26 marzo,2022 9:50 am

Rusia y Ucrania podrían estar cometiendo “crímenes de guerra”, advierten en Ginebra

La Misión de Observación de los Derechos Humanos de la ONU resalta que ya son mil 81 civiles muertos, incluidos 135 niños y al menos mil 650 heridos –sin contar datos de áreas de combate, como Mariúpol. El Kremlin señala que mil 350 militares fallecieron desde la invasión. Ucrania denuncia que el ejército ruso ha tomado como rehenes a los alcaldes de 14 ciudades

Madrid, España, 26 de marzo de 2022. La Misión de Observación de los Derechos Humanos en Ucrania ha alertado ayer de que las dos partes involucradas en el conflicto de Ucrania podrían estar cometiendo crímenes de guerra, remarcando que han constatado “violaciones graves a las garantías fundamentales” por parte de las fuerzas rusas y ucranianas.

En una rueda de prensa desde Ginebra, la líder de la misión, Matilda Bogner, ha resaltado que más de mil civiles han muerto y al menos mil 650 han resultado heridos –cifras incompletas porque la ONU no cuenta con datos completos de áreas de combate, como Mariúpol– y ha afirmado que la magnitud de las bajas y los daños de bienes civiles sugieren que se han violado los principios de distinción y proporcionalidad, así como la prohibición de realizar ataques indiscriminados.

Naciones Unidas tiene registradas 2 mil 788 víctimas civiles en Ucrania desde que Rusia lanzó el 24 de febrero su ofensiva militar, entre ellas mil 81 fallecidos, incluidos 93 niños, si bien la propia organización entiende que el dato real será “considerablemente mayor”.

Mientras, las autoridades de Ucrania han elevado ayer a 135 el total de niños muertos en el marco de la ofensiva militar lanzada el 24 de febrero por Rusia.

Como ejemplo, ha citado que el 3 de marzo murieron 47 civiles debido a la destrucción de dos escuelas y varios edificios de apartamentos en Chernígov, aparentemente causada por ataques aéreos rusos. También ha mencionado la destrucción del hospital en Mariúpol, señalando que “lo más probable” es que fuera responsabilidad de las fuerzas rusas.

El ataque se produjo el 16 de marzo y, hasta ahora, no se había ofrecido un balance aproximado de víctimas. El Ayuntamiento ha asegurado que serían unas 300 las víctimas mortales, a partir de lo que han declarado testigos.

En este contexto, también ha afirmado que la misión, establecida en 2014, está investigando denuncias de bombardeos “indiscriminados” por parte de las Fuerzas Armadas ucranianas en Donetsk y otros territorios controlados por las autoproclamadas repúblicas.

“Estos ataques causan un sufrimiento humano inconmesurable y pueden constituir crímenes de guerra”, ha incidido, antes de apuntar también que se ha confirmado el uso de bombas de racimo por parte de las fuerzas rusas y probablemente también por las ucranianas. Esto también equivaldría a violaciones del Derecho Internacional humanitario.

Bogner también ha señalado que han recibido denuncias de que las fuerzas rusas han matado a civiles en reuniones pacíficas, igual que asesinatos de civiles en territorio controlado por el gobierno ucraniano, debido a su supuesta afiliación con las fuerzas rusas o su apoyo a puntos de vista prorrusos.

Además, ha detallado que la misión ha documentado 22 casos de detención arbitraria y desaparición forzada de funcionarios locales en regiones bajo el control de las fuerzas rusas. Trece de ellos han sido liberados posteriormente.

El grupo ha registrado también la detención arbitraria y la desaparición forzada de 15 periodistas y activistas de la sociedad civil que se han opuesto a la invasión de las regiones de Kiev, Jersón, Lugansk y Zaporiyia, y está en el proceso de verificar la liberación de cinco de esos periodistas y tres activistas.

Además, ha mencionado “alarmada” que, desde la incursión de Rusia en el territorio controlado por Ucrania, se golpea a las personas que se cree que son ladrones, contrabandistas, simpatizantes prorrusos o infractores del toque de queda.

Asimismo, ha pedido a todas las partes “garantizar corredores seguros para la evacuación de civiles de áreas peligrosas y para emitir la entrega oportuna de asistencia humanitaria a la población civil de todo el país”. Por último, se ha hecho eco de las palabras del secretario general de la ONU, António Guterres, que ha dicho que esta guerra no va a ninguna parte. “Es momento de detener la lucha ya”, ha concluido.

Por otro lado, las autoridades ucranianas han denunciado que el ejército de Rusia ha tomado como rehenes a los alcaldes de 14 ciudades en el marco de la guerra, iniciada hace ya más de un mes.

La vice primera ministra y ministra para la Reintegración de los Territorios Temporalmente Ocupados, Irina Vereshchuk, ha confirmado dicha información, según recoge la agencia ucraniana de noticias UNIAN.

En este punto, Vereshchuk ha remarcado que el intercambio de prisioneros se debe llevar a cabo en condiciones de paridad, por lo que ha cuestionado cómo se logrará la libertad de los alcaldes.

Las autoridades rusas ya han confirmado al menos dos intercambios de prisioneros, si bien desde Kiev por el momento solo han confirmado uno de ellos. Moscú ya informó la pasada semana de la liberación del alcalde de la ciudad de Mariúpol, Ivan Fedorov, a cambio de casi una decena de soldados rusos.

El Ministerio de Defensa de Rusia ha anunciado ayer que las fuerzas rusas han conseguido bloquear ya la capital de Ucrania, Kiev, según ha hecho saber durante un balance del primer mes de la invasión, que se habría cobrado ya las vidas de 14 mil militares ucranianos y mil 350 efectivos rusos.

El presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, ha asegurado ayer que el país ha evacuado a lo largo de esta semana a casi 38 mil personas después de organizar 18 corredores humanitarios desde las ciudades asediadas por las tropas rusas.

Separatistas de Donetsk denuncian 260 muertos en bombardeos ucranianos

Las autoridades de la autoproclamada República Popular de Donetsk, en el este de Ucrania y aliada de las fuerzas rusas en la invasión del país, ha denunciado que más de 260 personas han muerto y mil 100 han resultado heridas como consecuencia de los bombardeos del ejército ucraniano en las zonas bajo el control de sus milicias.

Según un informe del Defensor del Pueblo de la RPD, del 18 al 25 de marzo, entre los fallecidos hay 232 integrantes de las milicias y 36 civiles. A ello hay que añadir mil 101 heridos, incluidos 871 militares y 230 civiles.

Donetsk se encuentra en la región de Donbás, escenario desde 2014 de una guerra entre Ucrania y las milicias separatistas tanto de esta autoproclamada república como de la vecina Lugansk.

Rusia decidió lanzar la invasión el 24 de febrero tras denunciar un aumento de los bombardeos ucranianos sobre estos territorios, cuya independencia ha reconocido formalmente mientras Ucrania los describe como suyos pero “ocupados por Moscú”.

Según la oficina del Defensor del Pueblo, desde el comienzo de la operación militar de Kiev en Donbás hace ocho años, 5 ml 742 personas han muerto en la región, entre ellos 96 niños, de acuerdo con el comunicado recogido por la agencia rusa TASS.

Las autoridades militares de Ucrania han reconocido ayer que las Fuerzas Armadas rusas dominan ya gran parte de la región de Donetsk, donde ya han logrado el control de varias ciudades y asedian otras tantas.

El jefe de la administración militar regional de Donetsk, Pavlo Kirilenko, ha incidido en que, sin embargo, el ejército ucraniano mantiene el control de las “ciudades principales” de la región, según recoge la agencia UNIAN.

Mientras, el Estado Mayor General de las Fuerzas Armadas de Ucrania ha asegurado ayer que las tropas rusas siguen reagrupándose con el objetivo de “reanudar las operaciones ofensivas” para alcanzar las fronteras administrativas de las regiones de Donetsk y Lugansk.

En un comunicado en su perfil oficial de Facebook, han detallado que las Fuerzas Armadas ucranianas buscan “consolidar y retener las fronteras previamente ocupadas” en la zona de Slobozhansky, cerca de la ciudad de Sumy. Además, han indicado que las tropas rusas tratan de “bloquear sus unidades” en los alrededores de Járkov.

Las autoridades de la República Popular de Lugansk (LPR) han informado de que un bombardeo ucraniano en el pueblo de Zolote, ha dañado un edificio residencial y un edificio anexo habría sido destruido.

Por otro lado, el principal negociador ruso en las conversaciones de paz con Ucrania, Vladimir Medinski, ha expresado ayer su pesimismo sobre la evolución de unas negociaciones ahora mismo prácticamente estancadas, a su entender, por la negativa ucraniana a aceptar un tratado “integral” traducida en los constantes intentos de Kiev de dilatar las reuniones.

Ucrania desmiente a Turquía que haya llegado a acuerdos con Rusia

El ministro de Exteriores de Ucrania, Dimitro Kuleba, ha asegurado que “no hay consenso” con Rusia en cuatro de los puntos planteados en las negociaciones, horas después de que el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, revelase un supuesto avance parcial del diálogo.

Erdogan, que se ha ofrecido de nuevo a mediar, ha afirmado que hay acercamiento en temas como la renuncia de Ucrania a la OTAN, la consolidación del idioma ruso y la seguridad colectiva, extremos que ha desmentido Kuleba.

Así, aunque ha agradecido a las autoridades turcas sus esfuerzos diplomáticos, ha negado que los citados avances, señalando por ejemplo que “el único idioma oficial de Ucrania es y será el ucraniano”, según el periódico Pravda.

Kiev reclama como primeros pasos un alto el fuego, garantías de seguridad y respeto por la integridad territorial de Ucrania, dentro de unas conversaciones con Moscú que por ahora no han dado resultados tangibles. El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, ha propuesto sin éxito una reunión con su homólogo ruso, Vladimir Putin.

Texto: Europa Press