27 septiembre,2018 5:14 pm

Solución en Cercano Oriente sigue indefinida tras asamblea de la ONU 

Texto: DPA y EFE / Foto: EFE

Las posibilidades para una solución de dos Estados que involucre a Israel y a los Territorios Palestinos sigue siendo incierta tras las intervenciones hoy de los líderes de ambos países en la Asamblea General de la ONU en Nueva York.
El presidente palestino Mahmud Abás atacó hoy temprano los esfuerzos de Estados Unidos por alcanzar un acuerdo de paz palestino-israelí, llamando a Washington un mediador “parcial” y asegurando que Jerusalén “no está a la venta”.
Abbas agregó en Nueva York que Trump debe rescindir su reconocimiento a Jerusalén como capital de Israel, entre otras medidas.
El líder palestino ya había rechazado de plano una próxima propuesta de paz de Estados Unidos. “Es realmente irónico que la administración estadunidense aún hable de lo que llaman ‘el acuerdo del siglo'”, declaró Abbas.
Abbas tuvo que hacer frente a controvertidas medidas de Trump como el traslado de la embajada estadunidense de Tel Aviv a Jerusalén y el recorte de la ayuda estadunidense a los palestinos.
Hoy también se conoció que la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina (UNRWA) recaudó 118 millones de dólares para tratar de compensar el recorte dispuesto por Washington.
El aporte reduce la caída de ingresos de 186 a 68 millones de dólares, informó el titular de la agencia, Pierre Krahenbuhl, a periodistas en Nueva York. Alemania, la Unión Europea (UE), Kuwait, Irlanda y Noruega están entre los países que aportaron donaciones en un encuentro al margen de la Asamblea General.
Abbas dijo además que está revisando los acuerdos en los que se basan las relaciones de su Gobierno con Israel. Sin embargo, no anunció de momento ninguna medida que apunte a disolver dichos convenios.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, que habló casi inmediatamente después que Abbas, apenas se refirió al conflicto. “Los terroristas palestinos están pagando con su orgullo el asesinato de judíos”, dijo el primer ministro israelí. “Éste no es camino para la paz”, agregó.
Netanyahu, un halcón político, se ha opuesto durante años a un Estado palestino. Bajo Trump, la Casa Blanca ha puesto fin a décadas de políticas estadunidenses hacia los palestinos al negarse a apoyar un Estado palestino y trasladar su embajada en Israel de Tel Aviv a Jerusalén. Los palestinos quieren que Jerusalén oriental sea la capital de su futuro Estado.
Trump añadió que quiere lograr un acuerdo de paz palestino-israelí para el fin de su Gobierno y dijo que los palestinos “están regresando totalmente a la mesa [de negociaciones]”.

“Jerusalén no está en venta”, asegura Abás ante la Asamblea General de la ONU
El presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Mahmud Abás, defendió hoy ante Naciones Unidas que “Jerusalén no está en venta” y consideró que las recientes acciones de Israel y Estados Unidos suponen obstáculos para el fin del conflicto en Oriente Medio.
“Jerusalén no está a la venta. Los derechos del pueblo palestino no están aquí para ser negociados”, fueron las primeras palabras de Abás ante la Asamblea General de la ONU, antes incluso de la invocación a Alá con la que habitualmente inician sus discursos los líderes musulmanes.
El presidente palestino demandó además al mundo que repudie la ley “Estado-Nación” aprobada en Israel, calificándola de “racista”, y acusó a EU de ir en contra del proceso de paz con las decisiones tomadas bajo la Administración de Donald Trump.
Según dijo, los palestinos estaban “expectantes” ante la idea de Trump de lanzar una nueva iniciativa para la paz, pero las acciones de la Casa Blanca les han dejado “mudos”.
Abás insistió en que medidas como el reconocimiento de Jerusalén como capital de Israel “contradicen” el papel y el compromiso de EU con la paz.
Según insistió, EU ya no puede ser el único mediador en el conflicto, dada su parcialidad a favor de los israelíes, aunque se mostró abierto a que continúe en las discusiones como miembro del Cuarteto para la Paz.
Las acciones de Trump, recalcó, suponen una “amenaza” para la causa palestina, para la solución defendida por la comunidad internacional y son una “violación” de las resoluciones de Naciones Unidas.
Abás intervino ante la Asamblea de la ONU después de que Trump asegurase esta semana que le “gusta una opción de dos Estados” para Israel y Palestina, en lo que sería su primera muestra de apoyo a una solución de dos Estados para el conflicto, la promovida por Naciones Unidas.
El presidente estadunidense matizó rápidamente esa idea, abriendo nuevamente la puerta a una opción de un sólo Estado, subrayando que las dos posibilidades siguen sobre la mesa.
Abás dejó claro que los palestinos siguen comprometidos con la solución de dos Estados y con las negociaciones para lograrlo.
Según insistió, su Gobierno sigue tendiendo la mano al diálogo y apuesta únicamente por la paz y la no violencia.
Además, llamó a EU a dar marcha atrás a sus recientes decisiones, incluidos los fuertes recortes a las ayudas que ofrece a la población palestina.
Al mismo tiempo, Abás recalcó que el apoyo humanitario, incluso si se aumentase, no puede ser en ningún caso un sustituto de una solución política para el conflicto palestino-israelí.
Abás aprovechó además su discurso ante la ONU para pedir a todos los países que no han reconocido a Palestina que lo hagan y para que contribuyan a aliviar la difícil situación financiera de la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNRWA) tras los recortes de EU.
Lieberman le reprocha a Abás que no responda al acuerdo de paz de Israel y EU
Jerusalén, Israel, 27 de septiembre de 2018. El ministro de Defensa israelí, Avigdor Lieberman, dijo hoy que el presidente, Mahmud Abás, “sólo quiere ajustar cuentas” y reprochó que no diera respuesta ante la Asamblea de Naciones Unidas “al acuerdo de paz de Israel y Estados Unidos”.
“El discurso de Abu Mazen [apelativo de Abás] fue un discurso del no, no. Fue un inventario de todos los insultos y las desilusiones que sufrió desde el día en que nació, en lugar de dar una respuesta a la mano extendida de un plan de paz de Israel y Estados Unidos”, declaró en un comunicado.
Lieberman valoró “que a [Abás] sólo le interesa ajustar cuentas y degenerar la situación de conflicto de la zona” y advirtió de que se mantendrán firmes contra “cualquier intento que dañe las vidas de los ciudadanos (israelíes)”.
Abás insistió hoy en que las decisiones del Gobierno del presidente Donald Trump, como reconocer Jerusalén como capital de Israel, van contra la paz y que Washington no puede ser mediador, porque es “demasiado parcial hacia Israel”.
El presidente palestino aseguró que “continúan con la mano extendida a la paz” y la no violencia y afirmó que “no están en contra de las negociaciones”.
“Dimos la bienvenida a Trump cuando fue elegido y elogiamos su anuncio de un plan de paz, pero nos sorprendieron sus acciones en el proceso”, sostuvo.
“Incluso intensificó su ataque al derecho internacional reduciendo la ayuda humanitaria a refugiados y de los fondos a la Autoridad Nacional Palestina (ANP)”, añadió.