15 febrero,2021 5:36 am

Un momento de esperanza

Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan

 

Justo en el 190 aniversario del fusilamiento del generalísimo Vicente Guerrero, llegaron a nuestro país a las 3 de la madrugada, 870 mil dosis de vacunas de la farmacéutica AstraZeneca, provenientes de Mumbai, India. De acuerdo con la Secretaría de Salud, las fuerzas armadas la distribuirán en 179 rutas terrestres, ocho rutas aéreas regionales y nueve rutas aéreas locales. Se vacunarán a personas mayores de 60 años, en 333 municipios de alta marginación de todo el país.

De acuerdo con información de Iván Hernández Díaz, delegado de Programas Sociales del gobierno federal en Guerrero, este domingo a las 2 de la tarde arribaron, vía aérea, a Chilpancingo 25 mil 500 dosis, que de inmediato fueron distribuidas a tres regiones y nueve municipios del estado. El gobierno federal dio preferencia para su aplicación a seis municipios de la Montaña de Guerrero, a saber: Huamuxtitlán, Xochihuehuetlán, Tlapa, Malinaltepec, Tlacoapa y Zapotitlán Tablas. Es decir, en la región conocida como la cañada, donde se encuentra la mayoría de la población mestiza que migra a Estados Unidos y donde se presentaron más casos de Covid-19.  Los tres últimos municipios son del pueblo me’phaa y se ubican en la parte más alta de la Montaña. El plan de vacunación es poder aplicar el biológico a todos los adultos mayores en una semana. Se han programado 16 puntos de vacunación para los municipios de la Montaña. En esta etapa, solamente se atenderá a dos municipios de la Tierra Caliente y uno de la Costa Grande.

Para garantizar la “red de frío”, los paquetes de las vacunas quedarán resguardados en los hospitales y centros de salud. Las autoridades regionales tendrán que valorar en qué otros espacios podrán aplicar las vacunas, tomando en cuenta las distancias y las dificultades para el traslado de las personas mayores. En este operativo participan el personal de salud del municipio que se encargará de aplicar las vacunas; los llamados “servidores de la nación” y encargados de los programas federales, como adultos mayores y sembrando vida, quienes se encargarán de todo el trabajo logístico y el registro de las personas. El resguardo y la seguridad de este operativo queda en manos de la Sedena, la Guardia Nacional y la Marina.

A partir de este lunes 15 de febrero iniciarán las vacunaciones después de las 10 de la mañana, una vez que se hayan organizado para iniciar los trabajos. A pesar de que no existe información amplia entre la población, la Secretaría del Bienestar cuenta con una información base de 278 mil llamadas que hicieron los “servidores de la nación” a personas que están inscritas en los programas federales. Por otra parte, también realizaron visitas domiciliarias y llamadas telefónicas, para preguntar a las personas si tienen interés en recibir la vacuna. También existen los registros que las personas mayores realizaron en la plataforma conocida como Mi vacuna www.mivacuna.salud.gob.mx,  que sirve como base para poder contactarlos y convocarlos a que acudan al puesto de vacunación correspondiente. A todos ellos y ellas, les indicarán el día y la hora para que asistan a la cita.

Por el momento, solo contamos con información de campo del municipio de Malinaltepec y con datos proporcionados por el presidente municipal Abel Bruno (Morena). Este domingo a las 17 horas arribó un helicóptero de la Sedena a la cabecera municipal con 3 mil 500 dosis, que fueron recibidas por personal de salud del hospital básico y trasladadas por la Guardia Nacional a ese centro hospitalario para su seguridad. La Brigada Correcaminos se encargará de citar a los adultos mayores y de organizar la aplicación en las comunidades de Tilapa, El Rincón y Malinaltepec. A partir de las 6 de la mañana estará el personal de salud para atender todas las indicaciones y preparar adecuadamente los lugares para la atención de las personas mayores. En la comunidad de El Rincón se tiene pensado realizar este trabajo en el plantel del Colegio de Bachilleres, por ser un espacio amplio que cubre las condiciones del resguardo de la vacuna. Este biológico debe de mantenerse auna emperatura de 2 a 8 grados, y una vez abierto el paquete tiene que aplicarse en un lapso de dos horas, de lo contrario su aplicación perderá eficacia.

Será un gran desafío para las autoridades municipales y todo el personal de las diferentes instituciones que se encargarán de hacer que funcione adecuadamente este plan de vacunación, que tendrá dos aplicaciones. La prueba mayor será que la población realmente acuda a los lugares asignados. Las problemáticas son diferentes en cada municipio. Las personas mayores de las cabeceras municipales de Xochihuehuetlán y Huamuxtitlán no tendrán grandes problemas para su desplazamiento, debido a que los centros de población son pequeños y fácilmente, con un voceo por las calles se podrá convocarlas. De igual manera, en las comunidades donde se instalará un módulo de vacunación. Los puntos críticos serán en la cabecera municipal de Tlapa, debido a la densidad de la población y a que son solo tres puntos de atención para un gran número de personas mayores. La falta de información puede generar complicaciones debido a que se desconoce cómo se brindará la atención, entendemos que puede suceder de forma parecida con el padrón de los productores de fertilizante. Mientras no se tenga un padrón consolidado, no hay certeza de que un gran número de adultos mayores está registrado para recibir la vacuna. Hay un sector que está informado y que probablemente se registró en la plataforma, sin embargo, hay un gran número de personas que desconoce este procedimiento y tiene dificultades para hacerlo. Por otra parte, está el padrón de los programas que pueden ayudar a ubicar a estas personas. El problema es que este ejercicio aún no se realiza. La principal tarea es ordenar este universo de adultos mayores con criterios muy claros y procedimientos muy precisos para no generar un caos, ni mucho menos perturbación o aglomeraciones innecesarias. Sería ideal tomar la propuesta del gobierno de la Ciudad de México, que aplicará las vacunas por orden alfabético, fijando los días que se atenderán para cada letra del primer apellido. No es tan fácil hacerlo en un contexto donde la información digital es de difícil acceso para un gran número de personas mayores.

En los municipios de la Montaña Alta, como Malinaltepec, Zapotitlán Tablas y Tlacoapa, el problema es diferente porque a pesar de que la población no es numerosa, la desventaja es que está dispersa. A pesar de que se instalen varios módulos en algunas comunidades, para varias personas mayores que se encuentran enfermas será muy complicado llegar al centro de vacunación. Esperamos que este trabajo lo realicen los servidores y servidoras de la nación, personal del gobierno federal y brigadistas universitarios, para que puedan hacer los recorridos de campo y ubicar a las personas mayores que requieran un traslado especial. Será muy necesario que las autoridades municipales estén atentas y dispuestas para facilitar estos apoyos, porque será difícil que el personal médico pueda andar casa por casa, debido a los cuidados que requieren estas vacunas.

Hay un punto de preocupación en la cabecera municipal de Tlacoapa, donde personas que fueron entrevistados para saber si están dispuestas a vacunarse, un número importante comentó que no, porque esa vacuna puede causar la muerte. Se corre pues el riesgo de que este rumbor influya en las comunidades vecinas del municipio. Hay una tarea muy importante de la autoridad municipal y las autoridades de salud para proporcionar información veraz, apropiada y en la lengua materna. La clave está en que la gente tenga elementos objetivos para decidir libremente.

Esperamos que aparte del cuidado que se tenga para transmitir la información también debe de prevenirse cualquier sesgo que se le quiera dar a esta campaña de vacunación, para evitar que no se contamine con intereses partidistas y electoreros. Es un momento de esperanza para que en la Montaña a los indígenas y mestizos, que en su mayoría se encuentran en condiciones de alta marginalidad, se les garantice el acceso a la vacuna como parte de un derecho constitucional que tienen como ciudadanos y ciudadanas, de recibir un servicio de salud gratuito. Entre más sean las personas mayores que logren vacunarse, estaremos en mejores condiciones para contener el contagio y evitar más muertes de hombres y mujeres que a su edad trabajaron para forjar una familia y están aún con fuerzas para guiar a las nuevas generaciones y disfrutar por lo menos, las travesuras de sus nietos.

Se tiene que vigilar que en realidad se apliquen las vacunas a las personas mayores y al personal médico que está en la primera línea de atención a los pacientes Covid-19. Tenemos que desarraigar esa práctica corrupta del influyentismo, como ya sucedió en el Centro de Salud de Tlapa, donde fueron vacunadas personas cercanas a la directora, dejando un mal precedente, por el cinismo con el que se actúa y por la falta de ética profesional. Esperamos que tampoco se reproduzcan malos tratos, ni prácticas racistas contra personas mayores que no pueden escribir y hablan una lengua indígena. Este momento de esperanza es para que, en la Montaña, las vacunas se apliquen a todos y a todas, preferentemente a los más pobres.