6 marzo,2020 6:48 am

Señalan pintoras del estado haber sufrido discriminación pero que siguen avanzando

Se inaugura en el Museo de Arte Contemporáneo de la UAG la exposición, El arte tiene voz e imagen de mujer, con 36 artistas de Alemania, Costa Rica, Uruguay, Chile y del país.

Chilpancingo, Guerrero, 6 de marzo de 2020. La Universidad Autónoma de Guerrero (UAG) inauguró la tarde de este miércoles una exposición de fotografía y pintura denominada El arte tiene voz e imagen de mujer, con 36 expositoras representantes de cinco países y cuatro entidades de México, en el Museo de Arte Contemporáneo (Muac).

En entrevista tras el corte de listón, las autoras Griselda Romero Vásquez, Gris Romero, de Acatlán, Chilapa, y Minerva Dirzo de Iguala, platicaron las vicisitudes a las que se han enfrentado, que van de la discriminación y el reto de crear estando a cargo del hogar al goce del reconocimiento de su trabajo.

Gris Romero se reconoce como heredera de la cultura olmeca que dice, “tengo tatuada en todo mi ser. Es mi herencia, en Acatlán está la cueva de Oxtotitlán donde están plasmadas las pinturas rupestres de la cultura olmeca, de la cultura madre. Quiero resaltarlo y visibilizarlo para que los guerrerenses tengan esta conexión con sus ancestros, todos los guerrerenses somos hijos del gran jaguar, nuestra fisonomía es la de un jaguar”.

La pintora Griselda Romero Vásquez, Gris Romero, de Acatlán, Chilapa, en la exposición de fotografía y pintura “El arte tiene voz e imagen de mujer”.

Mirando su obra Yaocihuatl, donde se ve a una mujer con el puño izquierdo en alto, cargando dos libros, bajo un cielo estrellado y rodeada de flores, platica, “ella es una mujer acateca que podría ser yo, una mujer mexicana, una mujer indígena, una mujer maíz, mujer de tierra, de barro, mujer cosmogónica que tiene la lengua madre y que defiende sus derechos”.

Considera que el arte, en todas sus expresiones, ayuda a combatir el machismo que impera en el país, “no siempre tiene que haber paro de labores, se puede hablar a través del arte. Mi pintura es una mujer guerrera ante la sociedad machista”.

Pero además “es un remedio para el alma, para mi ha sido como una pomada que me ha curado el alma”.

A pesar de reconocer las trabas que se le ponen en la sociedad a las mujeres, afirma que no es difícil ser pintora, “he descubierto que a partir del arte se conoce a muchísima gente y una se reencuentra con sus hermanas, porque el arte es para todos. En Acatlán, una sociedad machista, hay muchas mujeres que se abren camino a través del arte, no sólo de la pintura, sino de la escultura, la música, la danza, la literatura, el cine, hay escritoras, poetas, pintoras, estamos alzando la voz por las que no tienen voz”.

“Veo avances en la lucha de las mujeres, yo sufrí discriminación, te hablo de los 80, actualmente vivo en la Ciudad de México, llegué a una ciudad machista hablando mi lengua madre, no entendía la vida en la ciudad, iba con mis tradiciones, mi lengua, mi vestimenta y viví el rechazo, pero esa parte me hizo fuerte, fue un despertar”.

Ahora es maestra de educación primaria, tiene una maestría y un doctorado en educación, “no ha sido fácil pero no es imposible, y ahora me estoy abriendo camino en la pintura. Quizás necesitamos visualizar lo que estamos trabajando, somos pocas, pero el arte nos hermana y abre camino, porque somos mujeres fuertes y sabias y tenemos que ayudar a las que nos vienen siguiendo, decirles que sí se puede”.

Minerva

La artista plástica Minerva Dirzo Brito es de Iguala, empezó a pintar a los 35 años, hace unos 10 aproximadamente, tomó clases en el Palacio de la Cultura y en la Pinacoteca de la UAG, sus técnicas son acuarela, acrílico y principalmente óleo.

“Empiezo a tomar clases por casualidad, llevaba a mis hijos a clases, pero ya no quisieron ir, me sentí mal con el maestro y con una de mis niñas es que tomó las clases”.

Aprendió del artista plástico de Tixtla, Ian Malaj, de Rafael Huamán y Evaristo Callo de Perú.

Relata que al final de su formación, en la Pinacoteca de la UAG “nos quedamos sin maestros, éramos cinco compañeros y entre nosotros nos dábamos clases, fue hermoso porque además estábamos con los amigos, nos enfocamos en pintar y nos olvidamos del quehacer, de las peleas”.

La pintora Minerva Dirzo de Iguala en la exposición de fotografía y pintura denominada “El arte tiene voz e imagen de mujer”.

Ha montado exposiciones en el Museo de La Bandera en Iguala, en Tixtla, Acapulco y Chilpancingo.

“A veces se me complica pintar porque soy ama de casa, tengo que atender a los niños, ir a mi trabajo, trabajo en el hospital general en el Módulo del Registro Civil, registro a los bebés que nacen en el hospital, me apasiona porque puedes ayudar a la gente, y todo esto lo podemos manifestar en el arte, en primera me ayuda a mí, a liberarme, después ayuda a los demás a enterarse, a sensibilizarse de los problemas”.

“Es complicado seguir pintando, pero me gusta, encuentro en la pintura una manera de expresarme, me preocupa la situación social de América Latina, la situación de Chile, Argentina, Brasil. No podemos ser apáticos y el arte ayuda, puede ser un salvavidas y una forma de sensibilizar”.

Considera que el arte puede mejorar la situación social, pero “falta el impulso de los maestros, de los padres, de las autoridades, porque hay intereses de por medio, el arte no les da políticamente hablando, prefieren obras de relumbrón y el arte queda relegado, no veo que avance y no veo que haya apoyo, por ejemplo esta actividad tardó muchísimo para hacerse (la exposición en el Muac), y sólo la hacen por el Día de la Mujer”.

Una de las obras multicolores de Minerva parece un bosque, en acuarela, un bosque en el que uno puede andar y oler las flores, ella dice que es su infancia.

Los países invitados a la exposición son Alemania, Costa Rica, Uruguay y Chile; del país y hay autoras de Sinaloa, Guadalajara, Ciudad de México y Guerrero.

Texto y fotos: Rosendo Betancourt Radilla