayer un nuevo intercambio de prisioneros, el quinto desde que comenzó la invasión el 24 de febrero, según ha informado la vice primera ministra ucraniana, Irina Vereshchuk.
A través de Telegram, ha detallado que, en total, han regresado a Ucrania 76 personas. Se trata de 60 militares, diez oficiales incluidos, y 16 civiles.
El último intercambio de prisioneros tuvo lugar hace cinco días, cuando 22 militares y ocho civiles regresaron a suelo ucraniano. Se produjo por orden de Zelenski, que hace unos días también propuso a las autoridades rusas intercambiar al líder del partido ucraniano prorruso Plataforma Opositora por la Vida, Viktor Medvedchuk, por niños prisioneros de guerra en cautiverio ruso.

EU denuncia la existencia de “campos de filtración” rusos

La Embajada de Estados Unidos en Ucrania ha denunciado la existencia de “campos de filtración” rusos, argumento con el que ha comparado los acontecimientos de hoy día en el este de Europa con lo acontecido en Chechenia entre la década de los 90 y los primeros años del siglo XXI.
“El libro de jugadas de (el presidente ruso, Vladimir) Putin no cambia. En los campos de filtración de Chechenia, Rusia golpeó, torturó y ejecutó a civiles. Apoyamos a Ucrania”, ha expresado la Embajada en su perfil de Twitter.
En dicha publicación han asegurado tener constancia de la existencia de estos campos de filtración en base a informaciones de las autoridades de Mariúpol, que denuncian que las tropas rusas retienen a al menos 20 mil residentes en uno de estos campos.
De acuerdo con las informaciones de la legación estadunidense, el campo de filtración estaría ubicado en el suroeste de la ciudad portuaria. Del mismo modo, entre 5 mil y 7 mil residentes están detenidos en las inmediaciones de Bezimenne y se teme que sean “deportados” a Rusia.