30 noviembre,2017 7:24 am

Tenemos una relación “intensa pero confusa” con la historia del país, dice Taibo II

Guadalajara, Jalisco, 30 de noviembre de 2017. Los mexicanos tienen una relación con su pasado intensa pero confusa.

Han recibido una debido a una educación deficiente que ha convertido en estatuas y placas a quienes verdaderamente hicieron la patria, afirma Paco Ignacio Taibo II, quien presenta hoy su libro Patria: La gloria y el ensueño que forjó una patria (Planeta, 2017).

El título va del periodo de 1854, con la caída del gobierno de Santa Anna, al año 1867, con el fusilamiento del emperador Maximiliano de Habsburgo, en Querétaro. Trece años en los que se dio la Guerra de Reforma, la separación del clero y el Estado, la resistencia a la invasión francesa y la promulgación de la Constitución de 1857.

En un estilo particular, los capítulos están narrados en segunda persona con la intención de generar un vínculo con el lector al presentarle directamente a personajes como Melchor Ocampo, Benito Juárez, Vicente Riva Palacio, Guillermo Prieto, Jesús González Ortega, José Santos Degollado, Leandro Valle, entre otros.

“Fue un momento en que la Nación se la jugó, una generación de liberales cargados de una humildad y heroísmo hasta la pobreza y locura. Estos son los héroes de la consistencia, de la regularidad, del decir ‘este país se hunde si no nos la jugamos’, recuerda el también activista.

“Es una lección de que sí se puede y cuando alguien diga que los mexicanos son agachones responderles que en ese periodo derrotaron al ejército conservador apoyado por la iglesia, a la intervención española, inglesa y francesa con el mejor ejército del mundo y luego el imperio de Maximiliano, ¿no que éramos agachones?”, responde el autor.

La redacción del libro fue un proceso de investigación exhaustivo que tuvo sus primeras notas hace 25 años y que al final reunió casi 2 mil fuentes en archivos, memorias históricas, investigación de historiadores, presentes como nota al pie de página al final de cada capítulo.

Después de entregar el manuscrito, el autor se tomó un descanso de la historia y escribió tres novelas cortas de ficción que será lo próximo en su trabajo editorial.

 

Nota: Yoana Rodríguez / Agencia Reforma/ Foto: Reforma.