23 enero,2023 11:37 am

Se presenta la banda inglesa Muse en una tocada llena de virtuosismo y destrucción

Ofrecen un concierto ante más de 65 mil personas en el Foro Sol la noche del domingo

Ciudad de México, 23 de enero de 2023. Matt Bellamy parecía haber enloquecido y comenzó a destruir su guitarra sobre el escenario, en pleno show de Muse. Aventó de un lado a otro su instrumento y, cuando las cuerdas de este se reventaron, las tomó del extremo libre y se puso a dar vueltas antes de dejarla caer.

El acto del también vocalista de la banda estaba casi anunciado desde que arrancaron su concierto en el Foro Sol anoche, pues Bellamy, el baterista Dominic Howard y el bajista Chris Wolstenholme salieron enmascarados y encapuchados, listos para destruir todo y armar una revuelta.

Después de tocar en Guadalajara y Monterrey, los ingleses aterrizaron en la Ciudad de México, donde hicieron saltar y gritar a 65 mil fans, cifra proporcionada por los organizadores, extasiados con su Will Of The People World Tour.

Al estar inspirado su álbum del año pasado, homónimo de la gira, en el espíritu rebelde, los músicos dejaron ese sello en sus ropas, adornada como si hubieran sido marcadas por pintura de aerosol, y también en una cabeza de cerca de 10 metros, encapuchada y enmascarada, que vigilaba a todos.

La presentación inició con Will of the people, Psycho y Won’t stand down, que de inmediato pusieron a cantar a la gente, eufórica al ver a Bellamy saltar de un lado a otro mientras tocaba.

Llamaradas de fuego y serpentinas azules y blancas, estas lanzadas durante Compliance, ayudaron al espectáculo visual.

En contraste con la rudeza con la que atacaron sus instrumentos, la banda tuvo, con su público, cariño y delicadeza, tanto que el vocalista se dirigió a los fans principalmente en español, para agradecerles.

“Los amamos”, gritó Bellamy en la única intervención en inglés.

Como respuesta, recibió un peluche del Dr. Simi, enmascarado como los músicos al salir al escenario, el cual presumió antes de escoltar una risita.

Sus seguidores estuvieron totalmente entregados, pues cuando arrancaban las primeras notas de sus canciones consentidas ellos coreaban a todo pulmón, como hicieron con Madness, la cual además acompañaron con las lámparas de sus celulares.

Durante Psycho, el baterista chocó sus baquetas en el aire y sonrió con satisfacción, pues veía al público con las palmas arriba al mismo ritmo, sin necesidad que la banda lo pidiera.

El sello tecnológico tradicional del trío brilló, sobre todo cuando interpretaron Uprising, para la que Bellamy lució un guante electrónico, que además era un instrumento, la cual dio paso a Starlight.

Tras casi hora y media de pasión desbordada, Muse se despidió con su hit Knights of Cydonia, con el frontman demostrando su habilidad para tratar bien a la guitarra, lo que dejó a la gente totalmente prendida.

Texto: Mauricio Ángel / Agencia Reforma