Pese a que se sabe que empleados del negocio manipularon la escena del crimen, el fiscal negó que haya personas detenidas
Puerto Vallarta / Guadalajara, Jalisco, 21 de diciembre de 2020. El fiscal de Jalisco, Gerardo Octavio Solís, informó ayer que hasta ahora han recogido testimonios de alrededor de 20 personas para tratar de esclarecer el asesinato del ex gobernador Aristóteles Sandoval en este destino turístico.
Esto les ha permitido avanzar poco a poco en la investigación y la hipótesis de los hechos, aunque declinó revelar detalles.
“Estamos teniendo diálogo con un promedio de aproximadamente 20 personas o más. Desde luego, dentro de la confusión hubo circunstancias muy específicas, (por ejemplo), que la persona no recuerda (detalles) por el mismo estrés del momento”, señaló Solís en Altamar Plaza Gourmet, donde se encuentra el bar Distrito 5, sitio de la ejecución.
“Hace unos momentos se hizo un análisis de la zona, de videos… y se lograron encontrar más cascos (casquillos) que estaban dispersos en algunas zonas no visibles”.
Los casquillos estaban en la vía pública y pertenecen a armas de grueso calibre, aunque hasta ese momento no se había podido determinar si fueron de los proyectiles disparados en el exterior o si son los que fueron manipulados en el bar.
Altamar Plaza Gourmet y los alrededores estuvieron ayer fuertemente custodiados por elementos de las Fuerzas Armadas y por personal de la Fiscalía del Estado.
Un helicóptero Black Hawk de la Secretaría de Seguridad Pública estatal también sobrevoló el punto.
Pese a que se sabe que empleados del negocio manipularon la escena del crimen, Solís negó que cuenten con personas detenidas por el momento.
“No hay detenidos, estamos trabajando intensamente para tratar de determinar responsabilidades; no quisiéramos aventurar juicios porque no es correcto, pero en su momento, cuando tengamos alguna detención, se haría saber de manera inmediata”, aseveró.
Solís fue visto ayer recorriendo la plaza y escuchando al personal que lleva a cabo la indagatoria del caso.
Respecto al reforzamiento en la seguridad de Puerto Vallarta por parte de la Secretaría de Seguridad Pública del Estado, el titular de la Coordinación General Estratégica de Seguridad, Ricardo Sánchez Beruben, sostuvo que es pronto para hablar sobre una intervención de la Policía del municipio.
“Es una decisión que se toma de manera colegiada en el Consejo Estatal de Seguridad y ahorita sería prematuro hablar del tema”, argumentó.
Sandoval fue asesinado en el bar Distrito 5, en un ataque directo en el que participaron al menos 10 sujetos, de acuerdo con las primeras versiones.
El ex gobernador priista se encontraba cenando en el restaurante, ubicado sobre el Bulevar Francisco Medina Ascencio, en compañía de otros dos individuos y una mujer, y cuando se dirigía al baño fue atacado a tiros por la espalda.
Ven encubrimiento
La Fiscalía del Estado debe aclarar si los empleados del bar Distrito 5, en Puerto Vallarta, fueron amenazados, estaban coludidos o si actuaron por desconocimiento al limpiar las pruebas del homicidio de Sandoval Díaz, coincidieron especialistas.
“Hasta el momento no tenemos información si los amenazaron, si tenían un acuerdo previo con estas personas (sicarios), si había también servidores públicos. Si fuera de eso, por parte de los empleados pudiera ser lo que establece artículo 263 del Código Penal de Jalisco, que habla del delito de encubrimiento”, explicó el penalista Joseph Irwing Olid Aranda.
El artículo establece sanciones de un mes a tres años para quien, sin haber participado en un delito, ayude a un delincuente a eludir las investigaciones.
“El que hayan levantado indicios y alterar el lugar de los hechos por supuesto que los puede hacer responsables, dependiendo de la investigación”, coincidió por su parte Alfonso Partida, de la UdeG.
Si se comprueba que los empleados actuaron con dolo podrían incurrir en otros delitos como participación en el homicidio.
Despiden familiares, Alfaro y políticos priistas al ex gobernador
En el Congreso del Estado se catapultó a la vida política de Jalisco. El Ayuntamiento de Guadalajara fue la antesala para “la grande”, y el Palacio de Gobierno su última oficina de trabajo. El sábado, Jorge Aristóteles Sandoval Díaz visitó, por última vez, los tres recintos.
El gobernador Enrique Alfaro recibió a su amigo, con quien inició su carrera política, con el que compartió sueños e ideales.
Ni el cubrebocas esconde el dolor que deja su violenta partida. Por momentos el Covid-19 no existe. Alfaro abre los brazos para reconfortar a Giovanna y Leonela Sandoval, hijas de Aristóteles, así como a Lorena Arriaga, su esposa, quienes se quiebran.
En el antiguo Recinto Legislativo, el féretro es cubierto con la bandera de Jalisco. Los recuerdos y compromisos emanan: hallar a los culpables.
Leonel Sandoval y Sagrario Díaz, padres del ex mandatario, montan la primera guardia de honor. Ella fija su vista en esa caja de madera y la acaricia como si se tratara del rostro mismo de su hijo.
Afuera, elementos de la Policía del Estado, incluyendo a las llamadas toritas, hacen una valla para acompañar al féretro. Las agentes viales, que en su mayoría forman parte del Operativo Salvando Vidas, son parte del legado que deja Aristóteles.
En el salón de Pleno del Poder Legislativo, Lorena Arriaga rompe en llanto. Su esposo, asegura, sigue vivo en su obra.
Frente al Ayuntamiento tapatío, cientos vitorean a quien gobernó la Ciudad del 2010 al 2012 y, aseguran, fue un gobernador humilde y empático, mientras que el mariachi lo recibe al son de Guadalajara.
Las Golondrinas despiden a Aristóteles, quien marcó la segunda transición democrática en Jalisco, y lo acompañan al PRI, su última parada antes de ir al cementerio Recinto de la Paz.
Blindan Vallarta tras el atentado
Un día después del homicidio del ex gobernador priista Jorge Aristóteles Sandoval Díaz, la Secretaría de Seguridad Pública de Jalisco mandó a Puerto Vallarta centenares de policías, así como a un equipo táctico aéreo y hasta vehículos blindados para reforzar la seguridad del destino turístico.
Aunque al cierre de esta edición las autoridades no informaron sobre algún detenido ni dieron avances en las investigaciones, en los primeros minutos de ayer arribó a Puerto Vallarta un dispositivo con decenas de patrullas, incluyendo de la Policía Vial.
Y desde la tarde, el helicóptero Black Hawk de la Secretaría de Seguridad sobrevoló la zona aledaña al bar Distrito 5, donde Sandoval Díaz fue asesinado a tiros la madrugada el viernes, en el baño.
Fuentes allegadas a la dependencia explicaron que el operativo busca brindar tranquilidad a los habitantes y a los turistas, sobre todo por el movimiento que hay en esta época del año.
La tarde del sábado, en Guadalajara, el gobernador Enrique Alfaro habló sobre el refuerzo de la seguridad en Puerto Vallarta y se comprometió a esclarecer el asesinato de Sandoval Díaz.
“Yo tengo un compromiso, por supuesto, personal, y tenemos ya prácticamente dos días trabajando todos metidos tratando de que la investigación nos lleve a encontrar a los responsables”, señaló.
“Vamos a mantener una presencia fuerte allá (en Puerto Vallarta)”.
Los agentes de refuerzo trabajarán en coordinación con los de otros órdenes de Gobierno, como la Policía del Municipio, la Guardia Nacional, el Ejército y los agentes de la Fiscalía del Estado, para vigilar el Centro, el Malecón y la zona turística.
Texto: Staff / Agencia Reforma
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