Chilpancingo, Guerrero, a 17 de mayo de 2024.- El fiscal de Morelos, Uriel Carmona Gándara confirmó que el obispo emérito de la Diócesis Chilpancingo-Chilapa, Salvador Rangel Mendoza, fue privado de su libertad y sometido a sustancias químicas de las que se sigue recuperando paulatinamente.
En el noticiero de Joaquín López Dóriga en Radio Fórmula, dijo que según declaraciones breves del prelado e informaciones de las cámaras de seguridad, ya tiene nociones de lo que le pasó, para afirmar que Rangel fue víctima de un delito.
También se ubicó a una persona como presunta responsable y eventualmente lo van a detener para presentarlo ante las autoridades.
En el noticiero vespertino el servidor público mencionó de entrada que el clero ha insistido a la Fiscalía en que sea prudente con las declaraciones, para no revictimizar al obispo, “se trata de un ser humano que sufrió un delito grave, ha causado mucha polémica la información que ha circulado (de los hechos)”.
Distinto a la declaración inicial del comisionado de Seguridad Pública de Morelos, José Antonio Ortiz Guarneros, el fiscal informó que Rangel fue sometido y privado de la libertad.
“Sí estaba siendo sometido por la suministración de sustancias que le hicieron mucho daño, el señor obispo sufrió una sumisión química, de la que se está reponiendo muy paulatinamente”, subrayó.
Añadió que el prelado compartió con la fiscalía “breves declaraciones”, y con la información, sobre todo de las cámaras de seguridad, ya tiene una noción de lo que le pasó.
“Lo que queremos decir es que sí hubo un delito, independientemente de cuál fuera la actividad que en el plano personal estuviera desarrollando. Es algo que no debemos referir porque no podemos revictimizar a una víctima, (pero) ese resultado lo vamos a tener pronto, tenemos ya ubicado al menos a una persona como probable responsable de este hecho”.
Requirió una declaración del comisionado de Seguridad, dice
De la declaración del comisionado de Seguridad pública, de que el obispo había ingresado de manera voluntaria a un motel con otra persona, informó que de manera oficial, la Fiscalía le requirió una respuesta por comparecencia, “todavía no se hace, estamos esperando que en breve nos diga por qué, o en base en qué hizo esas declaraciones públicas”.
La semana pasada el obispo Rangel informó en un comunicado que pafra garantizar su seguridad e integridad no iba a presentar denuncia contra las personas que le hicieron daño.
También dijo que su vida, su edad y su salud se encontraban en condiciones desfavorables y que perdonaba a sus agresores y a quienes lo revictimizaron, producto de la desinformación.
Texto: Lourdes Chávez / Foto: Cuartoscuro / Archivo
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