8 noviembre,2017 12:18 pm

Son inhabitables 2 colonias de Taxco afectadas por el sismo, dice nuevo dictamen del Fonden

En los asentamientos Martelas y Ruffo Figueroa, de Taxco, suman 253 familias damnificadas, informa el delegado de la Sedatu, José Manuel Armenta Tello. Con el paso de los días, la zona ha manifestado un continuo “movimiento físico” de la tierra, indica

Nota: Claudio Viveros Hernández
Foto: Jesús Eduardo Guerrero

Taxco, Guerrero.- En las colonias Martelas y Ruffo Figueroa, de Taxco, suman 253 familias damnificadas en una zona que se consideró después del sismo como de “alto riesgo” y ahora, de acuerdo con el último dictamen, es “inhabitable”, informó el delegado de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), José Manuel Armenta Tello.

Esto, de acuerdo con el Fondo de Desastres Naturales (Fonden), se traduce en una “reubicación” de los afectados, por lo que ahora se debe buscar un predio que permita albergar sin riesgo a las familias, previamente dictaminado para asegurar su habitabilidad, y que “no vuelva a pasar lo que ocurre en ambas colonias”.

Al término de una mesa de trabajo en un hotel de la ciudad, el delegado informó que, de acuerdo con un dictamen de Protección Civil estatal, confirmado por el Centro Nacional de Prevención de Desastres, en la zona existe un “alto riesgo” para los habitantes ante posible deslizamiento de una ladera, a consecuencia de sismo del 19 de septiembre pasado; con el paso de los días esa parte ha manifestado un continuo “movimiento físico” de la tierra, por lo que ahora se considera “inhabitable”.

Eso corrobora los dictámenes, del riesgo de vivir en esas colonias ubicadas en la salida norte de la ciudad, y por ello funcionarios federales, estatales y municipales tuvieron un encuentro con las familias damnificadas que habían solicitado otros estudios adicionales de geofísica y geotecnia para estar plenamente convencidos de la inhabitabilidad en esa zona.

Armenta Tello puntualizó que, al localizar el predio para reubicar a las familias tendrían la seguridad jurídica de la propiedad de su vivienda al entregarles también durante este procedimiento la escrituración correspondiente.

Detalló que la reubicación prevé los recursos suficientes para la adquisición de un terreno, para la urbanización que incluye introducción de servicios básicos de agua, electricidad, drenaje, disposición final de aguas residuales y el beneficio a quienes resultaron dañados de una o dos tarjetas que incluyen un apoyo institucional de 120 mil pesos, con participación federal del 75 por ciento y un 25 por ciento del gobierno estatal para que los afectados reconstruyan su vivienda.

Durante la reunión, Armenta Tello dijo que se optó, en Guerrero, Chiapas y Oaxaca, por la autoconstrucción asistida, ya que los afectados comprarán sus materiales, pagarán la mano de obra y decidirán la ejecución de sus viviendas, y si toman la asistencia técnica o no; el Ayuntamiento deberá observar que sean viviendas sismo-resistentes para que no se cometan errores.

Entre la resistencia de algunos damnificados a la reubicación, el delegado federal reconoció que, no se les otorgan los recursos que en algunos casos superan los costos de sus viviendas colapsadas, pero de “alguna manera sí se les está dando el empujón con el apoyo institucional”, que se pospondrá durante unos 10 días a causa de los trámites que implica y la posibilidad de que sean distribuidas las tarjetas a los afectados.

Advirtió que el “apoyo dependerá de que acepten la reubicación para que les sea entregado, y tendrían que renunciar a su propiedad”, en la que han habitado y que resultó dañada, porque en estos predios que se consideran “zona de alto riesgo, ya no podría haber asentamientos humanos”.

A la par, agregó que todo está condicionado a los resultados de los estudios adicionales de geofísica y geotecnia acordados entre las autoridades y los afectados en las colonias Martelas y Ruffo Figueroa, y de los que se espera confirmar el comportamiento de los movimientos de tierra y “se hace manifiesto en la carpeta asfáltica” de la carretera federal, con lo que se determina que una buena parte de la zona donde están ubicadas las colonias “sí tienen movimiento”.

La mesa de trabajo en un hotel duró más de tres horas y no se permitió la entrada a los medios; en el transcurso de los trabajados llegaron varios damnificados a los que uno de los vigilantes uniformados les impidió la entrada, y en respuesta varias mujeres empujaron la reja y, de paso, al empleado de seguridad que tuvo que desistir de su actitud y dejar pasar a los inconformes.

A la mesa de trabajo asistieron el jefe de la oficina del gobernador Héctor Astudillo Flores, Alejandro Bravo Abarca; la secretaria de Desarrollo Social, Alicia Zamora Villalba; el director de la Comisión de Infraestructura Carretera y Aeroportuaria del Estado de Guerrero (CICAEG), Javier Taja Ramírez; funcionarios de la secretaría de Protección Civil, y el alcalde de Taxco, Omar Jalil Flores Majul, con funcionarios del ayuntamiento.