Urge la Casa de la Mujer Indígena y Afromexicana que se reactive la impartición de justicia porque ante la pandemia las víctimas están indefensas y los victimarios están libres
Chilpancingo, Guerrero, 25 de junio de 2020. La asesora de la Casa de la Mujer Indígena y Afroamericana “La Abuela Sabia” de Ayutla de los Libres, Fidela Hernández Vargas, informó que debido a la parálisis que hay por la epidemia del Covid-19 en las agencias del Ministerios Públicos en la Costa Chica hay al menos seis denuncias presentadas de violación, violencia física contra mujeres, pero no han sido judicializados y los victimarios están libres.
En declaraciones por teléfono Hernández Vargas indicó que en todos los casos se les ha brindado asistencia jurídica y psicológica a las mujeres y menores de edad que sufrieron de violencia por parte de sus parejas o familiares cercanos.
Además advirtió que en las zonas indígenas de la Ayutla la violencia en casa aumentó por la pandemia del Covid-19 porque muchos hombres no han podido salir a trabajar debido a las restricciones que hay en las ciudades.
Dijo que está resultando contraproducente por parte de la autoridades del gobierno del estado y la Fiscalía General mantener en parálisis las áreas de justicia porque muchas de las víctimas están indefensas, además de que el proceso de por sí es tardado. Por eso urgió a que lo antes posible se reactiven las áreas de impartición de justicia.
De los casos que han llegado a la Casa de la Mujer se encuentra el de una mujer de la comunidad na’savi de Juquila, que fue violada en diciembre y cuya denuncia se presentó en el Ministerio Público pero no se ha judicializado la carpeta y tampoco se ha emitido la orden de aprehensión contra la persona que cometió el delito.
Otro caso por intento de violación fue registrado el 22 de abril contra una mujer indígena de Barranca Tecoani y cuya denuncia se presentó en el MP, además una menor de 6 años de edad de que sufrió intento de abusado sexual por su abuelo en la comunidad de La Haciendita el 28 de abril.
También hay casos de violencia psicológica como el documentado el 29 de abril contra dos hermanos, niña y niño por parte de su padrastro en la comunidad de El Zapote, quienes fueron atendidos por una psicóloga quien corroboró los daños los menores. La denuncia del caso tampoco ha sido judicializada.
Una señora llegó el 13 de mayo a pedir ayuda porque su esposo la golpeó, pero al igual que el resto la denuncia sigue pausada en el MP. El lunes llegó otro caso de una mujer de la comunidad de Colotepec, se presentó una denuncia y se le dio orientación.
Otro caso de violencia física es el de una menor de 15 años de Tecoanapa contra su esposo de 18 años, que fue documentado el 22 de junio. La asesora dijo que la menor no quiso presentar la denuncia, que iba platicar con su familia para ver cómo se procedía.
Texto: Jacob Morales Antonio
