Chilpancingo, Guerrero, a 13 de febrero de 2025.- Ejidatarios de Carrizalillo, municipio de Eduardo Neri (Zumpango), suspendieron negociaciones con la empresa minera canadiense Equinox Gold para la firma de un nuevo convenio, para el arrendamiento de sus tierras.
En un comunicado enviado a medios de comunicación, la mesa ejidal denunció presiones, amenazas y coacción de los “negociadores locales”, por lo que advirtieron que en adelante sólo dialogarán con una representación “de alto nivel” de la empresa y con capacidad para lograr acuerdos.
El 22 de enero, los ejidatarios denunciaron en conferencia de prensa que en el proceso del cierre de operaciones, la empresa minera Equinox Gold quería bajar el pago de la explotación de sus tierras y que había iniciado un despido masivo de trabajadores, “no ha cumplido con la infraestructura establecida en convenios”.
En tanto que el 29 de enero, el gobierno estatal informó en un boletín de prensa que “a través del diálogo y la concertación, logró un acuerdo entre la empresa minera Los Filos Equinox Gold y las localidades de Mezcala, Xochipala y Carrizalillo, de Eduardo Neri”.
Sin embargo, los ejidatarios informaron que el 6 de febrero los representantes del ejido enviaron una carta al presidente de la empresa canadiense Equinox Gold, Greg Smith, “para terminar con las especulaciones manejadas internamente por sus operadores locales, en las que recurrentemente han manifestado que nuestro ejido ha alcanzado una negociación exitosa y de futuro para la actividad minera”.
En el comunicado aclaran que si bien aceptaron iniciar un proceso, “que parecía nos llevaría al establecimiento de acuerdos concretos, incluyendo que, por primera vez se intentara de forma tripartita con las comunidades de Xochipala y Mezcala, los operadores locales de la empresa nunca dejaron de utilizar métodos de coacción y amenazas, que finalmente terminaron por derrumbar lo poco que habíamos avanzado en las reuniones previas”.
Los representantes agrarios aclaran que de parte de su ejido “la negociación se encuentra suspendida hasta que la empresa envíe gente responsable, respetuosa y capaz de construir, junto con nosotros, un proceso de diálogo en donde la imposición de cláusulas sin contenido y sustento dejen de ser la regla y se nos deje de presionar para que las firmemos, siempre con la reiterada amenaza de despidos o del cierre de la operación minera”.
Refieren que a partir de la carta enviada a Greg Smith iniciaron una lucha “por la reivindicación de lo que consideramos justo, dentro de esa relación tan asimétrica que desde hace años se nos ha impuesto y que con mucho trabajo, en cada convenio que firmamos, buscamos resarcir al menos un poco las consecuencias que sufrimos con dicha actividad”.
Indican que la postura del ejido es negociar, ya sea para continuar la extracción de mineral o para que la empresa inicie el cierre de la misma, “pero de ninguna manera negociaremos con imposición, sin diálogo respetuoso y menos si insisten en colocarnos como la causa del derrumbe de la actividad minera”.
Reprochan que ello ha generado fricciones con la población, los trabajadores, el resto de las comunidades y también con los actores políticos del estado, “quienes lamentablemente se han involucrado mostrando su apoyo incondicional a la empresa”.
Derivado de ello les piden a los actores públicos no intervenir más en este proceso “les agradecemos su presencia, pero para esta nueva etapa requerimos de políticos que hagan respetar nuestros derechos y no políticos que los vulneren, hecho que ya empezamos a corregir y vamos teniendo avances significativos que pronto haremos saber a la población”.
Los representantes del ejido indican en su escrito que han hecho saber a Greg Smith que “no tendremos interlocución con sus operadores locales y solicitamos una representación de alto nivel de la empresa, con capacidad de lograr acuerdos”.
Añaden: “Nuestra postura es negociar la continuidad o el cierre de la operación minera y cualquiera de las dos opciones que el señor Greg decida, tendrá que hacerlo con respeto hacia nosotros”.
Concluyen que, como siempre sucede, “cuando la relación se rompe entre nosotros y la empresa, hacemos un llamado para que la sociedad se mantenga alerta ante posibles agresiones, que dichos actores pretendan en contra nuestra”.
Texto: Zacarías Cervantes / Foto: Lenin Ocampo Torres – Archivo
