El Presidente rompió su consigna de no asistir a un informe de labores de un gobernador: este viernes lo hizo al de su primo Alfredo del Mazo Maza —su primo y en algunos momentos su jefe de trabajo—, mandatario del Estado de México. huele a pasado abrazo con Montiel: Monreal.
Texto: Érika Hernández / Agencia Reforma / Foto: Twitter @Reforma
Toluca, Estado de México, 21 de septiembre de 2018. Esta es una despedida adelantada. El ambiente que se respira en el Palacio Gobierno en la capital mexiquense es de partida, y tiene como testigos de honor a la cúpula del Grupo Atlacomulco.
El presidente Enrique Peña Nieto rompió su consigna de no asistir a un informe de labores de un gobernador: este viernes lo hizo al de su primo Alfredo del Mazo Maza —su primo y en algunos momentos su jefe de trabajo—, mandatario del Estado de México.
En cuanto aparece en el Patio Central del Palacio de Gobierno, sus paisanos lo reciben con aplausos, que duran cerca de un minuto y que se mezclan con los gritos de “¡Enrique! ¡Enrique!”.
En primera fila, ansioso por saludarlo está su mentor —y tío— el ex gobernador Arturo Montiel Rojas, y junto a él los ex mandatarios mexiquenses Alfredo Baranda García, Ignacio Pichardo Pagaza, César Camacho Quiroz, Eruviel Ávila Villegas y Emilio Chuayffet Chemor, primer secretario de Educación en el peñismo.
El único ausente de este grupo de ex ejecutivos locales es el padre del anfitrión y también ex gobernador Alfredo del Maza González, quien desde hace algún tiempo se ha reportado enfermo.
Montiel recibe a Peña Nieto, a quien dejó como su sucesor en la gubernatura en el 2005, con un abrazo fraterno, un apretón de manos y una enorme sonrisa. Ambos, frente a la mirada de los presentes, intercambian algunas palabras.
Es el “Informe de Resultados” del gobernador mexiquense, pero parece un acto de agradecimiento a Peña, en cada rubro -salud, educación, transporte, seguridad y hasta medio ambiente- Del Mazo Mazale agradece los apoyos que la federación ha entregado.
“Los mexiquenses estamos orgullosos de usted, porque durante toda su vida se ha dedicado a servir, a trabajar por los demás y hacer de México un país libre y un país fuerte”, le afirma al arrancar su discurso.
Sentado frente a él, Peña le repite una y otra vez: “Gracias”.
En la primera fila no sólo está la esposa de Peña, Angélica Rivera, también los puristas más cercanos a él, como los ex secretarios de Educación, Aurelio Nuño Mayer, y de Desarrollo Social, Luis Enrique Miranda Nava, así como el actual titular de Comunicaciones y Transportes, Gerardo Ruiz Esparza, y el de Salud, José Narro Robles.
Le siguen la lideresa nacional del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Claudia Ruiz Massieu Salinas, a quien ahora sí saluda, y los gobernadores priistas de Guerrero, Héctor Astudillo Flores; Tlaxcala, Marco Antonio Rodríguez Mena; Oaxaca, Alejandro Murat Hinojosa, y Campeche, Alejandro Moreno Cárdenas.
Además, lo acompaña el pevemista de Chiapas, Manuel Velasco Coello.
No sólo es inusual la presencia de Peña, sino también que tome la palabra en este evento.
En un mensaje de 14 minutos, argumenta tres motivos para acudir al informe: primero, escuchar personalmente el avance de su estado; segundo, agradecer a los mexiquenses por el apoyo de 25 años; y tercero, ofrecer un mensaje en el mismo lugar donde inició su carrera política.
“Quiero aprovechar este acto para enviar un mensaje fraternal a mis paisanos desde el lugar donde inició mi carrera política, cuando estoy por concluirla”, explica.
“Señor gobernador tenga la certeza de que no causaré molestia alguna, sólo vendré a vivir aquí (…) Tendré el gusto de venir a mi estado para trabajar en nuevas tareas, como uno más de los 17 millones de mexiquenses”, anuncia.
Y el auditorio se suelta en risas.
Así como llegó, es despedido. Los aplausos lo arropan a su salida.
El detalle: coincide con Montiel
Enrique Peña Nieto coincidió en el patio central del Palacio de Gobierno del estado con Arturo Montiel Rojas.
Como parte del evento, el Palacio de Gobierno fue resguardado con vallas y restringido el paso peatonal.
En la zona fueron desplegadas 10 unidades del Estado Mayor Presidencial para la logística de vigilancia en las inmediaciones del centro de Toluca.
Abrazo EPN-Montiel es pasado: Monreal
El abrazo en Toluca que el presidente Enrique Peña Nieto obsequió este mediodía al ex gobernador Arturo Montiel es parte del pasado que se tiene que ir, ponderó el coordinador de la bancada de Morena en el Senado, Ricardo Monreal Ávila.
“Es un encuentro histórico del pasado que quisiéramos terminara, pero lo respeto”, dijo el legislador en entrevista.
“Es parte fundamental de un México que termina y que queremos quede simplemente en el pasado. Ahora el presente es la esperanza que tiene el país de un nuevo amanecer”, dijo Monreal sobre el abrazo.
“Andrés Manuel López Obrador, presidente electo, tiene desafíos enormes, una carga pesada bajo sus hombros y tiene una herencia extraordinariamente difícil en corrupción, en deuda, en impunidad, violencia e inseguridad”.
Por ese panorama, observó Monreal, la situación que se hereda no será nada fácil. “Y Andrés Manuel tiene una alta expectativa de todos los mexicanos de que vayan a cambiar las cosas”.
Durante su primer informe, Del Mazo se deshace en elogios a Peña… y asegura que el Edomex es “potencia económica”
El gobernador Alfredo del Mazo aseguró que los índices delictivos en el Estado de México disminuyeron 12 por ciento y que la entidad se ha convertido en una “potencia económica”. Y puso especial énfasis al expresar que su primo, Enrique Peña Nieto, ha sido el presidente más trabajador del país.
Durante la presentación de su primer informe de gobierno en el patio central de palacio de gobierno, en esta ciudad, Del Mazo Masa destacó que la entidad que gobierna fue puesta a prueba por el sismo del 19 de septiembre de 2017 y las elecciones del 1 de julio anterior, eventos que –apuntó– develaron fortalezas y debilidades, pero fueron superados con colaboración de la sociedad.
Sobre el terremoto ocurrido a tres días de que iniciara su administración, afirmó que en sólo dos meses el Estado de México volvió a la normalidad con el apoyo del presidente de la República.
Y, luego de felicitar a Andrés Manuel López Obrador por su triunfo del pasado 1 de julio, manifestó su disposición al diálogo por el bienestar ciudadano.
“En el Estado de México el proceso electoral tuvo como resultado un nuevo balance de gobierno que obliga al trabajo más allá de las ideologías partidistas, por el bienestar de los mexiquenses”, sostuvo, y refrendó su disposición de llevar una relación institucional con Morena, como bancada mayoritaria en la Legislatura, a fin de construir acuerdos.
El gobernador aseguró que este año 72 por ciento del gasto programable tuvo un fin social, de manera que más de 4.5 millones de mexiquenses (uno de cada cuatro) se vieron beneficiados con alguno de los programas “Familias Fuertes”.
Sobre el salario rosa, su principal promesa de campaña –puesto en marcha a sólo cinco meses de iniciar su gestión–, manifestó que ha alcanzado ya a cien mil mujeres de los 125 municipios.
Entre sus logros, Del Mazo enlistó el aumento presupuestal de 15 por ciento a la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEMex), y en el tema de salud indicó que el abasto de medicamentos creció de 25 a 85 por ciento.
De igual manera, anticipó que en un par de años aumentarán en 15 por ciento las autopistas; el Tren Interurbano México-Toluca hará posible un corredor comercial que dará dinamismo a la economía estatal, y el Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM) representará un polo de desarrollo a la entidad que generará 450 mil nuevos empleos.
El mexiquense, quien en su toma de protesta ofreció disminuir los índices delictivos en tan sólo tres meses, reiteró que su mayor compromiso es garantizar la integridad a los mexiquenses, y por eso –detalló– creó la Secretaría de Seguridad y aumentó en 15 por ciento el presupuesto en esa materia, además de incrementar 15 por ciento el salario de los policías e invertir mil millones de pesos en uniformes y patrullas equipadas con tecnología de punta.
Al tocar el tema de la violencia contra las mujeres, presumió que se aprobó la pena de 99 años de prisión –la mayor en la historia del Estado de México– para los feminicidas.
“Gracias a la estrategia y al trabajo coordinado de todas estas instancias se ha contenido el crecimiento de los delitos de alto impacto, y en el periodo entre septiembre de 2017 y julio de 2018 logramos disminuir la incidencia delictiva total en 12 por ciento”, apuntó.
Del Mazo Maza reservó al menos cinco minutos al final de su discurso para elogiar el trabajo de Peña Nieto, a quien los asistentes al informe brindaron un minuto de aplausos, entre ellos los gobernadores de Chiapas, Manuel Velasco; Guerrero, Héctor Astudillo; Campeche, Alejandro Moreno; Oaxaca, Alejandro Murat, y Tlaxcala, Marco Mena.
Al evento también asistieron magistrados, diputados, alcaldes, obispos y secretarios de estado, como el de Gobernación, Alfonso Navarrete; Comunicaciones y Transportes, Gerardo Ruiz, y Salud, José Narro, así como Francisco Guzmán, jefe de la oficina de la Presidencia, y Andrés Massieu, coordinador general de Política y Gobierno, además de la presidenta nacional del PRI, Claudia Ruiz Massieu.
“Con gran responsabilidad social, el presidente emprendió acciones inéditas para disminuir la pobreza, para impulsar la generación de empleos, para proteger el medioambiente y para recuperar nuestro prestigio ante la comunidad de naciones… Reconocemos que, en la historia reciente del país, ningún presidente ha trabajado tanto por hacer de México una nación orgullosa, pujante y vigorosa”, enfatizó.
Según Del Mazo, gracias al apoyo de su primo, el Estado de México es hoy “una potencia económica y una tierra de oportunidades”.
En respuesta, Peña enlistó las obras promovidas en la entidad, y aseguró que al término de su mandato regresará a radicar a su tierra natal sin “causar molestias” al gobierno local. Es el adiós. Y la promesa del regreso, como uno más.
