11 agosto,2024 2:28 pm

Sin legalidad, Alito no tendrá legitimidad: Beltrones

 

Ciudad de México, 11 de agosto de 2024. El senador priista electo Manlio Fabio Beltrones advirtió que la probable reelección de Alejandro Moreno al frente del PRI carecerá de legitimidad porque no tendrá visos de legalidad.

“¿Considera que Alito tendrá la suficiente legitimidad al frente del CEN?”, se le preguntó en entrevista telefónica.

“Primero, no tiene la legalidad, y al no tener la legalidad no se podrá tener la legitimidad”, respondió.

El ex dirigente nacional del PRI consideró una imprudencia llevar a cabo la elección del presidente del partido dado que hay un par de impugnaciones que aguardan resolución.

“Alejandro Moreno todavía no puede cantar victoria”, aseguró el ex gobernador sonorense, “en este momento hay más priistas afuera del PRI qué dentro del PRI”.

En su opinión, fue un acto de imprudencia este Consejo Político y esta reelección con estatutos no validados por el Instituto Nacional Electoral.

“No se ha impuesto la diligencia que amerita esta situación de un PRI que está en posibilidades de legitimar ilegalidades y, en el caso de que no nos den la razón, de vivir uno de sus últimos momentos de carácter institucional. El PRI no merece terminar su vida útil de esa manera’, planteó.

“Yo no tengo un asunto personal con nadie: soy de vocación completamente antirrelecionista en un partido político como el PRI. Y las disidencias en un partido político son naturales. Nadie se debe ofender ni sentir lastimado personalmente”.

“¿Se asume en la disidencia?”, se le preguntó.

“Yo estoy en desacuerdo completamente con lo que está sucediendo en la vida interna del partido que ha sido tomada por un grupo muy disminuido que se refleja en un Consejo Político también bastante disminuido”, respondió.

Beltrones decidió no participar en el ejercicio de votación que desde las de la mañana se desahoga en la sede nacional tricolor, como tampoco lo hicieron los ex presidentes priistas Dulce María Sauri Riancho, Pedro Joaquín Coldwell y Enrique Ochoa.

El político sonorense salió al paso de las versiones que sugieren que no formaría parte de la bancada del PRI a partir del 1 de septiembre, cuando se instale la nueva Legislatura.

“Soy de los priistas que ha permanecido durante muchos años dentro del PRI no obstante sus vicisitudes. Siempre he respetado la legalidad que se da dentro del partido. Yo me conservo como de esos priistas que estamos inconformes con lo que está sucediendo, pero dentro del PRI. El 1 de septiembre asumiré mi posición en el Senado y estaré en el grupo parlamentario del PRI, pero no contarán con un voto ciego”, aseguró.

 

Farsa, la reelección de Alito, acusan ex líderes del PRI

A unas horas de que se concrete la reelección de Alejandro Moreno como dirigente nacional del PRI, ex líderes del partido que han impugnado el proceso afirmaron que el ejercicio devino en una farsa.

Dulce María Sauri Riancho, Pedro Joaquín Coldwell y Enrique Ochoa Reza deploraron que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación haya sido permisivo ante el atraco que supone la reelección de Alito.

“Este domingo se ha consumado la farsa”, coincidieron los ex presidentes en un documento.

“Esta reelección es producto de una Asamblea Nacional ilegal, a partir de una reforma ilegal de los Estatutos y de un proceso de elección ilegal, con la que Alejandro Moreno pretende reelegirse y secuestrar el partido histórico de México”.

Desde la perspectiva de los ex dirigentes, la Asamblea Nacional tiene múltiples ilegalidades en cuanto a su ejecución, puesto que el Reglamento para su organización no fue aprobado por el Consejo Político Nacional como lo establecen los Estatutos en su artículo 83.

Hicieron notar que no hubo información oportuna de los cambios estatutarios que se iban a votar ni acceso amplio a las mesas de discusión para los delegados interesados en participar.

De hecho, solamente 100 personas fueron acreditadas en cada una de las mesas que discutían las reformas.

Se trata, aseguran, de una Asamblea rasurada, solo participan los consejeros nacionales elegidos a modo por esta dirigencia.

Sauri, Coldwell y Ochoa señalaron que, por primera vez en la historia del Partido Revolucionario Institucional, el dirigente se reelige a puerta cerrada, sin propuestas, ni debate ni proyecto de futuro y con la militancia ausente.

“El PRI es un partido secuestrado por la ambición personal de Alejandro Moreno, alejado del buen desarrollo institucional del partido”, afirmaron.

“El daño jurídico infligido el día de hoy al PRI se podrá reparar cuando el INE y el Tribunal Electoral anulen la Asamblea Nacional ilegal, así como todos los actos derivados de ella, como es la reelección de la dirigencia. Sin embargo, el daño moral ante la sociedad por los actos ilegales de la actual dirigencia será muy difícil de resarcir”.

Además, los ex presidentes sostuvieron que la reelección de Alejandro Moreno afecta los principios de igualdad sustantiva y de paridad de género a la que está obligado el PRI, conforme a la Constitución en su art. 4 y a sus propios Estatutos, artículo 173.

“La posibilidad de que el actual dirigente se pueda reelegir en otros dos periodos ordinarios, después de que ya concluyó un ordinario y otro extraordinario es inconstitucional y anti estatutario por incumplir y violar la regla de paridad en la elección de dirigentes, dado que no permite la alternancia de género”, expusieron.

“Es lamentable que el Tribunal Electoral haya sido permisivo ante el atraco, luego de que sólo tres magistrados de la Sala Superior permitieron que la larga cadena de ilegalidades culminara en la reelección de Alejandro Moreno. Tuvieron la oportunidad de actuar y decidieron no hacerlo”.

Destacaron el cuestionable proyecto en el que la magistrada presidenta, Mónica Soto, remitió al partido y al Instituto Nacional Electoral (INE) las dos impugnaciones que el grupo de expresidentes nacionales del PRI presentaron a nombre de cientos de militantes en resistencia frente a las ilegalidades.

“La magistrada presidenta Soto optó por no ponerle fecha límite al partido para que resuelva, contrario a la propuesta original del magistrado Reyes Mondragón. La consecuencia era previsible, el PRI no ha resuelto el caso, aplicando un tortuguismo burocrático, mientras cumple aceleradamente como liebre el proceso ilegal para reelegir a Alejandro Moreno”, afirmaron los ex dirigentes.

“El Tribunal Electoral debe enmendar su error y resolver en última instancia bajo criterios estrictamente jurídicos que no den lugar a retrasos, ni a sentencias cuestionables por parcialidad o falta de rigor jurídico”.

 

Texto y foto de archivo: Agencia Reforma