Se estima que hay más de 100 jornaleros de Tierra Caliente de Guerrero trabajando en los campos meloneros de Michoacán, y que todos los días tienen que realizar el mismo traslado, apretados en camionetas, sin que haya condiciones sanitarias.
Ciudad Altamirano, 3 de abril de 2020. Todos los días se trasladan decenas de jornaleros desde los municipios de Ajuchitlán y Coyuca de Catalán hacia Michoacán, para trabajar en empresas meloneras, los cuales son enviados en camionetas y bajo condiciones insalubres, sin medidas de prevención ante la emergencia por el coronavirus, sin que haya filtros que controlen la higiene en la que se desarrolla su trabajo.
En unas 10 camionetas se trasladan todos los días, durante las madrugadas, de 10 a 15 personas en cada unidad hacia los campos meloneros ubicados en el municipio de San Lucas, Michoacán. Los recorridos parten desde Ajuchitlán, recogiendo trabajadores en diferentes pueblos, pasando por Coyuca de Catalán y Ciudad Altamirano.
De la misma forma, durante la tarde, alrededor de las 3, comienzan a regresar las mismas camionetas, con grupos hacinados en las unidades, que concluyen hasta Ajuchitlán llevando a los jornaleros.
Se estima que hay más de 100 jornaleros de Tierra Caliente de Guerrero trabajando en los campos meloneros de Michoacán, y que todos los días tienen que realizar el mismo traslado, apretados en camionetas, sin que haya condiciones sanitarias.
A la intemperie, los jornaleros buscan taparse el rostro con sus propias ropas, por las condiciones de calor. El contacto físico se da en medio de esta contingencia sanitaria, sin que existan filtros que les vigilen.
Son personas de escasos recursos, que deben acudir a trabajar todos los días, para llevar dinero. Son personas de escasos recursos, que tienen que acudir a trabajar todos los días, para llevar dinero a su casa.
Estos grupos no son supervisados, porque cruzan de un estado a otro. Su zona de trabajo está en Michoacán, en el municipio de San Lucas, que es uno de los más alejados de la capital y hay menos vigilancia.
Las condiciones salubres son mínimas. Trabajan mujeres y hombres, pero su actividad aún es considerada como necesaria, por tratarse de trabajo eventual.
Texto y foto: Israel Flores
